498. ¿Qué forma es la correcta: I’m writting to ask you something o I’m writing to ask you something?
El past participle y el -ing del verbo write se encuentran entre las palabras en las que los estudiantes de idiomas cometen más faltas: WRITING (con una sola t y sin e) y WRITTEN (con doble t):
I’m writting to ask you something.
I’m writing to ask you something.
She’s writen two books.
She’s written two books.
El infinitivo acaba en la letra e, lo que indica que el sonido vocálico anterior no es corto. El past participle, pronunciado con una /i/, se forma con una doble t a continuación de la i, para indicar que sí es una vocal corta. El -ing conserva la longitud de la vocal de write, por eso solo se escribe con una t; aunque al llevar la terminación -ing elimina la necesidad de incluir al final una e muda. Poniendo las cosas en perspectiva, el verbo write no es una excepción.
Un idioma con vocales cortas y largas requiere un sistema (o sistemas) para representar como debe pronunciarse al leer. Añadir una -e muda indica que el sonido vocálico es largo: name, these, smile, bone y rule. Se intentaron otras soluciones, pero esta tenía la ventaja de que ya existían palabras que terminaban en -e y además permitía distinguir made de mad, them de theme, write de writ, pop de the Pope y cut de cute. ¡Por algo los escolares la llaman la “magic e”!
El primer intento de duplicar las consonantes para mostrar que la vocal anterior es corta (written, en lugar de writen) no resultaba práctico con palabras cortas de uso frecuente y contenido gramatical (on, at, in, an, up...). Así que esta medida no prosperó en este tipo de palabras, salvo alguna excepción como off, donde la doble consonante sirve para diferenciarla de of.
En otro tipo de palabras cortas esa norma tampoco tuvo éxito y, tras un largo proceso, finalmente solo se duplicaron las consonantes cuando la vocal iba seguida de las letras f, s, z, l y r, como en jazz, tell, kiss, loss y stuff, que así se diferencian de cat, set, lid, frog y mud. En palabras como happen, kettle, simmer, bottom y puddle, sí se duplica la consonante (aunque no se trate de las letras f, s, z, l o r) porque son palabras más largas.
La idea de duplicar letras también se aplicó a las vocales. En palabras como three, bee, green y feel se duplica la e para indicar que se trata de una vocal larga. De todas formas, este tipo de soluciones generaron nuevos problemas. Por ejemplo, ¿cómo diferenciar palabras que se pronuncian igual pero tienen significados diferentes (see y sea)? Como se puede imaginar, se decidió que unas palabras terminaran con doble e y otras con ea, aunque esto generó otras complicaciones, como el hecho de que ea se use tanto para representar un sonido largo (please) como corto (speak). Por no hablar de la confusión de que el presente y el pasado de read se escriban igual pero se pronuncien diferente.
Tampoco parece tener mucho sentido duplicar las consonantes para marcar una vocal breve cuando se usan dos vocales para representar un sonido breve, por lo que se escribe sleeping, no sleepping o cheated, no cheatted.
Por último, aunque algún día se lograra desarrollar un sistema perfecto, este funcionaría únicamente si todo el mundo pronunciase todo igual y continuara haciéndolo así por siempre jamás. Por desgracia, las cosas no funcionan de este modo, de ahí que la grafía ss de grass carezca de sentido para los de Londres (donde la pronuncian /gra:s/), pero sea perfectamente lógica para los de Liverpool (allí sonaría /græs/). Eso sí, la oo de good ya no le resulta útil a nadie.