Jueves, día 4
SEMANA 49
CIENCIA
El dilema del prisionero
Dos criminales son detenidos por un robo pero la policía no tiene pruebas suficientes para procesarlos. Separan a ambos sujetos y les hacen la misma oferta: si los dos confiesan, sólo pasarán 2 años a la sombra. Si uno de ellos confiesa pero el otro no, el que confiese quedará libre y el otro pasará 10 años en prisión. Sin embargo, si ninguno de los dos dice nada, es decir, si confían el uno en el otro, ambos serán encarcelados 6 meses. Ninguno sabe qué es lo que dirá el otro. ¿Es mejor mantenerse callado o cantar? Esta situación hipotética se conoce como el dilema del prisionero, y el primero en proponerlo fue el matemático Albert W. Tucker. Se trata de una cuestión de gran importancia en la teoría de los juegos, la economía, la evolución y la psicología.
Prisionero B no dice nada |
Prisionero B confiesa |
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Prisionero A no dice nada |
Ambos son encarcelados 6 meses. |
El prisionero B es puesto en libertad; El prisionero A pasa 10 años en prisión. |
Prisionero A confiesa |
El prisionero A es puesto en libertad; El prisionero B pasa 10 años en prisión. |
Ambos son encarcelados 2 años. |
La opción más lógica para el prisionero A parece ser traicionar a su compañero y confesar. Las consecuencias son mejores, pero sabe que el prisionero B probablemente piense lo mismo y entonces ambos terminarán encarcelados durante 2 años. Por supuesto, si pudieran confiar el uno en el otro, sólo estarían 6 meses en prisión.
En 1980, el investigador político Robert Axelrod llevó a cabo un experimento que denominó dilema del prisionero repetido. Básicamente consistía en que los participantes representaran el dilema del prisionero una y otra vez, a veces con el mismo compañero y otras con uno diferente. Los jugadores podían utilizar la información que hubiesen obtenido de los encuentros anteriores. Algunas personas desplegaron estrategias codiciosas tendentes a la traición y otros desarrollaron estrategias altruistas tendentes a la confianza en los demás. A lo largo del tiempo, los jugadores altruistas tomaron ventaja y terminaron ganando.
OTROS DATOS DE INTERÉS
1. Se considera que dos países envueltos en una carrera armamentística están jugando al dilema del prisionero. Pueden invertir una gran cantidad de dinero y tiempo en aumentar su arsenal y mantenerse a la altura del otro o pueden ponerse de acuerdo para desarmarse. Pero ¿cómo pueden estar seguros de que el otro país no sigue acumulando armas en secreto?
2. Los machos en el reino animal a menudo muestran comportamientos que se ajustan al dilema del prisionero. ¿Presumes sólo de lo que tienes, te amilanas o te embarcas en una pelea de gallos? Las mejores estrategias en el reino animal parecen tomar un poco de cada uno de estos enfoques.