Capítulo 5. Viaje en un proyectil de cañón
Como resumen de nuestras charlas sobre las leyes del movimiento y de la gravedad, vamos a analizar el viaje fantástico a la Luna que de una manera tan amena relató Julio Verne en sus novelas "De la Tierra a la Luna" y "Alrededor de la Luna". Ustedes recordarán, naturalmente, que los miembros del Club de los cañones de Baltimore, condenados a la inactividad después de terminar la guerra en América del Norte, decidieron fundir un cañón colosal, cargarlo con un proyectil hueco enorme, tripulado por algunos pasajeros, y por medio de un disparo lanzar este vagón-proyectil a la Luna.
Esta idea, ¿es realmente fantástica? Ante todo, ¿se le puede comunicar a un proyectil la velocidad suficiente para que abandone para siempre la superficie de la Tierra?