Prevenir para remediar el colapso de las prestaciones sociales
Al doctor L. R., en cambio, le preocupaba sobre todo la ausencia de soluciones previsibles al continuado crecimiento de los gastos comparado con los ingresos; no entendía muy bien por qué nadie hacía nada para alentar el nacimiento y constitución de los llamados centros de investigación traslacionales, a raíz del colapso de los sistemas de prestaciones sociales tras su generalización. Sostenía el eminente doctor que «en la evolución del estado del bienestar se pudieron diferenciar distintos períodos, a medida que se iba ampliando la red de beneficiarios, de los más a los menos dotados de recursos económicos. Ha sido sorprendente el colapso inevitable del sistema de protección, porque a pesar de que cada vez aumentaba más su ámbito de protección nunca se vio acompañado de reformas que permitieran su continuidad.
»Al comienzo, era fácil aumentar la base de los beneficiados porque no entrañaba transformaciones radicales ni desafíos improcedentes. Se trataba de sistemas de seguridad social relativamente poco probados y sin que hubieran generado todavía los hábitos de libre acceso al bien común. Incomprensiblemente, nunca se buscaron en Europa y, sobre todo, en España nuevas estrategias que permitieran conciliar los fondos disponibles con la demanda de crecientes prestaciones sociales.
»Así fue como nacieron en campos diversos reformas innovadoras como los sistemas traslacionales, que obligaron a reconsiderar tanto los esquemas gigantescos e insaciables de proyectos de seguridad únicos y universales como a poner en marcha esquemas innovadores adecuados en tamaño y ámbito a las nuevas necesidades. En lugar de costosas inversiones en ofertas para atender demandas no diferenciadas, como las organizaciones existentes para gestionar todo tipo de demanda y en cualquier lugar, se optó por identificar las pocas necesidades que podían adscribirse, por economías de escala, a centros de investigación únicos. Lejos de renunciar a las ventajas de la explotación del conocimiento en redes, se convertía a estas últimas en las verdaderas tramas de innovación. Los centros de investigación iban a ser pequeños, estar muy bien dotados y vinculados a una especialidad determinada».