ERRORES TÍPICOS
ERRORES TÍPICOS DEL FRUSCO
Como aprendiz de Aven, es lógico que cometas muchos errores. De hecho, deseo que así sea, pues esto supondría un signo inequívoco de que estás practicando y vas a hacer progresos.
Sin embargo, hay algunos errores —a menudo de planteamiento— que son especialmente graves y poseen un especial poder para apartarte del camino. De ahí que quiera advertirte sobre algunos de ellos, los más típicos.
Así, con suerte, podrás reconocerlos a tiempo y evitarte muchos quebraderos de cabeza. Algunos de ellos supusieron equivocaciones importantes que yo mismo cometí.
Vamos, pues, sin más dilación a conocerlos. Encontrarás que algunos de ellos tienen que ver con cómo interactúas con las mujeres, en tanto que otros son problemas de actitud. Recuerda que estos últimos son los más urgentes.
ELEGIR LA PÍLDORA AZUL[161]
Cuando se quiere aprender, el peor error que se puede cometer es tenerle miedo a la verdad. Esto es, además, lo que la mayoría de la gente hace.
Porque todos hemos sido Fruscos. Pero la principal diferencia entre unos Fruscos y otros, los que algún día dejarán de serlo y los que no lo harán, no es su grado de habilidad o su coeficiente intelectual. Es, sobre todo, cómo reaccionan ante el miedo a descubrir verdades incómodas o desagradables.
Esto, por supuesto, se trata de algo natural. Todos tememos al cambio y a lo desconocido de forma instintiva. Cuando entendemos que, para cambiar algo en nuestras vidas, vamos a tener que operar modificaciones profundas, alterar nuestro sistema de creencias más básico o el esquema sobre la realidad con el que hemos funcionado hasta ahora, caemos presa del terror.
Y, de nuevo, es natural. Lo familiar es reconfortante, en tanto que lo desconocido asusta. Sin embargo, si como yo has sido un Frusco durante muchos años, va a hacer falta algo más que aferrarte a las ideas familiares para cambiar tu vida. Va a hacer falta algo más que elegir la píldora azul.
CRITICAR ANTES DE PONER A PRUEBA
«Eso no puede funcionar».
«Y aun cuando les funcione a otros, sé de sobra que en mí no funcionaría. No soy ese tipo de tío».
¿A qué te suena esto? ¿A una excusa, quizás?
Pues bien, eso es precisamente lo que es. Y de las más dañinas. Pues, por extraña que pueda parecerte la filosofía de este libro, ¡funciona!
Es contraintuitiva y entra en conflicto con muchas de las cosas que nos han enseñado. Pero funciona. Dale una oportunidad porque, de lo contrario, ¿cómo vas a descubrirlo?
SER TÚ MISMO
No sé quién puso por primera vez este mito en circulación. Solo sé que debió ser alguien bastante malintencionado[162].
O un Natural. A fin de cuentas, los Naturales son los únicos con quienes el consejo funciona.
Como Aven, en cambio, voy a ser bastante tajante. Si ser tú mismo implica dejarte llevar por la inercia y seguir haciendo mal lo que haces mal, ser tú mismo no va a hacerte mejorar con las mujeres. Solo va a hundirte en el fango más y más. Y, desde luego, no va a ayudarte a encontrar a esa mujer «especial», sino a alejarla.
Si me preguntas mi opinión, creo que un hombre que renuncia a lo que quiere porque se lo digan otros no es él mismo. Y si cree que va a conseguirlo sin cambiar lo que nunca ha funcionado probablemente tampoco está actuando con la inteligencia que se merece.
En otras palabras, si deseas el éxito, trata de estar más a la altura de tu potencial. Y no te limites a ser tú mismo. Esfuérzate por convertirte en tu mejor mismo.
¿LE GUSTO O NO LE GUSTO?
Si aún piensas en términos de si le gustas o no, necesitas un buen repaso. Sencillamente, se trata de un modelo que únicamente funciona en el caso de los hombres, y no siempre[163].
