112. ¿Hay alguna diferencia entre usar flammable o inflammable para describir algo que arde con facilidad?
Aunque ambas tienen el mismo significado, se prefiere flammable porque provoca menos malentendidos. De hecho, flammable se acuñó a principios del siglo XIX precisamente para evitar las confusiones que provocaba el adjetivo inflammable, que muchos pensaban, erróneamente, que quería decir que algo no ardía.
El prefijo in- está en el origen de esta confusión. Muchas palabras que lo incorporan tienen un significado negativo, aportado precisamente por este prefijo que indica que algo ‘no es’: inactive, incapable e indelible, por ejemplo. Pero inflammable se deriva de la palabra inflame, que significa ‘en llamas, arder’. Invigorate es otro ejemplo de lo mismo, pues significa ‘vigorizar, producir vigor o energía’, no destruirla o impedir que se produzca. Palabras de este tipo suelen llevar el prefijo en-: enrage (‘enfurecer, llenar[se] de furia’), endanger (‘poner en peligro’) y engulf (‘meterse dentro de’).
Entre 1920 y 1960 las compañías de seguros y los servicios de prevención de incendios presionaron a las autoridades para que se pusiera flammable en lugar de inflammable, lo que ha tenido como resultado que inflammable haya desaparecido de los contextos en los que se usa como advertencia. Sin embargo, cuando se usa metafóricamente para describir una situación potencialmente conflictiva, seguimos utilizando inflammable:
Flammable liquid. Keep away from heat.
Observers have described the situation on the region as inflammable given the failure of peace talks.
Cuando aparece non-flammable en las especificaciones de productos, especialmente ropa y mobiliario, significa que no es probable que ese artículo arda, no que no pueda llegar a arder.