LA INTUICIÓN DEL AVEN: CALIBRAJE[415]

Se trata de la única habilidad que vas a necesitar en todo momento de tu juego. Posiblemente la más importante.

De hecho, sé de hombres que no dominan demasiado las demás áreas del juego, pero son expertos en calibrar. Hombres capaces de reconocer cuándo una mujer atraviesa un Estado Favorable, qué necesita en cada momento y qué tipo de comportamiento es el que la situación requiere.

Estos hombres son lo que se conoce por Naturales, y como hemos visto tienen un éxito endiablado con las mujeres.

Ellos saben reconocer que el juego se desarrolla inmerso en situaciones dinámicas y cambiantes. Saben que no existe, pues, fórmula mágica capaz de resolver cualquier caso.

Al igual que no existe golpe ni secuencia de golpes que un luchador pueda usar en cualquier situación para salir airoso, en el juego tampoco podemos movernos sin revisar constantemente la posición y reacciones de los otros participantes.

Lo que para una persona puede ser un tratamiento de shock que le haga ver que no nos chupamos el dedo y logre despertar su interés, para otra puede ser un golpe serio a su autoestima que la traumatice y la lleve a no querer saber más de nosotros en adelante. Llamamos ser capaces de calibrar a saber lo que cada mujer necesita en cada momento según sus reacciones, situación y contexto.

La maestría de esta habilidad es análoga a la que el conductor adquiere cuando encuentra el equilibrio justo entre el acelerador y el embrague en cada momento y para cada marcha. O a aquella del cocinero experto que, con solo meter la cuchara en un guiso y probarlo, sabe qué debe hacer a continuación. O a la de un buen violinista. En otras palabras, se trata de algo que, si bien puede ejercerse desde el primer momento, solo puede perfeccionarse a través de la práctica. Ningún libro, pues, va a permitirte que desarrolles plenamente esta capacidad.

Para calibrar bien, es necesario prestar atención a la mujer[416], pero también a la situación, contexto y antecedentes. Deberemos hacernos preguntas todo el tiempo, preguntas que con el tiempo llegarán a ser automáticas.

¿Desde dónde partimos? ¿Es probable que nos perciba ya como alguien con alto Valor o tenemos todavía que ganárnoslo? ¿Qué clase de situación parece que está atravesando el Objetivo en este momento? ¿Qué podría querer? ¿Qué podría anhelar o buscar? ¿Y qué hay de las amigas y del entorno físico?

El Calibraje nos permite decirle a alguien más de lo que quiere oír[417]. Nos informa sobre si ella nos percibe como una amenaza y su Radar está hiperactivo o si, por el contrario, es el momento de hacer algo más temerario y atrevido que le rompa los esquemas, en caso de que nos vea demasiado dóciles y predecibles. Nos ayuda a decidir entre bajarle la autoestima cuando nos considera por debajo de ella[418] o reforzar la conexión porque la Temperatura de Compra es alta y está lista para pasar de Nivel.

La cuestión es que, sin un buen Calibraje, todo lo que puedas aprender en este manual no te servirá de mucho. Hay demasiados principios y no pueden usarse todos a la vez.

A veces, incluso, ella estará lista mucho antes de lo que imaginas[419] y en esos casos sería un error mostrarse demasiado dogmático con los principios, obsesionarse con los Niveles y seguir pasos innecesarios.

Para esos y otros casos encontramos siempre una misma respuesta. ¿Cuál es?: Calibraje.

CÓMO CALIBRARTE DESDE EL SOFÁ DE TU CASA

Solo hay una forma: llevando mujeres a dicho sofá[420]. De lo contrario, olvídalo. No se puede.

El Calibraje es —como hemos apuntado— la única habilidad que vas a necesitar en todo momento. Irónicamente, es también la única que no puedo enseñarte.

Para calibrarte socialmente, solo hay un camino: invertir horas en el juego. Duro, ¿verdad?

Pero, a fin de cuentas, ¿qué podías esperar? ¿Acaso hay algo en la vida que no funcione así? En cualquier caso, en nuestra sociedad prácticamente todo está diseñado de esa forma.

Piénsalo. En el colegio, ¿quién destaca por sus notas? Lo cierto es que, salvando contadas excepciones, quien se esfuerza y estudia.

¿Quién obtiene mejores resultados en el gimnasio? Quien entrena más y mejor.

¿Quiénes forman la élite de cualquier actividad? Quienes se entrega en cuerpo y alma a ella.

No te dejes engañar. Nuestra sociedad, nuestra vida, está diseñada de esa forma.

