31. ¿Por qué son bizcas las liebres?
El hombre es uno de los pocos seres vivientes cuyos dos ojos están dispuestos para ver simultáneamente un objeto cualquiera. El campo visual de su ojo derecho casi coincide con el del izquierdo.
La mayoría de los animales, por el contrario, miran con cada ojo separadamente. Ven los objetos con menos relieve que nosotros, pero su campo visual es mucho más amplio.

Figura 151 (izquierda). Campo visual de los dos ojos del hombre. Figura 152 (derecha). Campo visual de los dos ojos de la liebre.
En la Figura 151 se muestra el campo visual de hombre. Cada uno de sus ojos abarca horizontalmente un ángulo de 120', pero ambos ángulos casi se superponen entre sí (se supone que los ojos están fijos).
Compárese este dibujo con el de la Figura 152, en que se representa el campo visual de una liebre. Este animal tiene los ojos muy separados y ve lo que hay delante y lo que hay detrás de él. Los campos visuales de sus ojos se cubren entre sí por delante y por detrás. Ahora está claro por qué es tan difícil acercarse a una liebre sin que se asuste. No obstante, como se desprende del dibujo, la liebre no ve lo que tiene delante del mismo hocico; si quiere ver un objeto muy próximo tiene que girar la cabeza.
Casi todos los animales ungulados y rumiantes tienen la facultad de la visión "multilateral".

Figura 153. Campo visual de los ojos del caballo.
En la Figura 153 se ve la disposición de los campos visuales del caballo. Estos campos no se cubren entre sí por detrás, pero el animal no tiene más que volver un poco la cabeza para ver los objetos que hay detrás de él. Las imágenes visuales son en este caso menos nítidas, pero el animal puede vigilar hasta el menor movimiento que pueda producirse en torno a él. Los animales feroces, que son rápidos y atacan en general por sorpresa, no tienen la facultad de ver a su alrededor. Estos poseen visión "binocular", que les permite determinar exactamente la distancia a que tienen que saltar.