DIRTY DANCING
(Dirty Dancing, 1987, Emile Ardolino)
Kellerman’s Mountain House Resort. Estancia de tumbarse a la bartola. Familia bien con hijas sedientas de novedades. Cuerpo de monitores hambrientos por carne fresca. El baile como método de amansar a las fieras. Baby Houseman, el patito feo, encuentra a su príncipe azul entre casetas residenciales y espacios al aire libre. Swayze ganándose el pan con su fibrosa y musculada estampa, ya tendría tiempo de preocuparse en ser actor más adelante. Jennifer Grey creyéndose la nueva estrellita del mañana (al poco perdida en un hoy farragoso). Una banda sonora acorde con la temática, batidora de sonidos de un pasado que no estaba tan alejado de esos 80 pasteleros. Esto son vacaciones, y no las de Santillana.