NOTAS
[1] León-Sotelo, Trinidad de, «María Teresa León, memoria del olvido», en Los Domingos de ABC, págs. 12-16.
[2] Litoral, núms. 64-65-66.
[3] Alberti, A. (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, Madrid, Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, pág. 17.
[4] Ibid., págs. 23-24.
[5] Ibid.
[6] Ibid.
[7] Saiz Viadero, J.R.: «Zenobia Camprubí y las republicanas en el exilio», en Cortés Ibáñez, E. (coord.) (2010): Zenobia Camprubí y la Edad de Plata de la cultura española, Sevilla, Universidad Internacional de Andalucía-Fundación Caja Rural del Sur, pág. 308.
[8] Marcillas Piquer, I. (2007): «María Teresa León: la intrahistoria con alma de mujer». Estudis Transversals: Literatura I Altres Arts en les Cultures Mediterrànies, Universidad de Alicante, pág. 1. http://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/2070/3/Mar%C3%ADa%20Teresa%20Le%C3%B3nRUA.pdf.
[9] Rodrigo, A. (1996): Mujeres para la historia. La España silenciada del siglo XX, Madrid, Compañía Literaria, pág. 110.
[10] Grandes, A.: «Memoria de la hermosura», en VV.AA. (2005). María Teresa León. Memoria de la hermosura, Fundación Autor. Madrid. Iberautor Promociones Culturales, págs. 10 y 12.
[11] Salvat, R.: «Aproximación al universo creativo de María Teresa León», en VV.AA. (2005). María Teresa León. Memoria de la hermosura, Fundación Autor. Madrid. Iberautor Promociones Culturales, pág. 54. I
[12] El documento eclesiástico citado aparece recogido por Juan Carlos Estébanez Gil en su libro María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Valladolid, 2003, pág. 34.
[13] León, M.T. (1999): Memoria de la melancolía, Ed. de G. Torres Nebrera, Castalia, Madrid, pág. 166.
[14] Entre los destinos de Valladolid y Logroño hay constancia de que el capitán Ángel León pasó un mes en el Regimiento de cazadores Alcántara de Valencia.
[15] Palabras recogidas por Aitana Alberti en su artículo «Un aroma a violetas» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 3 de diciembre de 1993. pág. 22.
[16] Ibid.
[17] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 86.
[18] Ibid., págs. 86-87.
[19] La arboleda compartida se empezó a publicar por entregas bimensuales en ABC Cultural desde 9 de octubre de 1993 a 1997.
[20] Alberti, A.: «Un aroma a violetas». ABC Literario, 3 de diciembre de 1993. pág. 22.
[21] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 147.
[22] Ibid., pág. 148.
[23] Ibid., págs. 148-149.
[24] Ibid., págs. 89-90.
[25] Ibid., pág. 151.
[26] Ibid., pág. 150.
[27] Ibid., pág. 151.
[28] Ibid., págs. 88-89.
[29] Ibid., pág. 151.
[30] Ibid., págs. 217-219.
[31] Ibid., pág. 142.
[32] Ibid.
[33] Ibid.
[34] Ibid., pág. 159.
[35] Ibid., pág. 77.
[36] Ibid., pág. 92.
[37] Ibid., pág. 141.
[38] Ibid., pág. 151.
[39] Ibid., pág. 152.
[40] «María Teresa León, memoria del olvido», reportaje de Trinidad de León-Sotelo publicado en Los domingos de ABC, 29 de marzo de 1987, pág. 142.
[41] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 154.
[42] Gregorio Torres Nebrera localiza los versos en la Égloga IX de Juan del Enzina (vv. 193-200) tomada del Cancionero de 1509.
[43] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 154.
[44] Ibid., págs. 90-91.
[45] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, Aguilar, Madrid, págs. 202-203.
[46] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 144.
[47] Breve ensayo publicado en Cursos y conferencias. Revista del Colegio Libre de Estudios Superiores, Buenos Aires, vol. xxiv, núms. 139-140-141, número especial dedicado al centenario de Galdós, octubre-diciembre de 1943, págs. 87-97
[48] «Siguió la vida —escribió María Teresa León en Memoria de la Melancolía—. Crecimos. Jimena se casó con un aragonés. Miguel Catalán, físico. Era el hombre que aquella casa necesitaba, tan feliz, tan alegre, tan agradecido de vivir. Entró en casa de los Menéndez Pidal trayendo la voz impostada de manera distinta, más sonora, más alta. Lo encontré en San Rafael, aquella casa de la sierra de Guadarrama que tanto me dice. Fuimos amigos. Un día, pasado mucho tiempo, nos encontramos en Buenos Aires», pág. 155.
[49] Citado por Benjamín Prado en Los nombre de Antígona, op. cit., pág. 207.
[50] Ibid.
[51] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 84-85.
[52] Ibid., pág. 143.
[53] Ibid., págs. 85-86.
[54] Ibid., págs. 73-74.
[55] Sobre el terreno discursivo de la sexualidad en la obra de María Teresa León se recomienda la lectura del artículo de la profesora Alda Blanco (Universidad de Wisconsin) «Las voces perdidas: silencio y recuerdo en María Teresa León», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, Madrid, Fundación Autor, págs. 193-201.
[56] Ibid., pág. 107.
[57] Ibid., pág. 88.
[58] Ibid., págs. 150-151.
[59] Ibid., pág. 104.
[60] El Papa Moscas, núm. 2180, 28 de diciembre de 1919, Sección Álbum.
[61] Sobre la creación de estos cursos de verano de iniciativa hispano-francesa, existe una tesina inédita de Nathalie Courtial que fue leída en la Universidad de Toulouse-Le Mirail en 1994. Llevaba el título de Los cursos de verano de Burgos (Curso «Marimée-De Sebastián») Orígenes y evolución de una institución de cooperación educativa franco-española.
[62] Ibid., pág. 157.
[63] Declaraciones de Salvador Arias publicadas en el diario ABC el 31 de octubre de 2003, pág. 54.
[64] Esquivias, Ó. (2003): «La memoria silenciada», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, Madrid, Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, pág. 124.
[65] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 108 y 88.
[66] Ibid., pág. 156.
[67] Ibid., pág. 105.
[68] Salvador Seguí (1886-1923) fue uno de los personajes más destacados del anarcosindicalismo catalán y español de principios del siglo XX. Tras participar activamente en la Semana Trágica de Barcelona destacó como orador, organizando y difundiendo la CNT, y alcanzó la secretaría general de la organización en Cataluña. Su ideario consistía en dar nuevo impulso a la lucha proletaria sin olvidar las esencias de su sueño anarquista. Lo resumió en la obra Anarquismo y sindicalismo. Pocos días después de ser asesinado, la colección La Novela de Hoy, núm. 46, publicó un relato de Salvador Seguí, Escuela de rebeldía (historia de un sindicalista), de tintes autobiográficos y proféticos que narra la vida de Juan Antonio Pérez Maldonado, un emigrante andaluz que llega a Barcelona y comienza a frecuentar locales como el café Español, donde irá conociendo el ambiente de la época y los ideales de un hombre nuevo.
[69] Ibid., págs. 155-156.
[70] Ibid., pág. 157.
[71] El cuento En los tentáculos de los siglos fue publicado por la profesora Ángeles Ezama Gil, de la Universidad de Zaragoza, en la revista Castilla. Estudios de Literatura, núm. 3 (2012), págs. 419-437.
[72] Gabriele D’Annunzio (1863-1938) fue condecorado por Mussolini en la Primera Guerra Mundial por su heroica intervención contra los austriacos, concediéndole el título de Príncipe de Montenevoso. Está considerado uno de los precursores del fascismo italiano dado su ideario nacionalista. Como miembro de la Real Academia Italiana de Lengua, tras su fallecimiento, fue despedido con funerales de Estado.
[73] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 160.
[74] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 210.
[75] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 165.
[76] Ibid., pág. 163.
[77] Ibid., págs. 164-165.
[78] Ibid., pág. 164.
[79] Ibid.
[80] Ibid., pág. 165.
[81] Torres Nebrera, G. (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), Ediciones de la Torre, Madrid, pág. 18.
[82] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 160-161.
[83] El calificativo de raza sentada aparece en el número 10 de la revista zaragozana Nordeste (primavera de 1935), dentro de su sección «Hondero en acción». También se cita en el trabajo de José-Carlos Mainer «Las escritoras del 27 (con María Teresa León al fondo)», en Homenaje a María Teresa León, Universidad Complutense de Madrid, Cursos de Verano, El Escorial, 1990.
[84] Eguizábal, R. (2003): «María Teresa León en el germen del compromiso», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 189.
[85] Thébaud, F.: «La Primera Guerra Mundial: ¿La era de la mujer o el triunfo de la diferencia sexual?» en Historia de las mujeres en Occidente. 5. El siglo XX, pág. 42.
[86] Bordonada, Á. E. (1989): Novelas breves de escritoras españolas (1900-1936), Madrid, Castalia-Instituto de la Mujer, págs. 11-12.
[87] Santacruz, P. (1993): La España Moderna, 1907. Citado por Teresa Bordons, Género sexual, literatura e historia: España de finales de siglo a la II República, Tesis Doctoral. University of California, San Diego, págs. 87-88.
[88] Mangini, S. (2001): Las modernas de Madrid. Las grandes intelectuales españolas de la vanguardia, Madrid, Península, pág. 101.
[89] Gómez Ocaña, J. (1919): El sexo, el hominismo y la natalidad, Saturnino Calleja, Madrid.
