El presente caso no ha sido investigado por mí. Lo hizo, en su momento, mi admirado Luis Ramírez Reyes, un veterano investigador mexicano. En uno de mis viajes a México me lo contó.
La experiencia la vivió una mujer a la que llamaremos Claudia. Intenté conversar con ella, pero declinó la invitación. Quería olvidar…
Esto fue lo que contó a Ramírez Reyes:
Yo tenía problemas con mi esposo…
Estábamos a punto de separarnos…
Yo luchaba por salvar mi matrimonio, tanto por mis hijos como por nosotros… Yo le quería…
La verdad es que ignoraba por qué había dejado de amarme… Fueron muchos años de casados… No comprendía la situación…
Una noche, ya en mi cuarto, con la lámpara del buró encendida, y sumida en mi pena, solicité a mi madre, ya fallecida, que me guiara en aquella angustiosa situación… Quería saber qué debía hacer. ¿Luchaba por mi matrimonio o dejaba que se hundiera?…
Apagué la luz y, en ese momento, apareció mi suegro…
Estaba al pie de la cama…
No podía creerlo. ¡Llevaba dos años muerto!…
Estaba aterrorizada…
¡Era transparente! Veía a través de su cuerpo. Veía el librero situado detrás…
Portaba su chamarra favorita…
Tenía las manos en los bolsillos…
Me miró, fijamente, y habló sin hablar…
No emitió sonido alguno, pero yo le escuché en mi cabeza…
Y respondió a la pregunta que tenía en la mente: «¡Déjalo ir! Él tiene otras cosas que hacer».
Encendí la luz de inmediato y desapareció…
No podía creer lo que me había pasado…
Me puse histérica…
Después llegó mi esposo y me reprendió. Dijo que estaba loca…
Luis Ramírez Reyes insistió:
—¿Era tu suegro? ¿Cómo puedes estar segura?
—Lo conocía. ¡Era él! Vestía un pantalón color beige, igual que la chamarra. Tenía su misma altura y el bigote. Yo le apreciaba. Nos veíamos poco, pero fue el único de la familia de mi pareja que se portó correctamente conmigo.
—¿Te sirvió el mensaje? —preguntó Luis.
—Ya lo creo. Dejé que hiciera su vida. Estaba con otra mujer… Terminó marchándose. Nos divorciamos… Hoy agradezco muchísimo el consejo de mi difunto suegro. Soy muy feliz con mi nueva etapa…