Lunes, día 1
SEMANA 22
HISTORIA
Pedro el Grande
El zar Pedro el Grande (1672-1725) gobernó Rusia de 1682 a 1725, convirtiendo la nación en la mayor potencia mundial durante esos 43 años de reinado. Gobernó como monarca absoluto, siguiendo el modelo del rey francés Luis XIV. Incluso construyó un extraordinario palacio en su capital, San Petersburgo, con la intención de superar al de Versalles.
Antes de la llegada de Pedro al trono, Rusia no era ni europea ni asiática. Los rusos eran cristianos. Este país de crecimiento descontrolado, más grande que toda Europa junta, tenía frontera con los antiguos imperios asiáticos de China y Persia. La mayor parte del territorio ruso había estado bajo el poder del antiguo Imperio mongol.
Pedro llevó a Rusia hacia el ámbito europeo. Trasladó la
capital de Moscú a San Petersburgo, una ciudad que fundó en el mar
Báltico. Buscó estrechar lazos con los países europeos, adoptó
costumbres europeas en la vestimenta y fue el primer líder ruso que
visitó Occidente. Pedro reorganizó el ejército y el gobierno rusos
y los adaptó a los estándares europeos.
En el ámbito personal, el zar era rudo, temperamental y muy bebedor. En 1698 un observador británico escribió: «Con demasiada frecuencia muestra falta de juicio, acompañada de inestabilidad de temperamento». Además, Pedro era un gigante de más de dos metros de altura.
Durante dos siglos tras la muerte de Pedro el Grande en 1725, e Imperio ruso siguió siendo la potencia más grande de Europa. Sin embargo, la autocracia de los zares y el vasallaje, que no se abolió en Rusia hasta 1861, frenaron el desarrollo de una clase media rusa sólida. La estirpe de Pedro dirigió Rusia hasta la revolución de 1917.
OTROS DATOS DE INTERÉS
1. Para acabar con las tradicionales barbas rusas, Pedro estableció un impuesto de 100 rublos para los nobles que quisieran llevarla y otro de un kopek para los plebeyos.
2. Después de la revolución comunista de 1917, la capital rusa volvió a trasladarse a Moscú. El nombre de San Petersburgo se cambió por el de Leningrado en honor a Vladimir Lenin, pero la ciudad volvió a recuperar su antigua denominación tras la caída de la Unión Soviética, en 1991.
3. El palacio que mandó construir Pedro el Grande en la actualidad es el Museo Hermitage de San Petersburgo, una de las pinacotecas más grandes del mundo.