Miércoles, día 3
SEMANA 20
ARTES PLÁSTICAS
Rembrandt
Rembrandt van Rijn (1606-1669) es el artista más importante de la escuela holandesa, el más conocido debido a la excelencia e innovación de sus retratos. Rembrandt nació en la ciudad holandesa de Leiden y estudió junto a Pieter Lastman en Ámsterdam. Después de regresar a casa y poner en marcha con éxito un taller durante varios años, volvió a trasladarse a la capital en 1631 y permaneció allí el resto de su vida.
En los inicios de su carrera artística, Rembrandt intentó trabajar el estilo barroco con escenas dramáticas tan de moda en aquella época. Sin embargo no tuvo éxito al competir con maestros tales como Peter Paul Rubens (1577-1640). Sus pinturas no alcanzaban el nivel de idealización de las de sus contemporáneos italianos y flamencos. En su obra La ceguera de Sansón, de 1636, representó a un héroe de la Biblia derrotado y patético, algo que desagradó tanto al destinatario de la pintura que se la devolvió al artista.
Sin embargo, en el mundo del retrato, especialmente cuando se trataba de representar varias figuras, Rembrandt disfrutó de un éxito inmediato. En su obra Lección de anatomía del doctor Tulp (1632), por ejemplo, captó las expresiones de varios cirujanos al reaccionar frente a la disección que se estaba realizando ante sus ojos. Los retratos de ese tipo que se habían realizado hasta entonces mostraban a los médicos alineados formalmente. En el año 1624 Rembrandt recibió el que sería el encargo más importante de su vida: un retrato de grupo de una compañía de milicia civil. En la pintura, La compañía militar del capitán Frans Banning Cocq y el teniente Willem van Ruytenburch aparece una compañía preparándose para un desfile festivo en lugar de para una batalla propiamente dicha. Esta obra es conocida por el nombre de La ronda de noche, un título que surgió de la capa de barniz oscuro, ya retirada, que llevó a pensar a los que la contemplaban que se trataba de una escena nocturna. En la actualidad, este retrato de más de cuatro metros de ancho se puede contemplar en el Rijksmuseum de Ámsterdam.
El estilo de Rembrandt fue evolucionando de manera significativa con el paso del tiempo. Su representación de las emociones fue cada vez más sutil y sugerente a medida que iba dejando atrás las técnicas teatrales de sus inicios. El gran número de retratos que realizó, más de 60, refleja igualmente su desarrollo como artista y como individuo. Sus poses engreídas y fantasiosas del principio fueron dando paso gradualmente a la fatigada dignidad y sabiduría de un maestro experimentado.
Tras superar una serie de crisis financieras, Rembrandt se retiró de la vida pública. Sin embargo, siguió recibiendo encargos de envergadura, como por ejemplo La sociedad de tejedores (1662), en el que cinco inspectores textiles levantan la vista como si su conversación se hubiese visto interrumpida por el espectador.
Rembrandt también fue un diestro grabador. Experimentó con varias técnicas, papeles y tintas, y reutilizó sus láminas de cobre de manera que muchos de sus grabados son realmente únicos.
Debido al hecho de que Rembrandt poseía un importante estudio y tenía a varios ayudantes trabajando con él y siguiendo su estilo, se le han atribuido no pocos trabajos tras su muerte. En 1968, un equipo de historiadores del arte holandeses creó el Proyecto de Investigación Rembrandt cuyo fin era investigar las atribuciones de autoría falsas. El proyecto concluyó que sólo habían llegado hasta nosotros 350 de las pinturas de Rembrandt.