PASTA GRATINADA
300 g de pasta tiburón
1 diente de ajo
500 ml de nata líquida
1 hoja de laurel
100 g de queso mascarpone
2 cucharadas soperas de pimentón dulce
1 yema de huevo
80 g de Idiazábal rallado
1 chorro de vino dulce (tipo moscatel)
40 g de mantequilla
Aceite de oliva
Sal y pimienta
Pelar el ajo y aplastarlo.
En una cacerola, llevar la nata líquida a ebullición junto con el ajo y la hoja de laurel.
Dejar reducir hasta obtener una consistencia de jarabe.
Colar y dejar enfriar.
En una ensaladera, montar con varillas la reducción de nata, el mascarpone y el pimentón dulce, y salpimentar.
Añadir la yema de huevo, el Idiazábal, 1 gota de aceite y 1 chorrito de vino dulce, mezclar bien y reservar en la nevera.
Poner a cocer la pasta durante 8 min. en agua hirviendo salada.
Escurrirla, dejarla enfriar sobre una fuente con 1 chorrito de aceite de oliva y mezclarla después con la salsa.
Precalentar el horno a 180 ˚C.
Poner la pasta en una placa.
Poner unos dedos de mantequilla por encima, espolvorear la pasta con el resto del Idiazábal rallado y rociar con 1 chorro de aceite de oliva.
Hornear y gratinar unos 12 min.
Retirar del horno y dejar reposar 5 min.