Una cuestión de química

Alargó la mano al mismo tiempo que hablaba, y pude ver que la tenía moteada de otros parchecitos parecidos y descolorida por el efecto de ácidos fuertes.

Watson en Estudio en escarlata.

Una de las herramientas de las que se sirve la ciencia forense es la química, en la que Holmes posee, según el dictamen de Watson, conocimientos «precisos pero dispersos». Ya el primer encuentro entre el detective y su fiel ayudante tiene lugar en un laboratorio de química:

Había un solo estudiante en la habitación, y estaba embebido en su trabajo, inclinado sobre una mesa apartada. Al ruido de nuestros pasos, se volvió a mirar y saltó en pie con una exclamación de placer.

—¡Ya di con ello! ¡Ya di con ello! —gritó a mi acompañante, y vino corriendo hacia nosotros con un tubo de ensayo en la mano—. Descubrí un reactivo que es precipitado por la hemoglobina y nada más que por la hemoglobina[164].

Este reactivo ha sido objeto de continuas discusiones. Hay quien piensa que se debe atribuir a Holmes el descubrimiento de la primera prueba química que permitió saber con certeza si una mancha era de sangre. Pero Holmes no solo busca cómo detectar la sangre sino que en su laboratorio casero realiza experimentos, que a veces llegan a asustar a Watson, con pequeñas explosiones o nubes de humo, y que le ocupan días enteros: «Yo lo dejaba por la noche, inclinado sobre una retorta o un tubo de ensayo, y lo encontraba en la misma posición cuando bajaba a desayunar por la mañana[165]». En el siglo XIX, la química fue la ciencia más asombrosa hasta que fue superada por la biología, gracias a la teoría de la evolución de Darwin; del mismo modo que en el siglo XVI lo fue la astronomía, en el XX la física y en el XXI lo está siendo la neuropsicología. En parte, la fama de la química se debió a los descubrimientos y narraciones de Humphry Davy, el presidente de la Royal Society al que ya hemos tenido ocasión de conocer, fundador de la electroquímica e inventor de una lámpara de seguridad que salvó la vida de miles de mineros en todo el mundo. No cabe duda de que Davy fue uno de los científicos que Conan Doyle tomó como modelo para Holmes, quien muestra lo reveladora que puede ser una reacción química en aventuras como «El tratado naval»:

En la mano derecha tenía un trocito de papel de tornasol.

—Llega en un momento crítico, Watson —dijo—. Si el papel permanece azul, es que todo va bien. Si se pone rojo, significa la vida de un hombre. —Lo introdujo en el tubo de ensayo y el papel adquirió un color carmesí apagado y sucio—. ¡Hum!, ya me lo había imaginado yo —exclamó.

Holmes también demuestra grandes conocimientos de balística: «Este tercer proyectil, como claramente indican las astillas en la madera, se ha disparado desde el interior mismo de la habitación[166]». En esta ciencia, sin embargo, Holmes no fue un pionero, pues se atribuye al célebre comisario Vidocq haber extraído por primera vez, en 1822, una bala de un cadáver para averiguar qué pistola podría haberla disparado[167].

No tan elemental
cubierta.xhtml
sinopsis.xhtml
titulo.xhtml
info.xhtml
cap01.html
cap02.html
cap03.html
cap04.html
cap04_0001.html
cap04_0002.html
cap04_0003.html
cap04_0004.html
cap04_0005.html
cap05.html
cap06.html
cap06_0001.html
cap07.html
cap07_0001.html
cap07_0002.html
cap07_0003.html
cap07_0004.html
cap08.html
cap08_0001.html
cap08_0002.html
cap08_0003.html
cap08_0004.html
cap08_0005.html
cap09.html
cap09_0001.html
cap09_0002.html
cap09_0003.html
cap09_0004.html
cap10.html
cap10_0001.html
cap10_0002.html
cap10_0003.html
cap10_0004.html
cap11.html
cap11_0001.html
cap11_0002.html
cap11_0003.html
cap11_0004.html
cap11_0005.html
cap11_0006.html
cap11_0007.html
cap11_0008.html
cap12.html
cap12_0001.html
cap12_0002.html
cap12_0003.html
cap12_0004.html
cap12_0005.html
cap12_0006.html
cap12_0007.html
cap12_0008.html
cap12_0009.html
cap13.html
cap13_0001.html
cap13_0002.html
cap13_0003.html
cap13_0004.html
cap13_0005.html
cap13_0006.html
cap14.html
cap15.html
cap15_0001.html
cap15_0002.html
cap16.html
cap16_0001.html
cap16_0002.html
cap16_0003.html
cap17.html
cap17_0001.html
cap17_0002.html
cap17_0003.html
cap17_0004.html
cap18.html
cap18_0001.html
cap18_0002.html
cap18_0003.html
cap18_0004.html
cap18_0005.html
cap19.html
cap19_0001.html
cap19_0002.html
cap19_0003.html
cap19_0004.html
cap20.html
cap20_0001.html
cap21.html
cap21_0001.html
cap21_0002.html
cap21_0003.html
cap22.html
cap22_0001.html
cap22_0002.html
cap22_0003.html
cap22_0004.html
cap22_0005.html
cap22_0006.html
cap23.html
cap23_0001.html
cap23_0002.html
cap23_0003.html
cap23_0004.html
cap23_0005.html
cap23_0006.html
cap23_0007.html
cap23_0008.html
cap23_0009.html
cap23_0010.html
cap23_0011.html
cap23_0012.html
cap23_0013.html
cap23_0014.html
cap24.html
cap24_0001.html
cap25.html
autor.xhtml
notas.xhtml