Falsificaciones
Emitido el 9 de febrero de 2005
Según un informe de las aduanas europeas, cada vez hay más falsificaciones. Sólo el año pasado se incautaron cien millones de falsificaciones, sin contar a Yola Berrocal.
Los productos más falsificados son: cigarrillos, CD y DVD. No me extraña, pero ¡si algunas pelis, antes de estrenarse, ya están en el top manta! A este paso, me imagino a Spielberg comprando en el top manta: «¿Tienes Indiana Jones 4? Es que me la han encargao para este verano…». Y el tío se la copiará antes de rodarla. Una locura, una locura…
Yo nunca he comprado un DVD pirata, pero una vez alquilé uno que en la portada decía: «Rebobinar antes de devolver». Que ahí ya sospeché… ¿será pirata? Y encima, puse la peli y era de ésas que están grabadas dentro del cine, con una cámara doméstica. El pirata era bajito, y en medio de la pantalla me salía el cabezón del de la fila de enfrente. Me pasé la peli mirando la tele así (haciendo gestos de esquivar al de delante). Y otro día cogí una que la habían grabado desde la fila de los mancos. Sólo se veían parejitas dándose el lote. Total, que empecé viendo Los padres de él y acabé viendo Las bragas de ella. Pero, al menos, ves algo. Lo peor es cuando llegas a casa, metes el disco y rezas delante del DVD: «Que lo lea, que lo lea…». Y aparece en la pantallita el mensaje: «No Disc», que es un mensaje que pone nervioso. «No Disc». Y lo que he puesto, ¿qué es? ¿Una loncha de mortadela? Incluso ya se hacen teorías: «Te tienes que comprar un aparato de DVD malo, que ésos lo leen todo». Vamos, que tú le pones una lata de atún y puedes ver Mar adentro.
En el fondo, somos un país al que todo el rollo de las falsificaciones nos va bastante. Y es un sector que se está profesionalizando. El otro día me acerqué a un top manta y me vino un tío con un portafolios: «¿Ya tiene la tarjeta cliente del top manta inglés?». Además, a nosotros, el tema del pirateo ya nos viene de lejos. ¿Quién no había comprado un disco, se lo grababa en cassete y lo devolvía luego a la tienda? «Es que no me ha gustado». Así me hice yo la discografía completa de Mari Trini.
Como mínimo, antes, las falsificaciones eran más honestas. No escondían que eran falsas. Ibas al mercadillo y podías encontrar unas zapatillas «Naike» o «Reeguk», un reloj «Lorus» o un polo «Lacosta», que en vez de cocodrilo llevaba una lagartija. Se falsificaba de todo. Hasta llegué a ver una falsificación de las zapatillas Paredes, que se llamaban «Tabiques»: (cantando). «Súbete por los tabiques…».
Yo a los contrabandistas de estos cargamentos los compadezco. Pero si yo un día quería bajarme un cartón de tabaco de Andorra y en la carretera, de los nervios, me lo fumé entero. Imagínate llevar un barco con un cargamento de estranjis: «Oiga, señor policía, cuando he salido de Hong Kong, ese container no estaba. Yo no sé quién lo ha puesto ahí».
El quinto producto más falsificado en Europa es la Viagra. Pero se ve que la Viagra falsa funciona al revés: se te pone duro todo el cuerpo menos el pene. Y te quedas como el Neng: «¡Esa Viagra potente…!».
Aunque la falsificación más heavy que se ha detectado es la de una gasolinera entera, con sus trabajadores y todo. No es broma, eh. Era una gasolinera falsa de la BP. Pusieron BP con uve… Pero la descubrieron pronto. Cuando cogías la manguera, la máquina decía: «Ha elegido usted Calimocho Súper…».
El problema es que ahora ya no se distingue entre original y copia. Como todas las marcas se van a fabricar a China por la mano de obra barata… Si es que ya lo decía mi abuela: «Lo barato, sale caro».