[90] Marañón, G. (1920): Biología y feminismo, Imprenta del Sucesor Enrique Teodoro, Madrid.
[91] Novoa Santos, R. (1929): La mujer, nuestro sexto sentido y otros esbozos, Biblioteca Nueva, Madrid.
[92] González Blanco, E. (1930): Las mujeres según los diferentes aspectos de su espiritualidad, Reus, Madrid.
[93] García Sánchez, F.: «La Venus actual» en La Esfera, núm. 319, 14 de febrero de 1920; cit. por Susan Kirkpatrick (2003) en Mujeres, Modernismo y vanguardia en España (1898-1931), Madrid, Ediciones Cátedra-Universidad de Valencia-Instituto de la Mujer, pág. 220.
[94] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 513-514.
[95] Ibid., pág. 160
[96] Salinas, P./Guillén, J. (1992): Correspondencia (1932-1951), edición, introducción y notas de Andrés Soria Olmedo, Barcelona, Tusquets, pág. 124.
[97] Esquivias, Ó., op. cit., pág. 123.
[98] Foxá, A. de (1991): Madrid, de corte a checa, prólogo de Jaime Siles, Barcelona, Bibliotex, pág. 130.
[99] Sobre este viaje, José Antonio Río del Val, burgalés que emigró a Argentina en 1962, publicó en 2003 un libro titulado María Teresa León en la Argentina de 1928. Vida-Obras, Buenos Aires, editorial Geear.
[100] Prado, B., op. cit., pág. 212.
[101] Las conferencias del Club Español fueron publicadas ese mismo año en un cuaderno de 98 páginas editado por la imprenta Tailhade & Cia.
[102] Se trata del artículo titulado «Argentina. La tierra de todos», Diario de Burgos, 3 de abril de 1928.
[103] «Algo sobre hispanoamericanismo», Diario de Burgos, 11 de abril de 1928.
[104] «Castilla en la Argentina», Diario de Burgos, 4 de junio de 1928
[105] El Hogar, 17 de agosto de 1928.
[106] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 213-214.
[107] Prado, B., op. cit., págs. 209-210.
[108] Carta de Aitana Alberti León fechada en La Habana el 17 de febrero de 2001 y citada por Benjamín Prado en su libro Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 209-210.
[109] Testimonio recordado por Antonio Lucas en su artículo «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas de estar sola», Magazine. El Mundo, núm. 183, 30 marzo 2003.
[110] Hay constancia de que impartió una conferencia en el Casino Numancia de Soria el 14 de julio de 1929, tras su vuelta de Argentina.
[111] En el número 85 de La Gaceta Literaria, de 1 de julio de 1930, María Teresa León publicaba un artículo titulado «La Narradora» en el que ponía sobre el papel la necesidad de sustituir el modelo trasnochado de una oralidad literaria por una nueva pedagogía y por nuevas narradoras, pensando en las maestras de la escuela moderna.
[112] Estébanez Gil, J.C.: «María Teresa León. De sus inicios literarios al exilio argentino», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 33.
[113] Palabras de Gonzalo Menéndez Pidal recogidas por Benjamín Prado en su libro Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 214-215.
[114] Estébanez Gil, J.C.: «María Teresa León. De sus inicios literarios al exilio argentina», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 32.
[115] Medardo Fraile recuerda en su trabajo «Los tres sueños de María Teresa León», que Menéndez Pidal fue «el gran enamorado de la vida de los romances tradicionales en sus formas diferentes y a través de las regiones en que se cantan o se cantaban y de las generaciones que los recuerdan. El romance de la Malmaridada fue uno de ellos y el segundo libro de cuentos de María Teresa se titularía La bella del mal amor». Ver en Altolaguirre, M. (ed.) (2003). Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., págs. 57-58.
[116] La Gaceta Literaria, núm. 85, 15 de julio de 1930, pág. 12.
[117] La Esfera, 6 de septiembre de 1930.
[118] Blanco y Negro, Madrid, núm. 28, abril de 1929.
[119] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 514-515.
[120] Ver al respecto el trabajo de Juan Aguilera Sastre: «Las fundadoras del Lyceum Club Femenino Español», en Brocar. Cuadernos de Investigación Histórica, núm. 35, 2011, págs. 65-90.
[121] Prólogo de Carmen Martín Gaite al libro Celia, lo que dice, de Elena Fortún (Madrid, Alianza, 1992, págs. 16-17).
[122] Paloma Ulacia Altolaguirre (1990): Concha Méndez. Memorias habladas, memorias armadas, Madrid, Mondadori, pág. 49.
[123] Antonina Rodrigo comenta al respecto: «Otros ataques vinieron de la revista Iris de Paz, órgano oficial de la Archicofradía del Inmaculado Corazón de María, y del Comité Ejecutivo de la Obra de la Buena Prensa, en el que calificaban de “liceómanas, excéntricas y desequilibradas” a las mujeres del Club…». Ver A. Rodrigo (1994): María Lejárraga, una mujer en la sombra, Madrid, Ed. Vosa, pág. 220.
[124] Ulacia Altolaguirre, P.: Concha Méndez. Memorias habladas, memorias armadas, op. cit., pág. 49.
[125] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 515.
[126] Texto recogido por Manuel Bayo en su libro Sobre Alberti (CVS, Madrid, 1974, págs. 181 y 193 y citado por Shirley Mangini en Las modernas de Madrid, op. cit., págs. 91-92.
[127] En el altar
Mayor del monasterio luce una artística imagen de la santa, obra
del escultor burgalés Diego de Siloé. Desde finales del siglo
XVIII, cada año —como nos recuerda Francisco Blanco—, por la
festividad de la Ascensión del Señor, se organiza una popular
romería al santuario, en la que se hace una rogativa a la santa
conocida como «la Tabera», en la que todos los romeros practican el
burgalés juego de «la taba». Ver Blanco, F.: «Burgos inédito: María
Teresa León Goyri. Verbo y figura», publicado el 6 de mayo de 2013
en Burgospedia la enciclopedia del conocimiento
burgalés:
https://burgospedia1.wordpress.com/2013/05/06/burgos-inedito-maria-teresa-de-leon-goiri-verbo-y-figura-por-francisco-blanco/
[128] Aub, M. (1985): Conversaciones con Luis Buñuel, Madrid, Aguilar, pág. 313.
[129] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 1. Primero y Segundo libros (1902-1931), Madrid, Alianza Editorial-Biblioteca Alberti, pág. 330.
[130] Colinas, A. (2003): «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 115.
[131] La muerte temprana de Alberto Valero Martín —falleció a los 59 años— impidió que reanudara su obra literaria interrumpida por la guerra. A su gran actividad como abogado penalista, actuando como defensor de varios escritores durante la época primorriverista, hay que unir una vida dedicada a la producción de poesía, teatro y un ingente repertorio de novelas que vio la luz en colecciones populares de los años veinte. Sólo en la serie La Novela de Hoy, que dio comienzo el 19 de mayo de 1922, Valero Martín llegó a publicar quince obras.
[132] Testimonio recogido por Clara Isabel de Bustos en el diario ABC el 16 de diciembre de 1988, pág. 56.
[133] Moreiro, J. (2008): Españoles excesivos, Madrid, Edaf, pág. 393.
[134] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 100.
[135] Para conocer con más detalle la relación entre el poeta y la pintora remito a mi ensayo biográfico Maruja Mallo. La gran transgresora del 27, Temas de hoy, Madrid, 2004.
[136] Clark, Marga (2002): Amarga luz (Biografía de Marga Gil Roësset), Circe, Madrid.
[137] Texto recogido por María Asunción Mateo en su libro Rafael Alberti. De lo vivo y lo lejano, Madrid, Espasa-Calpe, 1996, págs. 121-122.
[138] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 1, op. cit., págs. 330-331.
[139] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 31.
[140] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 1, op. cit., págs. 328-329.
[141] Prólogo de Rafael Alberti a Memoria de la melancolía, Barcelona, Círculo de Lectores, 1987.
[142] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 99-100.
[143] Cita recogida por Benjamín Prado en Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 222
[144] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 167.
[145] Alberti, R. (1990): «Mi vida con María Teresa León», en el volumen Homenaje a María Teresa León. Universidad Complutense (Cursos de Verano de El Escorial, 1990), pág. 9.
[146] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 202-203.
[147] Salinas, P./Guillén, J. (1992): Correspondencia (1932-1951), op. cit., pág. 124.
[148] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 28.
[149] Alberti, R. (1990): «Mi vida con María Teresa León», op. cit., pág. 9.
[150] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 1, op. cit., pág. 331.
[151] Ibid., pág. 332.
[152] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 224-225.
[153] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 342.
[154] Barrio, Á. (2004): La modernización de España (1917-1939). Política y sociedad, Madrid, Síntesis, pág. 94.
[155] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 170.
[156] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 1, op. cit., pág. 335.
[157] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 199.
[158] Ibid., pág. 200.
[159] María Teresa León escribía en Memoria de la melancolía: «Eran Fermín Galán y García Hernández los mártires, los héroes de esta transformación de España. Los habían fusilado, sí. Toda revolución se apoya sobre los que mueren…», op. cit., pág. 434.
[160] Colinas, A. (2003): «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 118.
[161] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 435.
[162] Salinas, P./Guillén, J. (1992): Correspondencia (1932-1951), op. cit.
[163] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 204-205.
