Seals, todos misteriosamente muertos
Posteriormente, la Casa Blanca condecoró secretamente al grupo de fuerzas especiales que intervinieron en la operación: los Navy Seals. Las mejores tropas de los Estados Unidos, muy bien pertrechadas, perfectamente preparadas y duramente entrenadas; si bien es cierto que se produjeron filtraciones por parte de un exoficial de inteligencia naval, llamado Milton William Cooper, quien afirmaba que existían por encima de los Seals unos cuerpos especiales secretos de altísimo nivel, denominados los Delta Team33. Al parecer, el acto de la condecoración de los Seals se produjo en privado, según se informó en mayo de 2011, y fue el presidente en persona quien les entregó las condecoraciones, manteniendo las identidades de los soldados en secreto, pero posteriormente trascendió que era el Navy Seal Team 6.
Sin embargo, hubo una serie de cabos sueltos difíciles de explicar. Por ejemplo, un vídeo de la Agencia de Noticias Pakistaní en el que se entrevistaba a un testigo ocular de toda la operación llamado Muhammad Basheer, quien relataba con precisión los sucesos que rodearon la operación de las fuerzas especiales, y que en nada se parecían a la versión oficial presentada por Estados Unidos. Cuenta el señor Basheer que llegaron tres helicópteros y de uno de ellos solamente bajaron unos 10 o 12 hombres. Después del fragor de la batalla, el helicóptero volvió a recogerlos. Cuando estos hombres montaron en el aparato, este explosionó. Todos murieron. No hubo supervivientes y, desde luego, no se encontraron cadáveres, solo algunos restos humanos repartidos por la zona. Quedaron hechos picadillo.
Esto da lugar a que nos hagamos algunas preguntas… ¿Explotó el helicóptero que transportaba el cuerpo de Bin Laden y a los Seals? ¿Cómo pudo asegurar la Casa Blanca que no hubo heridos? ¿A qué Seals condecoró Obama secretamente si, según el testigo, todos murieron en la operación? Nos preguntamos también cómo, después de unos 40 minutos de combate en un terreno que no conocían, con la dificultad añadida que supone la oscuridad de la noche, pudieron internarse dentro de un fortín de Al Qaeda donde se encontraban los hombres más fieros y mejor preparados de Bin Laden y, aun así, conseguir salir victoriosos y sin ninguna baja.
Pero la noticia más impactante apareció el 6 de agosto de 2011 cuando se produjo un atentado en Afganistán en el que, según fuentes oficiales de la Casa Blanca, todos los miembros del Navy Seal Team 6 que intervinieron en la operación de captura de Bin Laden habían muerto al ser derribado por las fuerzas insurgentes afganas un helicóptero en el que viajaban 25 miembros de los Seals, curiosamente los mismos que habían sido condecorados por el presidente Obama. En aquel atentado murieron un total de 38 personas.
Con los Seals muertos y Bin Laden en el fondo del mar, habían desaparecido todos los protagonistas de la operación Gerónimo, algo que, sin lugar a dudas, eliminaba cualquier posible futura fisura que la sospechosa versión oficial pudiera mostrar. Pero hubo un pequeño problema. Uno de los Seals del Team 6 no viajaba en aquel helicóptero, el último testigo vivo que, casualmente, también desaparecería meses más tarde.