Así que deja atrás el chip: «le gusto o no le gusto», «me quiere, no me quiere». O «si le gusto, ¿por qué hace esto?» y «si no le gusto, ¿por qué hace esto otro?».
Abandona esa forma de pensar porque está, sencillamente, equivocada. Aunque es cierto que el mecanismo de atracción en el hombre funciona casi como un interruptor, a partir de ahora concibe el mecanismo de atracción en la mujer como la rueda de volumen de tu cadena musical. Puede subir, puede bajar. De hecho, en todo momento está subiendo o bajando.
Cuando está lo bastante alto, se dice que la Temperatura de Compra[164] es alta, y puedes pasar al siguiente Nivel. Pero solo eso. Porque, aun en el siguiente Nivel, seguirá subiendo o bajando. Y recuerda: tu objetivo no es gustarle, es aprovechar sus Estados Favorables para pasar de Nivel[165].
Si lo prefieres, empieza a ver las interacciones con mujeres como un semáforo. Pueden estar en rojo, verde o ámbar. En rojo significa que debes parar o cambiar de camino. En verde, que puedes avanzar. En ámbar, que puedes avanzar, pero con cautela.
DERROTISMO: NO ES LO MÍO
Conozco mucha gente que está bastante atrapada en este aspecto. Muchos de ellos han visto actuar a algún Natural y, como consecuencia de ello, se han convencido de que simplemente hay gente que tiene el don y gente que no.
De hecho, están muy extendidas expresiones como «tener gracia», «chispa», o «mano» con las mujeres. Seguramente han surgido a raíz de observar a los Naturales, aun cuando estos no fueran demasiado atractivos o apuestos. Pero eso no cambiaba nada: o se era o no se era. O se tenía el don o no se tenía.
Los hombres podían descansar tranquilos si no eran buenos con las mujeres. Había que resignarse. Era como no ser alto, como haber nacido en un lugar sin playa, como ser diabético, etc.
En cierto modo, había paz. Paz y resignación. Paz, infelicidad y resignación. Pero bueno, lo importante es que uno estaba en paz consigo mismo.
Hasta que… ¡llegaron los Aven! Y ahora los Aven están demostrando al mundo que el éxito con las mujeres depende de un conjunto de habilidades más, que se puede cultivar como cualquier otro.
Así que, mucho me temo que… si de verdad quieres… ¡sí puede ser lo tuyo!
CONFUNDIR APROBACIÓN CON ATRACCIÓN
Ya sabemos que las mujeres nos ponen a prueba constantemente retirándonos su aprobación.
Pues bien, en nuestra época de Frusco todos lo hicimos. Esperábamos la aprobación de la chica que nos gustaba como una mascota espera su galletita. Cada vez que conseguíamos algo de aprobación por su parte, nos alegrábamos y hasta nos poníamos nerviosos. Sin embargo, la galletita no llegaba siempre. Además, tampoco parecía llevarnos a ningún lado.
Después estaba el otro tío. Aquel al que ella le reía las gracias sin que este hiciera nada para merecerlo. No se había ganado galletitas como nosotros y, sin embargo, ella parecía hacerle más caso. Y, finalmente, era con el que se quedaba y por el que suspiraba.
¿Qué estaba pasando? Sencillamente, que habíamos confundido aprobación con atracción.
EXPLICAR CUANDO HAY QUE APLICAR
Voy a hablarte de una rara especie de Frusco. El Fruscaven.
El Fruscaven es un tipo que habla de la teoría todo el tiempo, pero rara vez la usa. A veces, incluso conoce mucho de ella, pero sigue siendo incapaz de poner nada en práctica.
Y esto, que es en sí bastante malo, se queda corto en comparación con lo que hace una de las variedades más desesperantes de Fruscaven. ¿En qué consiste? Nada más y nada menos que en… ¡hablar a las mujeres de la teoría! Es como si, en lugar de conquistarlas, quisiera demostrarles mediante razonamientos y palabras que podría hacerlo si quisiera.