[164] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2. Tercero y Cuarto libros (1931-1987), Madrid, Alianza Editorial-Biblioteca Alberti, pág. 21.
[165] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 527-529.
[166] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., págs. 240-241.
[167] Ibid., págs. 241-242.
[168] Morla Lynch, C. (2008): España con Federico García Lorca, Sevilla, Renacimiento, págs. 304-305.
[169] Artículos recogidos en Alberti, R. (1973): Prosas encontradas. 1924-1942, ed. de Robert Marrast, Ayuso, Madrid.
[170] Ibid.
[171] Fédor Víctorovich Kelin (1893-1965) era catedrático de Literatura Española del siglo XX en la Universidad de Moscú. Hispanista, poeta, ensayista, crítico literario, especialista en teatro, colaboraba con el VOKS (Sociedad Soviética de Relaciones Culturales) y el MORP (Unión Internacional de Escritores) entre 1931-1936. Fue nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad de Madrid (1937) con motivo de su continua relación e interés por los escritores peninsulares.
[172] El artículo de F. Kelin apareció exactamente en la revista Literatura Internacional, núms. 3-4, 1934, págs. 239-245. Citado por Carlos Flores Pazos en «Amigo Lelyin: Ayúdennos. Rafael Alberti y la URSS. 1932-1934», en VV.AA. (2003): Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Madrid, pág. 254.
[173] Alberti, R. (1973): Prosas encontradas, op. cit.
[174] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., págs. 28-29.
[175] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 445.
[176] Testimonio recogido en las Actas del congreso en homenaje a Rosa Chacel, María Pilar Martínez Latre (coord.), Universidad de la Rioja, 1994.
[177] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 233.
[178] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 446.
[179] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 233.
[180] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 444.
[181] Ibid., pág. 446.
[182] Ibid., pág. 226.
[183] Ibid., págs. 227-228.
[184] Ibid., pág. 230.
[185] Álvarez Tejedor, A. (2003): «María Teresa León: la literatura de compromiso de una mujer comprometida con la literatura», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., págs. 179-180.
[186] Loxa, J. de (2003): «María Teresa León: otra luz bajo la arboleda», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 42.
[187] Torres Nebrera, G. (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 18.
[188] Sobre este punto es imprescindible la lectura del trabajo de Gonzalo Santonja, «Octubre, número 0», publicado en Cuadernos Hispanoamericanos, 485-486, noviembre-diciembre 1990, págs. 137-144.
[189] Torres Nebrera, G. (2003): «El lugar del teatro en la literatura de María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 70.
[190] Morla Lynch, C. (2008): España con Federico García Lorca, op. cit., págs. 369.
[191] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 367
[192] Morla Lynch, C. (2008): España con Federico García Lorca, op. cit., págs. 385.
[193] Ver R. Marrast, «Deuxième voyage de Rafael Alberti en URSS», Bulletin Hispanique, LXXXVIII, 1986, n.º 3-4, págs. 357-384.
[194] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 123.
[195] Ibid., pág. 122.
[196] Ibid., págs. 266-267.
[197] Carta fechada en Roma el 26 de octubre de 1934. Ver Flores Pazos, C.: «Amigo Lelyin: Ayúdennos. Rafael Alberti y la URSS. 1932-1934», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., pág. 263.
[198] Flores Pazos, C.: «María Teresa León en la URSS», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, Madrid, Fundación Autor, pág. 31.
[199] Ibid., pág. 34.
[200] Ibid.
[201] Alberti recuerda en La arboleda perdida cómo le fue comunicada la noticia del fallecimiento del torero: «…había yo recibido una tristísima carta de José María de Cossío dándome cuenta de que un toro —Granadino— había cogido de muerte, en la plaza de Manzanares, a Ignacio Sánchez Mejías, gran amigo y entusiasta de nuestra generación». Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 52.
[202] Ibid.
[203] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 186-187 y 224.
[204] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 55.
[205] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 225.
[206] Ibid., pág. 230.
[207] Ibid., pág. 231.
[208] Ibid., pág. 232.
[209] Ibid.
[210] Ibid.
[211] Ibid., pág. 233.
[212] Organización Internacional de Ayuda a los Revolucionarios.
[213] Compositor ucraniano y colaborador de Literatura Internacional, miembro del MORP.
[214] Johannes R. Becher, escritor exiliado frecuentado por los Alberti y miembro del MORP.
[215] Fragmento de la carta s.f. que recibe Kelin el 28 de marzo de 1935. Recogida por Carlos Flores Pazos en «María Teresa León en la URSS», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 35.
[216] «The revolt in Asturias», The New Republica, Nueva York, núm. 1086, 25 de septiembre de 1935. Reeditado, con traducción española, en el artículo de Alan Swan, «Un article retrouvé de M.T. León en anglais», Boulletin Hispanique, XC, 3-4, julio-diciembre de 1988, págs. 405-417.
[217] Ibid., págs. 236-237.
[218] Ibid., pág. 237.
[219] Guillén, N. (1988): Páginas vueltas, Barcelona, Mondadori.
[220] Marrast, R. (1984): Rafael Alberti en México, 1935, La Isla de los Ratones, Santander.
[221] Ibid., pág. 57.
[222] Testimonio recogido por Benjamín Prado en su libro Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 246.
[223] Ibid., págs. 246-247.
[224] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 242.
[225] Ibid., pág. 243.
[226] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., págs. 69-70.
[227] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 253.
[228] Ibid., págs. 251-252.
[229] Ibid., pág. 254.
[230] Ibid., pág. 262.
[231] Ibid., pág. 265-266,
[232] Estébanez Gil, J.C. (2003): María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, op. cit., pág. 147.
[233] Ibid., págs. 172-173.
[234] Texto recogido por Gregorio Torres Nebrera en su libro Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 85.
[235] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 248.
[236] Celma, M.P. (2003): «El compromiso de una femme de lettres en los Cuentos de la España actual», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 153.
[237] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 266.
[238] Sánchez Recio, G. y VV.AA. (1991): Guerra Civil y franquismo en Alicante, Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, Alicante, pág. 23.
[239] Gil-Albert, J. (1982): Memorabilia (1934-1939), en Obra completa en prosa, Vol. 2. Valencia, Institución Alfonso el Magnánimo, Diputación de Valencia, pág. 250.
[240] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 252.
[241] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 412.
[242] Colinas, A. (1995): Rafael Alberti en Ibiza. Seis semanas del verano de 1936, Barcelona, Tusquets.
[243] Colinas, A. (2003): «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 119.
[244] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 268.
[245] Colinas, A. (1995): Rafael Alberti en Ibiza. Seis semanas del verano de 1936, op. cit.
[246] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 271.
[247] Colinas, A. (1995): Rafael Alberti en Ibiza. Seis semanas del verano de 1936, op. cit.
[248] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 272.
[249] Carta escrita en Roma a comienzos de los años 60 y recogida por Antonio Colinas en «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», op. cit., pág. 115.
[250] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 273.
[251] Colinas, A.: «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», op. cit., págs. 119-120.
[252] Colinas, A.: «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», op. cit., pág. 120.
[253] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 278.
[254] Ibid., págs. 279-280.
[255] Ibid., pág. 281.
[256] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 28.
[257] Ibid., pág. 139.
[258] Rodrigo, A. (1996): Mujeres para la Historia. La España silenciada del siglo XX, op. cit., pág. 100.
[259] Líster, E. (2007): Nuestra Guerra. Memorias de un luchador, Zaragoza, Ed. Silente, pág. 67.
[260] Ana, M.: «María Teresa León, una mujer comprometida con su tiempo», Homenaje a María Teresa León, Madrid, Universidad Complutense, 1990, págs. 41-50.
[261] Citado por Benjamín Prado en Los nombre de Antígona, op. cit., pág. 256.
[262] El citado texto de Juan Ramón fue hallado por Ángel Crespo en Puerto Rico y reproducido posteriormente en su libro Guerra en España (1936-1953), Madrid, Seix Barral, 1985.
[263] Cfr. al respecto el libro de Andrés Trapiello Las armas y las letras, Barcelona, Planeta, 1994; así como la obra de Benjamín Prado, Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 257.
[264] La cita de Rafael Alarcón Sierra pertenece a su trabajo «Juan Ramón Jiménez ante la guerra», publicado en el monográfico Juan Ramón Jiménez. Premio Nobel 1956, Javier Blasco y Antonio Piedra (coord.), Madrid, Residencia de Estudiantes/Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, 2006, pág. 357. El artículo de Jordi García, «Franquistas en Barcelona», apareció en El País, Babelia, el 14 de enero de 2006. Respecto al libro de Ángel Sody de Rivas …Y al final la luz. La polémica entre Juan Ramón Jiménez y Jorge Guillén, Barcelona, Grupo de Historia José Berruelo, 1999, arroja nueva luz sobre el posicionamiento político de ciertos escritores de la época y narra el episodio del expolio de la vivienda madrileña de Juan Ramón situando al periodista Carlos Sentís en el centro del asalto; un hecho que el propio Sentís negaría en su libro de recuerdos Memòries d’un espectador, Barcelona, La Campana, 2006.
[265] León, M.T. (1977): La Historia tiene la palabra (Noticia sobre el Salvamento del Tesoro Artístico), prólogo, selección del apéndice y notas de Gonzalo Santonja, Madrid, Ed. Hispamerca, pág. 28.
[266] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 285.
[267] Mijaíl Koltsov (1963), Diario de la guerra de España, París, Ruedo Ibérico, pág. 71. También lo cita Antonina Rodrigo en su libro Mujeres para la Historia. La España silenciada del siglo XX, op. cit., pág. 100.
