Más sobre los sospechosos
Manuel estaba en deuda con los dos sospechosos.
• Susana pensaba que Manuel le debía muchas cosas que había ido acumulando durante su vida sentimental, como ropas que le había regalado, mantelerías, ropas de cama y hasta el mueble-bar, que como uno de sus últimos caprichos, había comprado la víctima para su casa. Susana y Manuel habían roto sus esperanzas de formar un hogar; pero él no había reconocido la deuda que ella le reclamaba.
• Jesús, el joven amigo de Manuel, había sido acostumbrado por éste a obtener toda clase de favores económicos. Podría decirse que, durante temporadas enteras, Jesús había dependido de los favores económicos de Manuel. Pero, de manera brusca, eso se había acabado. Primero, como se ha dicho, se enfrió la amistad y, posteriormente, éste cortó el grifo del dinero. Jesús consideraba que Manuel le debía dinero y cariño.