Jim
ANEXO AL INFORME DEL INSPECTOR JAMES CLEMO PARA LA DOCTORA FRANCESCA MANELLI
TRANSCRIPCIÓN DE LA GRABACIÓN HECHA POR LA DOCTORA FRANCESCA MANELLI
PRESENTES, EL INSPECTOR JAMES CLEMO Y LA DOCTORA FRANCESCA MANELLI
Las notas que registran las observaciones sobre el estado mental y la conducta del inspector Clemo, en los pasajes en los que no quedan de manifiesto en sus respuestas, están en cursiva.
FM: He leído su informe de lo que ocurrió el último día de la investigación del caso de Benedict Finch.
Asiente brevemente.
FM: Siento mucho que las cosas salieran mal ese día.
JC: Eso es poco decir.
FM: ¿Qué tal se encuentra últimamente?
No para de moverse, no puede quedarse quieto. Su mirada va de un lado a otro por la habitación. Todos sus movimientos hablan de necesidad de huida. No me responde.
FM: ¿Puedo ser sincera con usted?
JC: Por favor.
FM: Casi hemos agotado las sesiones previstas, las que el DIC está dispuesto a pagar. Llegó tarde hace dos sesiones y la semana pasada simplemente no apareció. Me preocupa el grado de compromiso que tiene con este proceso.
JC: No me pasa nada. Me siento mucho mejor, en mi cabeza quiero decir.
FM: Eso no es suficiente, inspector Clemo. Esa decisión la tengo que tomar yo.
JC: Ya se lo he dicho: me encuentro mejor.
FM: ¿Quiere saber lo que pienso?
Eso le pilla desprevenido y su respuesta es un poco irascible.
JC: ¿No se supone que todo esto va de lo que pienso yo?
FM: Mi evaluación profesional de la situación es que evitó nuestra última sesión porque cada vez le duele más hablar. Lo que significa que hemos llegado justo al punto en el que es absolutamente necesaria su asistencia.
Se toca el nacimiento del pelo con los dedos. Tiene signos de fatiga profunda en el rostro y también son evidentes en su lenguaje corporal. No hace falta ser un profesional para darse cuenta de ello.
FM: ¿Cuándo fue la última vez que durmió una noche entera?
JC: No me acuerdo.
FM: ¿Ha habido alguna mejoría en su insomnio desde que empezamos estas sesiones?
Clemo niega con la cabeza despacio, resignado.
FM: ¿Sabe por qué?
No espero a que responda.
FM: Es porque no está participando totalmente en este proceso. Y si no lo hace, no podemos trabajar con la finalidad de encontrar un tratamiento que mejore su calidad de vida, dentro de la que se incluyen el insomnio y los ataques de pánico, todo. Hasta la fecha, en todas nuestras sesiones, solo puedo decir que sus respuestas a mis preguntas se centran en evitarlas. Debe de ser agotador para usted, ¿no es así? Debe de extenuarle esquivar mis preguntas, pensar constantemente en formas de preservar esa fachada de hombre duro. Lo que tengo que preguntarle ahora es: ¿Por qué quiere malgastar tanta energía en evitar este proceso cuando sería mucho más fácil que se abriera por fin a él? No soy nueva en esto, inspector Clemo, he trabajado con muchas personas en situaciones similares a la suya y las he ayudado.
JC: ¿Y cuál diría que es mi situación, doctora Manelli?
FM: Sufre una depresión grave y debilitante que le produce insomnio y ataques de pánico, y todo eso ha afectado a su capacidad para hacer su trabajo. Basándome en nuestras conversaciones, diría que tiene su origen en una combinación de factores que surgieron durante el caso Benedict Finch.
JC: ¿Y cuáles cree que son esos factores?
FM: Dígamelo usted. ¿Cuáles cree que son?
Su cara parece imperturbable.
JC: Creo que ese es su trabajo.
FM: Mi trabajo es ayudarle. Déjeme. Hable conmigo.
Clemo se queda sentado inmóvil durante un momento, después apoya la cabeza en las manos. Solloza. Suena horrible y estrangulado, pero eso es lo que estaba esperando. Es mi oportunidad.
FM: Participe en un juego conmigo.
JC: ¿Qué juego?
FM: Voy a decirle una palabra y quiero que me diga lo que siente al respecto. ¡No! No me lo discuta, solo hágalo. ¿Lo hará?
Se aprieta los ojos con los dedos intentando contener las lágrimas.
FM: Emma.