[268] Ehrenburg, I. (2014): Gente, años, vida (Memorias 1891-1967), Barcelona, Acantilado.
[269] Ehrenburg, I. (1998): Corresponsal en España, Barcelona, Prensa Ibérica.
[270] Testimonio recogido por Trinidad de León-Sotelo en «María Teresa León, regreso desde el laberinto del olvido», ABC, 31 de octubre de 2003, pág. 54.
[271] Testimonio recogido por Trinidad de León-Sotelo en «La memoria de María Teresa León, contra viento y marea», ABC, Sevilla, 17 de marzo de 2003, pág. 55.
[272] Saavedra Arias, R. (2013): El patrimonio artístico español durante la Guerra Civil (1936-1939). Política e ideología en las «dos Españas», Universidad de Cantabria, pág. 294.
[273] Carlos Montilla falleció en la prisión de Pamplona, tras ser detenido en Francia y procesado por las autoridades franquistas, como otros republicanos que sufrieron el mismo calvario: Companys, Cruz Salido, Zugazagoitia, Manuel Muñoz, Teodomiro Menéndez, Juan Peiró, Rivas Cherif…
[274] León, M.T.: La Historia tiene la palabra, op. cit., pág. 17.
[275] Ibid., pág. 70.
[276] Ibid., pág. 71.
[277] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 352.
[278] La Historia tiene la palabra, op. cit., págs. 41-43.
[279] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 353-354.
[280] Álvarez Lopera, J. (1982): La política de bienes culturales del gobierno republicano durante la Guerra Civil española, vol. II, Ministerio de Cultura, pág. 16, nota 67.
[281] Tusell, J. (2009): «El patrimonio artístico español en tiempos de crisis», en Isabel Argerich y Judith Ara (eds.), Arte protegido. Memoria de la Junta del Tesoro Artístico durante la Guerra Civil, Instituto del Patrimonio Cultural de España y Museo Nacional del Prado, pág. 22.
[282] León, M.T.: La Historia tiene la palabra, op. cit., págs. 13-14.
[283] Colinas, A. (2003): «María Teresa León: amor y poesía por encima de la Historia», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 114.
[284] León, M.T.: La Historia tiene la palabra, op. cit., pág. 29.
[285] Torres Nebrera, G. (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 37.
[286] Instituto Central de Aerohidrodinámica, uno de los centros científicos más importantes dedicados a la investigación aeronáutica.
[287] Durante aquel mes de marzo de 1937 se podía disfrutar en la Galería Tretiakov de Moscú de una muestra de arte popular de Rusia/URSS (1840-1937). La exposición daba cuenta de la confrontación del arte soviético con las vanguardias y anunciaba ya la implantación del realismo socialista en todos los órdenes de la expresión artística y creativa.
[288] La obra ¡Salud, España!, del dramaturgo ruso Aleksandr Nikolaevich Afinogenov, se había estrenado en Moscú en 1936.
[289] El relato «Secretos del gorro azul» no ha sido localizado, con tal título, en ninguna publicación ni entre las piezas inéditas de la autora.
[290] Fragmentos de la entrevista publicada en 1937 en el número 4 de la revista El libro y la revolución proletaria, recogidos por Carlos Flores Pazos en «María Teresa León en la URSS», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 39.
[291] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 177-178.
[292] Ibid., págs. 278-280.
[293] Testimonio recogido por Carlos Flores Pazos en «María Teresa León en la URSS», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 47.
[294] Flores Pazos, C.: «María Teresa León en la URSS», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., págs. 43 y 46.
[295] Texto reproducido por Nicolás Guillén en su trabajo «Un poeta en espardeñas. Hablando con Miguel Hernández», publicado en la revista cubana Mediodía, La Habana, el 25 de octubre de 1937; también recogido en Miguel Hernández, Madrid, Taurus, colección El escritor y la crítica, ed. de María de Gracia Ifach, 1975, pág. 62.
[296] «Pablo de la Torriente, cubano, héroe de España”, texto inédito, sin fecha, compuesto de tres folios mecanografiados y firmados por María Teresa León. Se conserva en el archivo de María Teresa León de la Fundación Rafael Alberti de Puerto de Santa María, referenciado como texto 695 A, y pertenece a la sección «Textos mecanografiados con correcciones manuscritas».
[297] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 303-306.
[298] Ibid., pág. 306.
[299] Oliva, C.: «La práctica escénica de María Teresa León», en Homenaje a María Teresa León en su centenario, Gonzalo Santonja (ed.), op. cit., pág. 254.
[300] Palabras extraídas del texto inédito La aventura de la risa y el llanto en el teatro español (I), 31 folios mecanografiados para una serie de conferencias que María Teresa León impartió en varias universidades chilenas en 1940, al principio de su exilio americano. El fragmento aparece recogido por Estébanez Gil en María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, op. cit., págs. 231-232.
[301] «La Tragedia optimista en Madrid y en Moscú», Nueva Vida, octubre de 1937.
[302] «El teatro en la guerra. Estreno de la Tragedia optimista», Defensa Nacional, núms. 3-4, octubre de 1937.
[303] Octubre, 1 de mayo de 1933, pág. 3.
[304] Arias, S. (1990): «Testimonio», en el volumen Homenaje a María Teresa León. Universidad Complutense (Cursos de Verano de El Escorial, 1990), pág. 65.
[305] El Mono Azul, núm. 36, 14 de octubre de 1936.
[306] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 112-114.
[307] Testimonio recogido por José Monleón en su excelente artículo «Evocación del teatro de Arte y Propaganda», Triunfo, 3 de septiembre de 1977, pág. 40.
[308] Testimonio recogido por R. Marrast que reproduce Estébanez Gil en su libro María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, op. cit., pág. 250.
[309] Monléon, J. (1990): «Lectura histórica del pensamiento teatral de María Teresa Léon», Homenaje a María Teresa León, op. cit., pág. 61.
[310] El texto de María Teresa León lo reproduce Estébanez Gil, J.C. (2003): María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, op. cit., pág. 252.
[311] «Testimonio», op. cit., pág. 68.
[312] Aznar Soler, M. (2007): «Mª Teresa León y el teatro español durante la guerra civil», Revista STICHOMYTHIA, núm. 5.
[313] León, M.T.: La Historia tiene la palabra, op. cit., págs. 37-38.
[314] Texto publicado íntegramente en Hora de España, número VIII, Valencia, agosto de 1937, págs. 83-95.
[315] Cernuda, L.: «Poetas en la España leal», en Hora de España, núm. VIII, Valencia, agosto de 1937, pág. 74.
[316] Palabras de Alejo Carpentier recordadas por Aitana Alberti en «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.) (2003). Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 17.
[317] Texto citado por Schneider, L.M. (1978): Inteligencia y Guerra Civil Española, Laia, Barcelona, pág. 170. Fragmento recogido también por G. Torres Nebrera (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 45.
[318] Guillén, N. (1988): Páginas vueltas, op. cit.
[319] Ibid.
[320] Hernández, M. (1992): Obra completa II. Teatro, prosas, correspondencia, Espasa Calpe, pág. 2166.
[321] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., págs. 123-124.
[322] Paz, O. (1991): «Fundación y disidencia», en Obras completas, vol. III, Barcelona, Círculo de Lectores.
[323] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 479-480.
[324] El testimonio que Benjamín Prado reproduce en Los nombres de Antígona (op. cit., págs. 268-269) proviene de una fuente escasamente imparcial, ya que se trata de Alberti, compañero y esposo de María Teresa León. El autor de Marinero en tierra ha caído en varias contradicciones a la hora de dar cuenta de este suceso y eso explica que existan diferentes versiones del mismo. Pero lo que no deja de asombrarnos es que la versión que de esta disputa ofrece Prado en su libro no coincida exactamente con la que relata Andrés Trapiello, quien asegura haberse inspirado en lo que el propio Benjamín Prado le llegó a contar. En su artículo «El hedor del dinero» (Magazine, La Vanguardia Ediciones, S.L., Barcelona, 11 de marzo de 2001, pág. 20) —algo más lúcido y menos apasionado que el de Prado— escribe Trapiello: «Corrían los primeros meses de la guerra civil y cierto día el poeta Miguel Hernández, que volvía del frente, aportó por la Alianza de Intelectuales Antifascistas. Llegaba con un semblante sombrío. Estaba viendo cómo en la retaguardia el dinero corría a raudales, en los agasajos que se les preparaba a los camaradas ingleses y a las delegaciones comunistas extranjeras que se asomaban a la guerra con la curiosidad del que viene a un safari prestigioso, pero sin mayores riesgos, mientras en las trincheras los soldados vivían la extrema necesidad. Ése era un dinero del pueblo que debería gastarse en el pueblo, en armas y víveres, dijo. Y repitió estar harto de comprobar cómo una vez más quienes arrimaban el hombro y se jugaban la vida eran unos y quienes descorchaban las botellas de vino, otros, y que ellos no eran más que unos señoritos. Alberti y sus camaradas le invitaron con algazaras a que todo eso lo pusiera por escrito en la pizarra que había en un rincón, para someterlo a estudio. Así que el poeta, tomó la tiza y escribió con imperturbable serenidad: Aquí hay mucho hijo de puta y mucha puta. Entre los presentes estaba María Teresa León, mujer de Alberti; ésta se dio por aludida, se abalanzó furiosa sobre Miguel Hernández y le propinó un puñetazo, que le tumbó de espaldas y le rompió un diente».
