CORAZÓN DE CHOCOLATE Y FRESA

Ingredientes (4-6
p.):
250 ml de leche
125 g de mantequilla
5 g de azúcar
1 pizca de sal
125 g de harina
4 huevos
9 fresas
hojas de menta
Para la
trufa
500 ml de nata
200 g de chocolate intenso
Elaboración
1 Hierve en una cazuela la leche con la
mantequilla, el azúcar y la sal. Mezcla con una varilla. Cuando
empiece a hervir, añade la harina de golpe y remueve bien. Retira
la cazuela del fuego e incorpora los huevos de uno en uno (no hay
que añadir el siguiente huevo hasta que el anterior quede
perfectamente integrado). Introduce la masa en una manga
pastelera.
2 Marca un corazón sobre un trozo de papel
de horno, dale la vuelta y colócalo sobre una placa de horno.
Siguiendo las marcas del corazón, cubre los bordes con botones de
pasta choux. Hornéalo a 170 °C durante 30 minutos. Deja que se
enfríe.
3 Para hacer la trufa, calienta la nata en
un cazo y, cuando hierva, viértela en un bol. Añade el chocolate
troceado y remueve bien hasta que se disuelva. Deja templar e
introduce la mezcla en el congelador. Cuando esté semicongelada,
sácala, móntala con una batidora de varillas eléctrica y pásala a
una manga pastelera.
4 Con ayuda de un cuchillo, abre el corazón
por la mitad (como si fuera un bocadillo) y rellénalo con 6 fresas
laminadas y la trufa. Decora con el resto de las fresas y unas
hojas de menta.
// Este postre está
elaborado con pasta choux, una masa
originaria de Francia pero que llegó rápidamente a España, donde se
hizo muy popular. Con esta masa se elaboran unos pastelillos que,
dependiendo de la zona, adoptan nombres diversos como «relámpago»,
«flauta» o «pepito».