¿Qué hizo Lucas después?
El director se hizo rico con La guerra de las galaxias, pero el rodaje le había dejado exhausto. A partir de entonces se centró en el trabajo de productor de las dos secuelas de la película, de la saga de Indiana Jones, que rodó su amigo Spielberg, y algunos otros títulos más. Creó también su propio estudio y se puso a la cabeza de un entramado de compañías que se dedican a todos los aspectos técnicos de la elaboración de películas: sonido, imagen y, sobre todo, efectos especiales.
Cuando en 1994 el director anunció la continuación de su famosa serie galáctica, con tres entregas más que contarían los antecedentes de los personajes que el público ya conocía, millares de aficionados se volvieron locos de alegría. En todos estos años habían llegado a convertir su afición en casi un culto. «Es como si a un católico, después de leer el Nuevo Testamento, le dieran la oportunidad de acceder al Antiguo», decía uno de ellos. La amenaza fantasma, episodio I (1999), dirigida por el propio Lucas, volvió a repetir el descomunal éxito de taquilla y no defraudó a los fans, que ya esperan ansiosos el estreno de las dos nuevas películas previstas para los próximos años.