[325] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 480-481.
[326] «Yo estaba otra vez en mi puesto en París —escribía Neruda—, organizando la primera expedición de españoles a Chile. Me alcanzó a llegar su grito de angustia. En una comida del Pen Club de Francia tuve la dicha de encontrarme con la escritora María Anna Comnene. Ella escuchó la historia desgarradora de Miguel Hernández que llevaba como un nudo en el corazón. Hicimos un plan y pensamos apelar al viejo cardenal francés, monseñor Baudrillart. El cardenal Baudrillart tenía ya más de 80 años y estaba enteramente ciego. Pero le hicimos leer fragmentos de la época católica del poeta que iba a ser fusilado. Esa lectura tuvo efectos impresionantes sobre el viejo cardenal, que escribió a Franco unas cuantas conmovedoras líneas. Se produjo el milagro y Miguel Hernández fue puesto en libertad». Este testimonio de Neruda ha sido extraído de Viaje al corazón de Quevedo, texto incluido finalmente en Viajes, Santiago de Chile, Nascimento, 1955. La primera edición (1947) llevaba exactamente el título de Viajes: Al corazón de Quevedo y por las costas del mundo, y lo publicó (Editorial Universitaria) la Sociedad de Escritores de Chile. El texto aquí recogido es el que también reproduce Carmen Alemany Bay en su trabajo «Miguel Hernández en el corazón de Pablo Neruda», capítulo de su obra Residencia en la poesía: poetas latinoamericanos del siglo XX, Cuadernos de América sin Nombre, núm. 13, Universidad de Alicante, 2006, págs. 85-110.
[327] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 482.
[328] Ibid., pág. 483.
[329] Ibid., págs. 344-345.
[330] Aitana Alberti: «Perros, dementes míos (I)», La arboleda compartida, ABC Literario, núm. 169, 27 de enero de 1995. pág. 20.
[331] Aitana Alberti: «Perros, dementes míos (II)», La arboleda compartida, ABC Literario, núm. 172, 17 de febrero de 1995. pág. 20.
[332] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 99-101.
[333] Ibid., págs. 101-102.
[334] Ibid., pág. 102.
[335] Ibid., págs. 102-103.
[336] De la Fuente, I (2002): Mujeres de la posguerra. De Carmen Laforet a Rosa Chacel: historia de una generación, Barcelona, Planeta, págs. 434-435.
[337] Rubio, J. (1979): Asilos y canje durante la guerra civil española, Barcelona, Planeta, pág. 324.
[338] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 479.
[339] Ibid., pág. 478-479.
[340] Morla Lynch, C. (2008): España sufre. Diarios de guerra en el Madrid republicano. Prólogo de Andrés Trapiello, Sevilla, Renacimiento. Texto recogido por Julio Neira (2010) en su trabajo «El poeta en la guerra», en Un cósmico temblor de escalofrío. Estudios sobre Miguel Hernández, pág. 285.
[341] Thomas, Hugh (1973): La guerra civil española, El Ruedo Ibérico, Madrid, pág. 700.
[342] Falcón, Irene (1996): Asalto a los cielos. Mi vida junto a Pasionaria, Temas de hoy, Madrid, pág. 175.
[343] Ibid., págs. 361-362.
[344] María Teresa cita en Memoria de la melancolía los dos primeros endecasílabos del soneto quevediano «Salmo XVII», del Heráclito cristiano.
[345] Palabras de María Teresa León dedicadas a su hija en 1971, recogidas por Francisco M. Arniz Sanz en su trabajo «María Teresa León, entre el olvido y la memoria», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 69.
[346] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 363.
[347] García Montero, L.: «El sueño literario de una intelectual comunista», El País, 15 de diciembre de 1988.
[348] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 365-366.
[349] Ibid., pág. 364.
[350] Ibid., págs. 366-367.
[351] Ibid., págs. 371-372.
[352] Ibid., pág. 372.
[353] Ibid.
[354] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 129.
[355] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 402-404.
[356] La agonía y la tragedia de la República tuvo uno de sus últimos episodios el 28 de marzo de 1939 en el puerto de Alicante. Días antes, cuando Franco ordenó la ofensiva final, los frentes se deshicieron y una inmensa riada de civiles, combatientes y militantes republicanos que temían con razón la terrible represión que se avecinaba, huyó en masa hacia los puertos levantinos buscando la salvación en el exilio. Alicante fue entonces el más destacado punto de partida hacia el destierro. Miles de personas esperaban en los muelles un barco que les alejara de España, y fue ese 28 de marzo cuando la nave Stanbrook, un viejo carguero inglés comandado por el capitán Dickson, se apiada de los vencidos de la Guerra Civil y recoge a 2.638 pasajeros que emprendieron viaje sin saber cuál sería su destino final. En tierra se quedaron cerca de 15.000 refugiados que —salvo aquéllos que se quitaron la vida— fueron conducidos por los soldados de la División Littorio, una unidad militar italiana que apoyaba a las tropas franquistas, al campo de concentración de Los Almendros, y más tarde al campo de concentración de Albatera.
[357] Ibid., págs. 389-390.
[358] Soler Sasera, E. (2006): «Las voces antiguas: la Guerra Civil española en algunas memorias y autobiografías del exilio literario de 1939», Olivar, n.º 8, pág. 250. Ver también: Faber, S. (2002): Exile and Cultural Hegemony. Spanish Intelectuals in Mexico, Nashville, Vanderbilt University Press.
[359] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 390-391.
[360] Ibid., págs. 392-393.
[361] Embarcaciones, barcazas, casas flotantes sobre el Sena.
[362] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 175.
[363] Neruda, P. (1979): Confieso que he vivido, Barcelona, Argos Vergara, pág. 144.
[364] Texto de la serie La arboleda compartida que recoge Benjamín Prado en su Libro Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 277.
[365] Neruda, P. (1979): Confieso que he vivido, op. cit., pág. 144.
[366] Ibid., pág. 145.
[367] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 323-324.
[368] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 201.
[369] Vicent. M.: «Corpus Barga, galgo aristocrático con luz propia», Madrid, El País, 29 de septiembre de 2012.
[370] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 385.
[371] Ibid., pág. 386.
[372] En el poema de Augusto Ferrán y Forníes (Madrid, 1836-1880) se lee textualmente: «Yo no sé lo que yo tengo, / ni sé lo que a mí me falta / que siempre espero una cosa / que no sé cómo se llama». Los versos pertenecen al libro La soledad (Colección de cantares populares y originales) (1861).
[373] La intuición y el estilo es uno de los libros pertenecientes a las memorias de Baroja Desde la última vuelta del camino. Ver Pío Baroja, Obras completas, Vol. II, edición de José-Carlos Mainer para Galaxia Gutenberg-Círculo de Lectores, 1997, pág. 397.
[374] Las afirmaciones en este sentido de José-Carlos Mainer, Benjamín Prado, Estébanez Gil y otros investigadores se basan en las siguientes palabras de Rafael Alberti: «Cuando estábamos viviendo con Pablo Neruda y Delia en el Muelle del Reloj, por influencia y amistad de Picasso con alguien del Ministerio de Comunicaciones, fuimos admitidos […] como locutores de Paris Mondial…», La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 128.
[375] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 396-397.
[376] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 128.
[377] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 397.
[378] Ibid., págs. 403-404.
[379] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 129.
[380] Ibid., págs. 129-130.
[381] Édouard Daladier (París, 1884-1970) fue el Primer Ministro de su país entre 1938 y marzo de 1940. Como representante de Francia en la Conferencia de Múnich (1938), se dejó arrastrar por la política de «apaciguamiento» británica al acceder a las pretensiones de Hitler sobre Checoslovaquia. Consciente del error cometido, cuando Hitler invadió Polonia declaró la guerra a Alemania (1939). Tras la invasión de Francia por los nazis fue detenido por las autoridades colaboracionistas de Vichy y juzgado como responsable de la derrota militar francesa; se defendió con tal empeño que el juicio tuvo que suspenderse (1942). Más tarde fue deportado a Alemania.
[382] Amparo Mom, personaje de gran relevancia intelectual, fue la primera esposa del poeta y periodista argentino Raúl González Tuñón. Con él participó en el II Congreso de Intelectuales Antifascistas durante la Guerra Civil española, compartiendo amistad, entre otros, con Neruda, María Teresa León, Alberti y Miguel Hernández. Por esas fechas, Amparo y Raúl se encontraban en París y visitaban con frecuencia a las dos matrimonios en la vivienda de Quai de l’Horloge. Amparo falleció, como así veremos, pocos días antes de la llegada a Argentina de María Teresa y Rafael en febrero de 1940.
[383] León, M.T.: «Una refugiada más en París», Semanario España Democrática. Órgano del Comité Nacional de Ayuda al Pueblo Español, Núm. 174, Año IV, Montevideo (Uruguay), Miércoles 2 de octubre de 1940.
[384] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 399-400.
[385] David Schidlowsky (2008): Neruda y su tiempo: las furias y las penas. Volumen I. 1904-1949, Santiago de Chile, RIL Editores, pág. 430.
[386] Leonardo Cáceres (1979): El «Winnipeg cuarenta años después», en Araucaria, núm. 8, Madrid, pág. 59.
[387] Conjunto de fortificaciones de 200 km construido desde 1927 a 1936 en la frontera francesa del NO para proteger las provincias de Alsacia y Lorena de una nueva posible invasión.