Y sí, siempre hay excepciones, casos que se escapan de la generalidad. Pero ¿qué es más inteligente? ¿Basar tu vida en la excepción y confiar en que te va a tocar la lotería o… invertir tiempo y esfuerzo en aquello que sabes que va a darte resultados?

Tú elijes[421].

PRÁCTICA vs. TEORÍA

Si la práctica es tan importante, si solo ella puede hacer un Aven de ti, ¿de qué sirve la teoría? ¿No es una pérdida de tiempo? La respuesta es simple. La teoría por sí sola no sirve para nada, o para muy poco.

Ahora bien, una buena teoría puede acelerar y potenciar exponencialmente el aprendizaje que extraigas de la práctica.

Lo que sin teoría podría suponer un extravío por caminos equivocados durante meses y años de palos de ciego y resultados pobres, con ella se transforma en golpes certeros justo sobre la cabeza del clavo, haciendo del aprendizaje algo tan vertiginoso como gratificante.

Lo que yo he aprendido en un mes de práctica siguiendo los consejos de buenos maestros, no lo he asimilado durante años de experiencia sin rumbo.

En otras palabras, si quieres lanzar cohetes al espacio, aprovecha lo que otros han aprendido sacrificando su tiempo y energía. Hazlo. No reinventes la rueda[422].

CADA MUJER RESPONDE PARTICULARMENTE BIEN A ALGO[423]

Algunas mujeres tienen esa risita floja, son especialmente sensibles al humor y los juegos, de forma que cuando entran en dicho estado se las puede llevar prácticamente a cualquier Nivel de la interacción.

Otras responden particularmente bien a la actitud del Chulifresco Divertido. A otras les pone, más que nada, que las ignoren.

Y algunas les excita sobre todo que la otra persona les haga sentir cómodas, seguras y con una fuerte conexión.

Los principios de este libro suelen ser todos eficaces a la hora de despertar atracción y avanzar en la interacción con prácticamente cualquier mujer. Ahora bien, la medida en que lo haga cada uno de ellos variará en función del contexto, la situación y la mujer que tengas delante.

Uno de los mayores beneficios de un buen Calibraje es, precisamente, enseñarnos que cada mujer tiene su propio talón de Aquiles y responde particularmente bien a alguno o varios de estos elementos. El otro, permitirnos establecer un buen diagnóstico y elegir un tratamiento adecuado.

Así, será mucho más fácil llevar a cualquier TB a su Estado Favorable. También nos costará menos elevar la Temperatura de Compra.

Este descubrimiento ha obrado, por sí solo, maravillas en el juego de muchos Artistas Venusianos. Tenlo muy presente.

LA INFORMACIÓN CLAVE

El propósito de estas líneas es muy simple. Si solo te quedases con el consejo que pretende transmitirte, y con ninguna otra enseñanza del manual, probablemente ya habrías llevado a cabo progresos.

¿En qué consiste?

En cobrar conciencia, de una vez por todas, de que la mejor información, aquella información clave para tu éxito, una mujer jamás[424] te la va a proporcionar con palabras.

De ahí la importancia de un buen Calibraje.

Y recuerda además que, cuando las mujeres hablan de lo mucho que les gustan los hombres que las escuchan y tienen detalles con ellas, lo que a menudo están en realidad pidiendo son hombres capaces de leer y prestar atención a sus estados, así como de darles lo que necesitan en cada momento.

Recuerda que ponerte las cosas en bandeja redunda en contra de sus intereses biológicos[425].

CALIBRAR ES COMO AFINAR UN INSTRUMENTO

Algunas técnicas para mejorar nuestra forma de calibrar se inspiran en el propio Calibraje de las armas. Piénsalo.

¿Has tenido alguna vez un rifle de perdigones? Si alguien te diese uno desajustado, ¿qué harías para recalibrarlo? O mejor, si no te dejaran ajustar el punto de mira pero sí disparar varias veces, ¿qué harías para ser capaz de dar en el blanco?

Probablemente, apuntarías al centro de una diana, y dispararías en repetidas ocasiones. Digamos que, tras hacerlo, compruebas que el perdigón tiende a golpear a unos diez centímetros a la derecha del blanco y unos tres centímetros por encima de este.

Lo único que tendrías que hacer la próxima vez, sería apuntar a un blanco imaginario, situado a unos diez centímetros a la izquierda del blanco real y a unos tres centímetros por debajo del mismo.

Un ejemplo aun más ajustado es el modo en que funcionan y se calibran los aparatos detectores de mentiras. Estos provocan primero ciertos estados en el interrogado, asociando a continuación unos signos externos que se repiten en cada uno de dichos estados (signos relativos al pulso, ondas cerebrales, etc.).

