BERENJENAS CON BECHAMEL, GAMBAS Y JAMÓN
Tiempo de microondas: 12 o 15 minutos
INGREDIENTES
• 600 g de berenjenas violetas
• 250 g de gambas frescas con cabeza
• 100 g de queso emmental rallado
• 100 g de jamón serrano picado
• 2 cucharadas de mantequilla
• 90 g de harina
• % de litro de leche
• sal, pimienta blanca y nuez moscada recién molidas
1. Lavar las berenjenas enteras debajo del grifo, secarlas, cortarlas en rodajas de un centímetro de grueso, espolvorearlas abundantemente con sal y tenerlas así durante media hora para que pierdan el amargor.
2. Lavarlas, a continuación, muy bien para que no estén saladas, escurrirlas y secarlas con papel absorbente de cocina.
3. Cocerlas ahora bien tapadas, a potencia máxima, hasta que estén tiernas, en unos 4 o 5 minutos. Probar siempre con tiempos cortos para no pasarse y evitar que aparezcan resecas y arrugadas. Si el recipiente fuera de poca superficie y no cupieran sin amontonar, hacerlas en dos veces para que se cocinen uniformemente. Escurrirlas del líquido que sueltan, aunque no hemos puesto ninguno.
4. Si las gambas son muy frescas, lavarlas, escurrirlas, pelarlas y cocer sus cabezas y pieles con 200 g de leche a potencia máxima durante 3 minutos. Tener cuidado para que la leche no se salga, ya que, como en el fuego, tiende a subir. Triturar este conjunto con la minipímer o la trituradora que se tenga, y colarlo por un colador de malla muy fina o por el «chino».
5. Confeccionar ahora una bechamel espesa con la harina, la mantequilla y la leche indicadas en la receta, utilizando también la de cocer las cabezas de las gambas. Salpimentar y añadir la nuez moscada. Para saber cómo se confecciona la bechamel, consultar la pág. 181.
6. Rallar el queso, si no se tiene rallado, y picar muy fino el jamón.
7. En una fuente, poner las berenjenas ya cocidas, encima el jamón, luego las gambas crudas y cubrir con la bechamel.
8. Espolvorear por encima el queso rallado y cocinar, a potencia máxima, hasta que el queso se funda y el conjunto de la fuente esté hirviendo, pues se tienen que cocer las gambas, que estaban crudas.
9. Si se quiere gratinar, meter en el horno tradicional con el gratinador muy fuerte hasta que el queso no solo se funda, sino que forme también una bonita costra tostada.
10. Esta receta se puede hacer de la misma manera con rodajas de calabacines.
11. Con esta misma receta, también pueden hacerse calabacines o berenjenas rellenos. En este caso, cocer primero las verduras abiertas por la mitad —ver la receta siguiente—. A continuación, vaciarlas con cuidado para no romper la piel, con una cucharita de café o con el «sacabolas» del melón o de la patata.
Mezclar la bechamel con esta pulpa troceada, el jamón y las gambas, todos picados, y con esta mezcla rellenar las verduras, ya blandas, espolvoreando por encima el queso rallado.
12. Si hacéis esta receta con calabacines, escoged los de piel verde clarito y pintitas amarillas que son más finos y cuya piel no amarga en absoluto por lo que se debe siempre conservar.
13. Si queréis que estas verduras rellenas aparezcan doradas en su superficie introducirlas, al espolvorearlas con el queso, en el horno tradicional con el gratinar encendido al máximo pero teniendo cuidado de que no se quemen ni se doren demasiado.