[388] Álamo Triana, Isabel del (2008): «Tras los pasos de Corpus Barga», texto de introducción a la edición de Cartas a Corpus Barga, Alicante, Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, pág. 89.
[389] Carta de María Antonia Hagennar (Maruca Reyes) a Carlos Morla Lynch del 8 de septiembre de 1943. Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, Archivo General Histórico, Santiago de Chile: Vol. 2170: Ministerio de Relaciones Exteriores: Suiza: Intereses chilenos en Alemania, Tomo 2, 1943.
[390] Cita recogida por Mario Amorós en su libro Neruda, príncipe de los poetas, Barcelona, Ediciones B, 2015, pág. Nota 611.
[391] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 130.
[392] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 399-400.
[393] María Teresa se refiere a las dos organizaciones oficiales encargadas en Francia de gestionar la salida de exiliados españoles hacia países sudamericanos, así como su instalación y acogida en ellos. Mientras que el SERE (Servicio de Emigración de los Refugiados Españoles) se creaba en abril de 1939 por Juan Negrín, el JARE (Junta de Ayuda a los Republicanos Españoles) era constituido en el mes de julio por la Diputación permanente de las Cortes republicanas en el exilio bajo la presidencia de Lluís Nicolau d’Olwer, ministro del gobierno provisional de la República en el destierro. Sin embargo, como indica Alicia Alted Vigil, «el carácter político contrapuesto del SERE y el JARE, con el trasfondo de la pugna personal entre Juan Negrín e Indalecio Prieto y el asunto del Vita, se proyectó en los criterios de selección de los candidatos y produjo hondo malestar en los medios del exilio». Ver Alted Vigil, A.: «Francia y el exilio español en la Segunda Guerra Mundial», España y la II Guerra Mundial, Bulletin d’Histoire Contemporaine d’Espagne, n.º 22, Maison des Pays Ibériques, Talence, diciembre de 1995, pág. 56.
[394] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 395-396.
[395] Mainer, J.—C.: «Rafael Alberti después de 1939: La construcción del poeta popular», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., págs. 320-321.
[396] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 385-386.
[397] Ibid., pág. 399.
[398] Ibid., págs. 398-399.
[399] Carta de Rafael Alberti a la familia de Corpus Barga fechada el 8 de febrero de 1940. La misiva aparece recogida en el libro Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 121.
[400] Carta de María Teresa León a Corpus Barga desde el Mendoza; transcripción de Isabel del Álamo Triana en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 395.
[401] «Señor, bien podía haberme dicho quiénes eran ustedes».
[402] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 401.
[403] Ibid., pág. 402.
[404] Ibid., pág. 395.
[405] Ibid., pág. 420.
[406] Alberti, Rafael: Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., pág. 546.
[407] Zuleta, E. (1999): Españoles en la Argentina, Buenos Aires, Atril, pág. 20.
[408] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 422.
[409] Antón, Carmen (2002): Visto al pasar. República, guerra y exilio, Edicios do Castro, Sado-A Coruña.
[410] La cita de Carmen García Antón aparece recogida en el trabajo de Sergio Baur «La Argentina que vivió María Teresa León», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., págs. 95 y 98.
[411] Baur, S.: «La Argentina que vivió María Teresa León», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., págs. 87-88.
[412] Artículo publicado el 28 de febrero de 1940. El texto reproducido aparece citado por Isabel del Álamo Triana en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 400.
[413] Testimonio de Alberti recogido por María Asunción Mateo en Rafael Alberti. De lo vivo y lejano, Madrid, 1996, Espasa Calpe, pág. 148.
[414] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 135.
[415] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 420-422.
[416] Las opiniones de Mabel Peremartí fueron recogidas en una entrevista realizada por María de los Ángeles González y Pablo Rocca el 6 de marzo de 2003 en el local de la editorial Losada en la calle Corrientes de Buenos Aire; entrevista facilitada por el profesor Jorge Lafforgue.
[417] Baur, S.: «La Argentina que vivió María Teresa León», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 89.
[418] Carta de María Teresa León a Corpus Barga desde Buenos Aires, marzo de 1940; transcripción de Isabel del Álamo Triana en Cartas a Corpus Barga, op. cit., págs. 397-398.
[419] Aráoz Alfaro, R. (1967): El recuerdo y las cárceles (Memorias amables), Buenos Aires, Ediciones de la Flor, pág. 71.
[420] Fragmento de una carta de 10 de junio de 1940 recogido por Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», Magazine. El Mundo. N.º 183, 30 marzo 2003.
[421] Carta de Alberti fechada en junio de 1940 y recogida por el periodista Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», op. cit.
[422] Carta sin fecha precisa (junio de 1940) citada por Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», op. cit.
[423] Estébanez Gil, J.C. (2003): María Teresa. Escritura, compromiso y memoria, op. cit., pág. 42.
[424] Arniz Sanz, F.: «María Teresa León, entre el olvido y la memoria», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 70.
[425] Alberti, Aitana (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 21.
[426] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 97.
[427] Palabras recogidas por Aitana Alberti en su artículo «Hija de los desastres» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 17 de septiembre de 1993, pág. 22.
[428] Carta a Giselda Zani, fechada el 27 de febrero de 1945.
[429] Ibid.
[430] González, M.A. (2003): «María Teresa León: una biografía del exilio», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., págs. 48-49.
[431] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 416.
[432] Ibid., pág. 420.
[433] Alberti, Aitana: «Hija de los desastres» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 17 de septiembre de 1993, pág. 22.
[434] Ibid.
[435] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 413-414.
[436] Ibid., pág. 414.
[437] Alberti, Aitana: «Hija de los desastres» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 17 de septiembre de 1993, pág. 22.
[438] Arzarello, S.: «María Teresa León», en Alfar, Montevideo, 1942, año XX, n.º 80, s/p.
[439] Ortiz Saralegui, J.: «Contra viento y marea, novela por María Teresa León, Ediciones AIAPE, Buenos Aires», en Alfar, Montevideo, 1942, año XX, n.º 80, s/p.
[440] González, M.A. (2003): «María Teresa León: una biografía del exilio», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 40.
[441] Schwarzstein, D. (2001): Entre Franco y Perón, Barcelona, Crítica, pág. 158.
[442] Grandes, A.: «Memoria de la hermosura», en VV.AA. (2005). María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 13.
[443] Infante, J. (2003): «Una mujer excepcional, María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 49.
[444] Ibid., págs. 49-59.
[445] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 222.
[446] Maya Altolaguirre en ABC Sevilla, 17 de marzo de 2003, pág. 55.
[447] González, M.A. (2003): «María Teresa León: una biografía del exilio», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 55.
[448] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 517.
[449] Saiz Viadero, J.R.: «Zenobia Camprubí y las republicanas en el exilio», en Cortés Ibáñez, E. (coord.). (2010). Zenobia Camprubí y la Edad de Plata de la cultura española, op. cit., pág. 323.
[450] Crítica recogida por Sergio Baur en su trabajo «La Argentina que vivió María Teresa León», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 100.
[451] Carta de María Teresa León a Juvenal Ortiz Saralegui, fechada en Buenos Aires el 1 de enero de 1944.
[452] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 437.
[453] Ibid., págs. 438-439.
[454] Prada, Juan Manuel de: «María Teresa León, guionista», en El Cultural, Madrid, 15 de noviembre de 2003, pág. 15.
[455] Como recuerda Juan Manuel de Prada en su artículo «María Teresa León, guionista», La dama duende contó con la música del también exiliado Julián Bautista y «con decorados sobresalientes de Gori Muñoz (otro náufrago de aquella España del éxodo y del llanto que recaló en el hospitalario Buenos Aires, como los actores Enrique Diosdado y Andrés Mejuto)…». Ibid.
[456] Ibid., pág. 439-440.
[457] González, M.A. (2003): «María Teresa León: una biografía del exilio», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 53.
[458] Aitana Alberti en «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.) (2003). Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 21.
[459] Ibid., pág. 22.
[460] Ibid.
[461] Fragmento de una carta sin fecha, escrita por María Teresa en 1950, durante el viaje a Varsovia de Rafael Alberti como delegado al Congreso Mundial de la Paz. El fragmento aparece recogido por Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», op. cit.
[462] La carta de María Teresa, fechada en Buenos Aires el 19 de abril de 1947, está recogida en Cartas a Corpus Barga, op. cit., págs. 401-402.
[463] Muro, M.A. (2003): «María Teresa León: Femme de lettres, mujer de teatro», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 218.
[464] Carta remitida por María Teresa León desde Roma en 1969. Ver Salvat, R. (1998). «Dues cartes de María Teresa León a Ricard Salvat». En Assaig de Teatre, Barcelona, núms. 11-12, pág. 295.
[465] Aznar, M. (2003): Teatro (La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya de María Teresa León), Sevilla, Renacimiento, pág. 16.
[466] Carta fechada en Buenos Aires el 5 de julio de 1950 y citada por Morelli, G. (2005): «Roma en la memoria de María Teresa León y su comedia inédita La historia de mi corazón», en María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., págs.145-146.
[467] Ibid., pág. 146.
[468] Ibid.
[469] Ibid., pág. 147.
[470] Estébanez Gil, «María Teresa León. Valoraciones de un centenario», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 183.
[471] Oliva, C. (2005): «La práctica escénica de María Teresa León», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 262.
[472] Aznar, M. (2003): Teatro (La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya de María Teresa León), op. cit., págs. 11-12.