Si más tarde alguna respuesta del interrogado alude a un estado diferente de aquel al que sus signos externos apuntan, el aparato concluye que está mintiendo.

¿Ves a dónde quiero ir a parar?

Con las mujeres debes hacer algo muy parecido.

Antes de intentar siquiera hacerlas sentirse bien, mucho antes de reproducir aquello que puede gustarle, provocarle placer o hacerla sentirse excitada sexualmente; antes incluso de obtener y averiguar sus valores y preferencias, debes hacer otra cosa.

Debes aprender a interpretar los signos específicos que ella emite y que podrían traducirse como bueno, neutral, malo, así como aquellos otros que vendrían a acompañar sus sentimientos de acuerdo y desacuerdo.

En el apartado siguiente profundizaremos sobre cómo hacerlo.

APRENDE A DECODIFICAR ESTADOS

Hasta que no tengas cierta seguridad sobre los pequeños detalles que revelan en ella los diversos estados de entusiasmo o agrado, indiferencia y odio o repulsión, y también los sentimientos de acuerdo, neutralidad y desacuerdo, ¿cómo vas a poder estar seguro de haber calibrado bien? ¿Vas a fiarte de lo que te diga o vas a fiarte de aquello que siente realmente y de lo que, a veces, ni siquiera ella misma tiene conciencia?

Una de tus misiones principales a la hora de calibrar es, por tanto, descubrir a qué detalles externos puedes asociar su Estado Emocional Favorable de sentirse totalmente entusiasmada sobre algo, qué detalles externos se asocian a sus estados de indiferencia o aburrimiento y qué detalles externos puedes asociar a sus estados de desagrado, repulsión o extremo rechazo.

Finalmente, debes descubrir que detalles externos se corresponden con sus respectivas actitudes de acuerdo, neutralidad y desacuerdo o, si se prefiere, correcto, no sabe y equivocado.

No te hablo de gestos y acciones obvias que son evidentes para todo el mundo y prácticamente universales. Te hablo de esas pequeñas sutilezas que son diferentes en cada persona y que, de dominarlas, te permitirán determinar lo que la mujer con la que interactúas siente mejor que ella misma.

Tu Calibraje debe funcionar de modo similar al detector de mentiras que hemos mencionado en el apartado anterior.

Asegúrate primero de haber provocado en ella los diferentes estados[426] y actitudes[427] que pueda interesarte identificar más adelante. A continuación, apunta mentalmente los signos externos[428] que acompañan casi siempre a dichos estados y actitudes. Una vez hecho esto, serás capaz de leerla como un libro abierto y saber por dónde pisas[429].

CALIBRA EL CONTEXTO[430]

En el universo ideal de la compenetración, esta subsección sobre el Calibraje sería innecesaria.

Hablo de un mundo en el que las parejas, cada vez que se quisiesen conocer algo mejor para ver si se sienten atraídos el uno por el otro, se introdujeran en cápsulas de cristal aisladas de todo lo demás, en las cuales reinase el silencio o una buena música de ambiente y dónde se hubiese fumigado un gas amnésico que hiciera a los participantes olvidar sus diferencias, su Estatus, sus creencias religiosas, sus amistades, sus proyectos de futuro y sus recuerdos.

En dicho universo, el Calibraje por parte del hombre se reduciría a una decodificación de los estados de su amada.

Pues bien, el mundo real tiene muy poco que ver con la historia descrita.

En el mundo real, vas a encontrarte con rivales, con amigas Blocapollas, con situaciones sociales hostiles, con terrenos de juego adversos y con un montón de factores que, sin formar parte directa de la interacción entre tu Objetivo y tú, actuarán a favor tuyo o en tu contra, pero que jamás van a resultar indiferentes a tu juego.

Esta es, pues, la razón por la que debes estar evaluando aquello que te rodea constantemente. Lo harás tanto para amoldar tu juego a dicho entorno como para tratar de modificar dicho entorno o incluso sustituirlo por otro cuando sea necesario.

En todo momento debes ser consciente de la impresión previa por su lado con la que partes. Te corresponde calibrar también cómo actúan los prejuicios dentro de cada grupo o lugar, hasta dónde te permite llegar un contexto o situación determinados y cuáles son los principales obstáculos y retos a los que te enfrentas.

Presta atención asimismo a las trampas que pueden tenderte terceras personas que compitan contigo o simplemente no quieran verte triunfar. Considera detalles cómo la manera más indicada para velar por la reputación de tu Objetivo[431], qué opciones que barajas, cuál sería tu terreno de juego ideal[432] e, incluso, si vale realmente la pena o no jugar en tales condiciones[433].

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