Recupera el control de sus emociones y entonces el silencio de la habitación parece infinito, enorme. Pero justo cuando creo que lo he perdido, habla.
JC: La quería.
FM: Lo sé.
JC: Mucho.
FM: ¿Todavía la quiere?
JC: Sí.
FM: ¿La ha visto después del caso?
JC: No.
FM: ¿La echa de menos?
Me mira y sus ojos arden por algo.
JC: La echo de menos todos los días. Echo de menos los meses que no hemos pasado juntos y echo de menos el futuro que creía que íbamos a tener, porque sin ella todo me parece vano, vacío, es… totalmente plano. ¡Joder!
Este es el tipo de respuesta franca que estaba esperando. Contengo la respiración y espero porque necesita recuperarse un poco antes de continuar. Sigo con mucha cautela.
FM: Bien. Le voy a dar otro nombre.
Solo me mira con los ojos enrojecidos y cansados, con un punto de derrota. Ha entrado en mi juego. Siente que le he vencido, pero no es así.
FM: Joanna May.
JC: Debería haberlo visto cuando la interrogué. Nunca me voy a perdonar por eso. Nunca.
FM: Usted no es responsable de lo que Joanna May le hizo a ese niño.
JC: Si le hubiéramos puesto fin antes, todo habría sido diferente. Al menos le habríamos ahorrado a Ben Finch esa noche en el bosque.
FM: Usted no es responsable.
JC: Pero sí soy responsable de haber tomado la decisión equivocada, de haber ido a por Nicky Forbes. Eso fue cosa mía.
FM: Si no he entendido mal, esa fue una decisión que tomó de acuerdo con la inspectora jefe Fraser.
JC: Era yo el que no quería soltarla. Creía que era ella, así que fui a por ella. Pero era la persona equivocada. Me puse en evidencia.
FM: Le voy a decir otro nombre. Lo está haciendo muy bien.
Se encoge un poco, como si ya supiera lo que voy a decir.
FM: Benedict Finch.
JC: Debería haber estado ahí. En el bosque. Al final. Debí estar allí.
FM: ¿Y por qué le importa tanto?
JC: Porque todo el tiempo era todo por él. Por su sufrimiento, porque todos sabíamos que lo estaría pasando mal. Y perdí mi oportunidad de evitárselo y de estar con él al final.
FM: ¿Cree que le habría ayudado que usted estuviera allí con él?
JC: Quería estar con él, consolarlo.
Me emocionan profundamente sus palabras. Son humildes y conmovedoras. Tengo que hacer un gran esfuerzo para que no se me note.
FM: ¿Es eso lo que lo mantiene despierto por las noches, inspector Clemo?
JC: Todo me mantiene despierto por las noches. Me obsesiona. Se reproduce una y otra vez. No me deja descansar. Cometí errores. Destrocé a esa familia y dejé que ese niño perdiera el brillo de sus ojos.
FM: ¿Mantiene el contacto con la familia?
JC: Los he visto una vez.
FM: ¿Cómo fue?
Vuelve a llorar, pero esta vez son solo unas pocas lágrimas que ruedan por sus mejillas y le mojan la camisa al caer. No dice nada.
FM: ¿Me creería se le digo que es posible dejar todo esto atrás? No olvidarlo, pero seguir adelante y convertirlo en una parte manejable de su vida.
JC: No me lo merezco.
FM: Sí que se lo merece. No tiene por qué ser el final de su carrera, inspector Clemo. Este caso y todo lo relacionado con él representan un momento muy importante de su vida, por supuesto, pero no tienen que definirlo ni hundirlo. No se haga eso. Tiene que verlo como algo con lo que puede aprender a vivir, algo que puede superar e incluso usar como base para construir algo mejor. Benedict y su familia estarán haciendo lo mismo. Piense en su vida como un camino en el que tiene que avanzar, no un lugar en el que está atrapado. Puede manejar esto de forma apropiada, con respeto, y si lo hace, es posible que pueda dejarlo atrás. Si confía en mí, yo puedo guiarle en ese proceso.
Sinceramente, en ese momento no estoy segura de que el inspector Clemo quiera de verdad recuperarse.
FM: ¿Lo hará, Jim? ¿Confiará en mí?
Se produce un silencio que se alarga mientras espero su respuesta. Es un buen hombre. Quiero que se cure. Por fin deja escapar el aire lenta y deliberadamente. Cuando abre la boca para hablar, no estoy segura de si va a ser el principio o el fin de su intento de recuperación.
JC: Lo intentaré.