[473] Torres Nebrera, G. (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 197.
[474] Aznar, M. (2003): Teatro (La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya de María Teresa León), op. cit., pág. 17.
[475] La disertación, en concreto, se celebró en Rosario el jueves 16 de octubre de 1947.
[476] Carta manuscrita transcrita por Isabel del Álamo Triana y recogida en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 407.
[477] Carta manuscrita del 29 de octubre de 1948 recogida en el libro Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 408.
[478] Alberti, Aitana: «Un aroma a violetas» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 3 de diciembre de 1993. pág. 22.
[479] Ibid.
[480] Ibid.
[481] Ibid.
[482] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 219-220.
[483] Alberti, Aitana: «Un aroma a violetas» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 3 de diciembre de 1993. pág. 22.
[484] Ibid.
[485] Fragmento recogido por Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», Magazine. El Mundo. N.º 183, 30 de marzo de 2003.
[486] Carta enviada desde Varsovia el 9 de diciembre de 1950 y citada por Antonio Lucas en su reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», Magazine. El Mundo. N.º 183, 30 de marzo de 2003.
[487] Entrevista efectuada por Pablo Rocca a Gonzalo Sebastián León el 7 de marzo de 2003 en su elegante apartamento de la calle Montevideo, en Buenos Aires.
[488] Texto extraído de Recuerdo de María Teresa León, libro inédito de Gonzalo de Sebastián León, también mencionado por Antonio Lucas en «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas al estar sola», Magazine. El Mundo. N.º 183, 30 de marzo de 2003.
[489] La entrevista de Pablo Rocca a Gonzalo de Sebastián aparece citada por María de los Ángeles González en su trabajo «María Teresa León: una biografía del exilio», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 54.
[490] Lucas, A.: «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas de estar sola», Magazine. El Mundo, núm. 183, 30 de marzo de 2003.
[491] Carta manuscrita fechada en Buenos Aires y recogida en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 413.
[492] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 282.
[493] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 457-458.
[494] Ibid., pág. 458.
[495] No olvidemos que María Teresa León tenía raíces burgalesas y estaba más que familiarizada con los lugares cidianos y con la figura del héroe castellano, sin olvidar la influencia que sobre ella ejercieron sus tíos Menéndez Pidal y María Goyri.
[496] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 152.
[497] Ibid.
[498] Ver Llopis, E. (2013): Rafael Alberti. La deriva de un marinero en tierra (1940-1963), Buenos Aires, Ediciones del Centro Cultural de la Cooperación.
[499] Aitana Alberti: «Poetas en las ramas», La arboleda compartida, ABC Literario, 25 de marzo de 1994, pág. 22.
[500] Ibid.
[501] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 424-425.
[502] Aitana Alberti: «Poetas en las ramas», La arboleda compartida, ABC Literario, 25 de marzo de 1994, pág. 22.
[503] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 427-428.
[504] Aitana Alberti: «La marea y la marea alta», La arboleda compartida, ABC Literario, 20 de mayo de 1994, pág. 22.
[505] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 449-450.
[506] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 444, 449, 451-452.
[507] Blasco Ibáñez, V. (1924): La vuelta al mundo de un novelista, Valencia, Prometeo.
[508] Palabras de María Teresa León extraídas del libro Sonríe China, Buenos Aires, Editor Jacobo Muchnik, 1958.
[509] Aitana Alberti: «China sonreía (I)», La arboleda compartida, ABC Literario, núm. 138, 24 de junio de 1994. pág. 24.
[510] Ibid.
[511] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 115.
[512] Ibid., pág. 441.
[513] Alberti, Aitana: «Hija de los desastres» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 17 de septiembre de 1993, pág. 22.
[514] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 429.
[515] Ibid., págs. 429-430.
[516] Ibid., pág. 430.
[517] Torres Nebrera, G. (1998): «Introducción biográfica y crítica» a Memoria de la melancolía, Madrid, Castalia, pág. 35.
[518] Alberti, R.: «He aquí el otoño», El País, 24 de noviembre de 1985.
[519] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 468.
[520] Alberti, R.: «He aquí el otoño», El País, 24 de noviembre de 1985.
[521] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 430 y 432.
[522] Siles, J. (2003): «Memoria de la melancolía: el yo como instancia de discurso; el yo como materia de relato», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág.107.
[523] Martínez de Mingo, Luis (2003): «La coherencia de una soñadora», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág.134.
[524] Castillo Robles, M.J. (2013): «María Teresa León y doña Jimena, mujeres de España», en Philologica Urcitana. Revista Semestral de Iniciación a la Investigación en Filología, Vol. 9, septiembre 2013, Departamento de Filología, Universidad de Almería, pág. 27.
[525] Alberti, Aitana: «María Teresa León y Cuba: la viajera que no se fue», La Jiribilla. Revista de cultura cubana, La Habana, Año X, 10 al 16 de marzo de 2012.
[526] Alberti, Aitana: «Finca Vigía» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 29 de septiembre de 1995, pág. 22.
[527] Ibid.
[528] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 488.
[529] Ibid., pág. 490.
[530] Ibid., págs. 490-491.
[531] Ibid., págs. 491-492.
[532] Ibid., pág. 492.
[533] Texto recogido por Ángel Augier en su libro Rafael Alberti en Cuba, Editorial Arte y Literatura, La Habana, 1999, y citado también por Benjamín Prado en Los nombres de Antígona, op. cit. pág. 293.
[534] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 492.
[535] Ibid., pág. 493.
[536] Milano, Feltrinelli, 1960.
[537] Carta de María Teresa León a Dario Puccini remitida desde Buenos Aires en marzo de 1961. El texto aparece recogido en el libro Dario Puccini / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1951-1969), ed. de Gabriele Morelli, viennepierre edizioni, Milano, 2009, págs. 121-122.
[538] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 460-461.
[539] Carta de María Teresa León a Dario Puccini remitida desde Buenos Aires el 6 de junio de 1961. El texto aparece recogido en el libro Dario Puccini / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1951-1969), op. cit., pág. 125.
[540] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 288-289.
[541] Antonio Ramírez, J. (2003): Ici Paris. Memorias de una voz de libertad, Alianza Editorial, Madrid, pág. 416.
[542] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 533-534.
[543] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 55.
[544] Novaceanu, D. (2003): «Tres retratos y un recuerdo de María Teresa León», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 382.
[545] Ibid., págs. 384-385.
[546] Estébanez Gil, J.C. (1995): María Teresa León. Estudio de su obra literaria, Burgos, 1995, Editorial La Olmeda, p. 172.
[547] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 203.
[548] Dario Puccini / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1951-1969), op. cit., págs. 32-33.
[549] Carta recogida en Eugenio Luraghi / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1947-1983), ed. de Gabriele Morelli, viennepierre edizioni, Milano, 2005, págs. 165-166.
[550] Carta del 16 de noviembre de 1962.
[551] Carta recogida en Eugenio Luraghi / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1947-1983), op. cit., pág. 160.
[552] Ibid., págs. 163-164.
[553] Ibid., págs. 174-175.
[554] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 203.
[555] Alberti, Aitana: «Concierto de Hammett» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 17 de septiembre de 1993, pág. 22.
[556] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 81 y 97.
[557] Alberti, Aitana (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 19.
[558] En carta de 7 de marzo de 1963, María Teresa León escribía a Darío Puccini: «Estamos en plena desmoralización después de Aitana haber roto su compromiso de casamiento. Ya te lo habrá dicho Pablo de la Fuente. No es fácil reaccionar. Se casaban a mediados de abril. Ahora los planes, si no se modifican, sufren de nuestra inquietud».
[559] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 204.
[560] Martín Gijón, Mario (2009): Una poesía de la presencia. José Herrera Petere en el surrealismo, la guerra y el destierro, Pre-Textos / Fundación Gerardo Diego, Valencia, pág. 232.
[561] Carta fechada en Buenos Aires el 5 de mayo de 1963 y recogido en Eugenio Luraghi / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1947-1983), op. cit., pág. 160.
[562] Carta de María Teresa León a Dario Puccini remitida el 7 de marzo de 1963. El texto aparece recogido en el libro Dario Puccini / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1951-1969), op. cit., págs. 137-138.
[563] Carta de Alberti a Luragui fechada en Bucarest el 27 de agosto de 1963 y recogida en Eugenio Luraghi / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1947-1983), op. cit., pág. 184.
[564] Bayo, M. (1974): Sobre Alberti, Madrid, Ed.CVS, págs. 89-90.
[565] Palabras de María Teresa León recogidas por Gabriele Morelli en «Rafael Alberti: poesía y creación durante su exilio en Roma», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., pág. 427.
[566] Carta recogida en el libro Dario Puccini / Rafael Alberti. Corrispondenza inedita (1951-1969), op. cit., pág. 147.
[567] Carta fechada en Milán el 4 de noviembre de 1963 que recoge Antonio Lucas en el reportaje «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas de estar sola», Magazine. El Mundo, núm. 183, 30 marzo 2003.
[568] La anécdota, relatada por Enrique de Sebastián a la periodista Trimidad de León-Sotelo aparece recogida en el reportaje «María Teresa León, memoria del olvido», en Los Domingos de ABC, pág. 15.
[569] Morelli, G.: «Rafael Alberti: poesía y creación durante su exilio en Roma», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., pág. 428.
[570] Alberti, Aitana (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 16.
