PLEGARIA POR LA VEJEZ
GUÁRDEME Dios de los pensamientos
que sólo se piensan en la mente;
quien canta una canción perdurable
piensa con la médula del hueso;
a todo cuanto hace sabio a un anciano
debe dársele alabanzas;
oh, ¿qué soy que no pareciera
un necio por amor al canto?
Ruego —pues se extinguió la palabra de moda
y retoma nuevamente la plegaria—
que pueda parecer, aunque muera viejo,
un hombre necio y apasionado.
[De Luna llena en marzo, 1935]