Otra vez los tigres
Después de hacer el amor hablamos de los tigres. Fue Pauline quien empezó. Su cuerpo cálido estaba echado junto al mío, y quiso hablar de los tigres. Dijo que el sueño del viejo Chuck le había hecho pensar en ellos.
—Me pregunto cómo podían hablar nuestro idioma —dijo.
—Nadie lo sabe —contesté—. Pero podían hablarlo. Charley dice que a lo mejor hace mucho tiempo fuimos tigres y nos transformamos, pero ellos no. No lo sé. De todos modos, es una idea interesante.
—Nunca oí sus voces —dijo Pauline—. Por aquel entonces yo era una niña y sólo quedaban unos cuantos tigres, ya viejos, y apenas salían de las colinas. Eran demasiado viejos para ser peligrosos, y siempre los cazaban.
»Tenía seis años cuando mataron al último. Recuerdo que los cazadores lo trajeron a yoMUERTE. Había cientos de personas con ellos. Los cazadores dijeron que lo habían matado en las colinas aquel mismo día, y que era el último tigre.
«Trajeron el último tigre a yoMUERTE y todo el mundo vino con ellos. Lo cubrieron con leña y empaparon la leña con aceite de truchasandía. Echaron litros y litros. Me acuerdo de que la gente arrojaba flores al montón y lloraba porque era el último tigre.
»Charley encendió una cerilla y prendió el fuego. Ardió con un gran resplandor naranja durante horas y horas, y el humo se mezcló con el aire.
»Ardió hasta que no quedaron más que cenizas, y entonces, en ese mismo momento, los hombres comenzaron a construir el criadero de truchas de yoMUERTE, justo donde había ardido el tigre. Cuesta pensar en ello cuando estás allí bailando.
»Supongo que te acuerdas de todo eso —dijo Pauline—. Tú también estabas allí. Estabas al lado de Charley.
—Es cierto —contesté—. Tenían unas voces hermosas.
—Yo no las oí nunca —dijo Pauline.
—Quizá fuera mejor así —dije.
—A lo mejor tienes razón —dijo Pauline—. Tigres. —Y no tardó en quedarse dormida en mis brazos.
Su sueño intentó convertirse en mi brazo, y luego en mi cuerpo, pero yo no se lo permitía porque de repente me sentí muy inquieto.
Me levanté, me puse el mono y me fui a dar uno de esos largos paseos que doy por la noche.