[571] Alberti, R. (1972): prefacio a la edición italiana de Roma, pericolo per I viandanti, Milán, Mondadori (Lo Specchio); traducción de Gabriele Morelli incluida en su artículo «Rafael Alberti: poesía y creación durante su exilio en Roma», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., pág. 428.
[572] Alberti, Aitana: «Via di Monserrato, 20» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 19 de agosto de 1994, pág. 20.
[573] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 103.
[574] Según señala Isabel del Álamo, Corpus respondió a la solicitud de María Teresa y remitió a Aitana tres relatos cortos, momentos de la Guerra Civil española, que formaban parte de sus recuerdos. Hemos podido comprobar que, también en carta mecanografiada, Aitana respondía a la generosidad de Corpus Barga desde Roma el 2 de marzo de 1964: «Muchas gracias por habernos contestado con tanta rapidez, y perdón por nuestra tardanza. Los recuerdos que más nos gustaron fueron los de Saint-Exupèry y del soldado herido en la retaguardia». Ver Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 118.
[575] Carta manuscrita recogida por Isabel del Álamo Triana en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 415.
[576] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 120.
[577] Las palabras de Xelo Candel Vila, doctora en Filología Hispánica por la Universidad de Valencia y poeta, aparecen en su artículo «Los Sesenta, una revista de Max Aub», en InfoLibre, 8 de abril de 2016. La reseña se hace eco de la aparición de la edición facsímil de Los Sesenta (1964-1965) en la editorial Renacimiento, Sevilla, 2016, a cargo de Gabriele Morelli y de la propia Xelo Candel Vila.
[578] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 442-444.
[579] Torres Nebrera, G. (1996): Los espacios de la memoria (La obra literaria de María Teresa León), op. cit., pág. 165.
[580] Alberti, Aitana (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 16.
[581] El Premio Lenin de la Paz lo habían obtenido en esos años, entre otros, Louis Aragon, Fidel Castro, Pablo Neruda, Pablo Picasso, Nicolás Guillén, Miguel Ángel Asturias y Dolores Ibárruri.
[582] Alberti, Aitana (2003): «María Teresa León: nuestra señora de todos los deberes», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 16.
[583] Ibid., págs. 15-16.
[584] Ibid., págs. 16-17.
[585] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 200.
[586] Ibid.
[587] Palabras recogidas por Antonio Lucas en «Rafael ¡Vida! Se me caen las alas de estar sola», Magazine. El Mundo, núm. 183, 30 de marzo de 2003.
[588] León-Sotelo, Trinidad de, «María Teresa León, memoria del olvido», en Los Domingos de ABC, pág. 15.
[589] Carta manuscrita recogida por Isabel del Álamo Triana en Cartas a Corpus Barga, op. cit., pág. 416.
[590] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 479.
[591] Moix, T.: «Alberti en Roma», El País Semanal, 21 de julio de 2002.
[592] Ibid.
[593] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 200.
[594] Ibid., pág. 194.
[595] El testimonio de Marcos Ana aparece recogido en su trabajo «María Teresa León, una mujer comprometida con su tiempo», Homenaje a María Teresa León, Universidad Complutense, 1990, págs. 41-52.
[596] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 474-475.
[597] La obra permanecería inédita hasta 2003, fecha en que fue publicada por Manuel Aznar en su edición de Teatro. La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya, Sevilla, Renacimiento.
[598] Arniz Sanz, F.: «María Teresa León, entre el olvido y la memoria», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 75.
[599] Memoria de la melancolía, op. cit., págs. 205-206.
[600] Villarino, M.: «Rafael Alberti, caminante en Roma», CELEHIS. Revista del Centro de Letras Hispanoamericanas, núm. 11: Ciudad y escritura: Géneros y miradas, Buenos Aires, 1999, págs. 256-257.
[601] Infante, J. (2003): «Una mujer excepcional, María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 45.
[602] Fraile, M. (2003): «Los tres sueños de María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 54.
[603] Esquivias, Ó. (2003): «La memoria silenciada», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 119.
[604] Soler Sasera, E.: «Las voces antiguas: la Guerra Civil española en algunas memorias y autobiografías del exilio literario de 1939», Olivar, n.º 8 (2006), p. 252.
[605] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., págs. 28-29.
[606] Alberti, Aitana: La arboleda compartida, ABC Literario, 8 de diciembre de 1995. pág. 22.
[607] Memoria de la melancolía, op. cit., pág. 81.
[608] Arniz Sanz, F.: «María Teresa León, entre el olvido y la memoria», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 73.
[609] Carta recogida por Teresa Alberti en «María Teresa León: desmemoria de la alegría», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 237.
[610] Testimonio recogido por Benjamín Prado en su libro Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 300.
[611] VV.AA. (1987): María Teresa León, Valladolid, Junta de Castilla La Mancha, pág. 87.
[612] Diálogo recreado por Benjamín Prado en su libro Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 301.
[613] Carta recogida por Teresa Alberti en «María Teresa León: desmemoria de la alegría», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 240.
[614] Rodrigo, Antonina: Mujeres para la Historia. La España silenciada del siglo XX, op. cit., pág. 89.
[615] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 302.
[616] Entrevista publicada en el Diario Vasco, 29 de abril de 2016.
[617] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 302.
[618] Alberti, R. (2002): La arboleda perdida, 2, op. cit., pág. 226.
[619] Infante, J. (2003): «Una mujer excepcional, María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 45.
[620] Carta de María Teresa León a su hijo Gonzalo de Sebastián recogida en el trabajo de Teresa Alberti «María Teresa León: desmemoria de la alegría», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 236.
[621] Aznar, M. (2003): Teatro (La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya de María Teresa León), op. cit., págs. 13-18.
[622] Ibid., págs. 9-10.
[623] Carta de María Teresa León a su nieta Isabel de Sebastián recogida por Teresa Alberti en «María Teresa León: desmemoria de la alegría», en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 236.
[624] Testimonio publicado en «Encuentro con Rafael y María Teresa León en el Trastevere romano», La mano en el cajón, Barcelona, núms.1-2, págs. 55-58.
[625] Alberti y Bergamín se habían encontrado en el aeropuerto de Roma el 5 de noviembre de 1971.
[626] Alberti, Aitana: «El extraño creyente» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 8 de diciembre de 1995, pág. 28.
[627] Arniz Sanz, F.: «María Teresa León, entre el olvido y la memoria», en Santonja, G. (edit.), Homenaje a María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 76.
[628] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 29.
[629] Palabras de Aitana recogidas en el diario ABC Córdoba el 26 de abril de 2003, pág. 63.
[630] Poema recogido por Gabriele Morelli en «Rafael Alberti: poesía y creación durante su exilio en Roma», en Entre el clavel y la espada. Rafael Alberti en su siglo, op. cit., págs. 440-441.
[631] Alberti, Aitana: «El extraño creyente» de la serie La arboleda compartida, ABC Literario, 8 de diciembre de 1995, pág. 28.
[632] Citado por Benjamín Prado en Los nombre de Antígona, op. cit., pág. 304.
[633] Aznar, M. (2003): Teatro (La libertad en el tejado y Sueño y verdad de Francisco de Goya de María Teresa León), op. cit., págs. 104-105.
[634] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 27.
[635] Palabras reproducidas por Benjamín Prado en Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 305-306.
[636] ABC, 4 de julio de 1978, pág. 34.
[637] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., pág. 306.
[638] ABC, 9 de septiembre de 1978, pág. 7.
[639] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 29.
[640] Texto de Gonzalo de Sebastián recogido en VV.AA. (2005): María Teresa León. Memoria de la hermosura, op. cit., pág. 239.
[641] Ibid., págs. 239-240.
[642] Ibid., pág. 30.
[643] Ibid., pág. 29.
[644] Prado, B. (2001): Los nombres de Antígona, op. cit., págs. 197-198.
[645] Prado, B. (2002): La sombra del ángel. Trece años con Alberti, Madrid, Aguilar, pág. 149.
[646] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 30.
[647] Prado, B. (2002): La sombra del ángel. Trece años con Alberti, op. cit., pág. 155-156.
[648] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 31.
[649] Infante, J. (2003): «Una mujer excepcional, María Teresa León», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 50.
[650] Sánchez Alberti, T. (2003): «Desmemoria de la alegría», en Altolaguirre, M. (ed.), Recuerdo de un olvido. María Teresa León en su centenario, op. cit., pág. 30.
[651] Aitana Alberti ha recordado que en una carta fechada en Pascua de Resurrección de 1971, tres años después de finalizar el volumen de Memoria de la melancolía, su madre le decía: «Ya he abierto un compás de espera porque ya llegó Memoria de la melancolía, primer tomo, y quiero pensar si el segundo puede llamarse Desmemoria de la alegría. En otra carta del verano de 1972, volvía María Teresa al tema de ese segundo volumen: «Yo sigo mi libro de memorias. “La calle larga de la vida” como subtítulo». «Páginas desconocidas que jamás vieron la luz —señala Aitana—. Deben estar, si no se han extraviado, entre los montones de papeles tuyos que yo personalmente empaqueté y guardé en el armario del piso de Roma, poco antes de vuestro regreso a España el 27 de abril de 1977». Ver el artículo de Aitana Alberti «En algún lugar del cielo», La arboleda compartida, ABC Literario, 10 de septiembre de 1993, pág. 22.
[652] Aitana Alberti: «En algún lugar del cielo», La arboleda compartida, ABC Literario, 10 de septiembre de 1993, pág. 22.