Lo cierto es que hay pocas cosas peores y más retorcidamente equivocadas. Pues, además de activar todos los mecanismos de defensa posibles en la mujer, logramos que esta nos perciba —y descarte— solo desde su mente lógica y racional. ¿Hay algo peor para la atracción? Es algo así como arrojar luz a una sombra y hacer que esta desaparezca.
En realidad, solo hay un caso en el que es bueno hablar de la teoría: cuando otros la están poniendo en práctica. Al sacar su juego a la luz y —a ser posible— ridiculizarlo, este pierde gran parte de su poder. Además puede hacer que dicha persona sea captada por su Radar. Eso sí, debemos hacerlo con la suficiente sutileza como para que no parezca que lo estamos haciendo con la intención de minar el juego del contrario.
COMPRAR SU COMPAÑÍA
Eres libre de hacer con tu dinero lo que quieras.
Ahora bien, si te gastas un solo céntimo con ella, te recomiendo que no parezca que la estás comprando. El dinero solo debe gastarse cuando, realmente, no significa nada.
Si le compras algo con la esperanza de que se sienta atraída y ella lo percibe, automáticamente te va a encasillar como Beta que necesita compensar su falta de Valor con otras cosas. Estarás empezando por el camino erróneo.
Personalmente, no suelo gastar dinero con una mujer antes de haberme acostado con ella. Y, en las raras ocasiones en que lo hago, lo hago porque me apetece o para compensar algún otro esfuerzo o gasto que ella haya podido hacer por mí, como un largo viaje en coche o la preparación de una cena romántica. Pero, como regla general, olvídalo. Se congruente con la idea de que tú eres el Premio, y nunca compres su compañía[166].
CUALIFICARSE O ALARDEAR
Cuando un hombre deja ver que está intentando mostrarse a la altura de las expectativas de cualquier mujer, le está también comunicando su escaso Valor. Está aceptando su Marco de que ella es el Premio y de que él debe esforzarse por conseguirlo. Igualmente beta resulta alardear, especialmente si se hace sobre la profesión, logros personales, etc. Esto es casi idéntico a comprar su compañía.
Y, en cualquier caso, es algo que tiende claramente a reforzar su rol.
REFORZAR SU ROL
Este problema del comportamiento Frusco se manifiesta, como hemos visto, de muchas formas. Lo hace cada vez que contribuye, de la forma que sea, a reforzar en su mente su rol de TB deseada por los hombres, de los cuales eres uno más. Y, en general, todo lo que refuerce el Marco de que ella es el objeto sexual de la relación o el premio a tus esfuerzos va a perjudicar tu juego.
Además de devaluarte, reforzar su rol va a impedir que ella acceda a partes de sí misma interesantes para ambos y que podrían sacarla del modo de Piloto Automático[167].
MOSTRAR NECESIDAD O URGENCIA
Si la persigues sin que ella te haya dado pie a que lo hagas o si te aferras a algún IDI que en un momento haya podido ofrecerte para seguir agobiándola, caerás rápidamente en la categoría de los Pulpos Emocionales, Acosadores, etc. En definitiva, te estarás convirtiendo en un Fruscoplomo.
Ni que decir tiene que esto es negativo en todas sus formas, ya hablemos de necesidad afectiva, sexual, etc.
MENTALIDAD DE ESCASEZ
«¿Cómo no voy a mostrar necesidad, con lo difícil que es conseguir una mujer hoy en día?»… O: «Cuídala, porque no vas a encontrar muchas mujeres así de guapas que se interesen por ti».
Ambos comentarios están extraídos de películas cuyos títulos no recuerdo. De hecho, toda nuestra cultura está inundada de ese tipo de comentarios. La mejor forma de definirlos es esta:
Falacias.
Cuanta más necesidad muestres, más difícil te resultará atraer a las mujeres. Y, decididamente, si puedes atraer a una mujer guapa, puedes atraer a varias.
