ABANDONA EL DIOS A ANTONIO8
CUANDO de repente, a medianoche,
se escucha una procesión invisible pasar
con música y voces exquisitas,
no te entristezcas en vano por el abandono de tu suerte,
los trabajos fallidos,
los planes de tu vida que se esfumaron.
Como si lo esperaras desde antes, con valentía,
despídete de la Alejandría que se va.
Sobre todo no te engañes, no te digas que fue un sueño,
que tus oídos mintieron,
no te inclines ante tan vanas esperanzas.
Como si lo supieras desde antes, con valentía,
como corresponde a alguien de tu rango
a quien perteneció esta ciudad,
acércate a la ventana con paso fírme y escucha emocionado,
pero sin lloriqueos o quejas de cobarde.
Escucha con íntimo placer,
atiende a la música secreta de la procesión,
y despídete,
di adiós a la Alejandría que ahora pierdes.
1911