Lo curioso de la mentalidad de escasez es que no solo es una DEV en sí misma y un signo distintivo de los hombres Beta. Es además pésimo para tu desarrollo a largo plazo. Un poco como esas profecías que se autorrealizan.
A grosso modo, la cosa funciona así:
Si piensas que esa chica que te ha hecho un poco de caso es la única que puede estar interesada en ti, vas a invertir mucho tiempo y energía en conseguirla. Finalmente, es más que probable que no lo hagas y, el hecho de que hayas invertido tanto en ella, solo va a hacer que te sientas más fracasado y poco atractivo.
El Aven hace todo lo contrario. Si una mujer no le presta la suficiente atención como para pasar de Nivel, pasa a otra. Si esta tampoco lo hace, pasa a otra. Y a otra y a otra y a otra. No ha invertido mucho en ninguna de ellas, por lo que siempre puede decirse a sí mismo que quizás esa es la causa. Su autoestima, pues, sigue intacta. Y, además, por el camino no solo ha aumentado sus probabilidades estadísticas de tener éxito con alguna. Ha ganado una enorme habilidad.
Pronto es capaz de llegar más lejos con las mujeres que aborda, y su habilidad no hace sino aumentar. Constantemente está obteniendo feedback de las reacciones de muchas mujeres, de lo que hacen cuando están interesadas, de lo que hacen cuando no lo están y de lo que ocurre para que dejen o empiecen a estarlo.
Y todo gracias a que es consciente de que no hay ningún problema de escasez, sino de habilidad.
A LAS MUJERES LES GUSTAN LOS TÍMIDOS
Sí, es cierto que a menudo oirás a muchas mujeres decir que les gustan los hombres tímidos, pero esta es una afirmación que hay que saber interpretar. A menudo lo dicen porque simplemente es difícil encontrar hombres seguros y capaces de plantearles un reto a la vez. Otras, ni siquiera se refieren a lo que tú y yo podríamos entender por nervios o incomodidad cuando hablan de timidez, sino más bien a una especie de reserva y misterio.
También hay quienes al decir esto imaginan a un hombre por el que ya están completamente coladas, que les resulta inaccesible y les hace sentirse inferiores, y al cual dotan de cierta inseguridad y nerviosismo en su fantasía solo para hacer esta más viable. Es lo que se conoce por El mito de Clark Kent y Superman.
En realidad, mostrar inseguridad, nervios o incomodidad es uno de los errores más comunes en las primeras fases de una interacción y conlleva una pérdida de Valor inmediata[168].
HACER DE ESTO UNA CUESTIÓN DE EGO
«Vale, ser tímido no es lo mejor para el juego. Pero… odio que me rechacen».
La cuestión es que no te rechazan a ti. Rechazan tu juego.
Y, el juego, no tiene nada que ver contigo. No es nada personal. Es algo que puedes aprender, o no. Mucha gente no sabe jugar al Bridge y no se siente mal por ello. Pues bien, este es otro juego más.
Y, a nadie le gusta perder, pero no porque pierdas vas a dejar de jugar al Monopoly, al Parchís o a tu videojuego favorito.
La única diferencia entre este juego y los otros es que, cuando te hagas bueno, este te va a proporcionar mucho más en la vida.
ERRORES TÍPICOS DEL ASPIRANTE A AVEN
Has visto ya algunos de los errores más graves, los errores típicos del Frusco. Verás, eso sí, que a medida que estudies este libro y trates de poner en práctica la teoría, dichos errores irán disminuyendo, hasta que dejes de hacerlo por completo.
Los que expongo a continuación son típicos del Aspirante a Aven, así que debes prestarles especial atención, ya que es posible que tardes más en desprenderte de ellos.
OBSESIONARSE CON LA MATERIA
¿Recuerdas que te dije que para ser un Aven debías ser algo más que un Aven? ¿Y aquello de que para ligar debías tener algo mejor que hacer que ligar?
Pues bien, ambas afirmaciones son totalmente ciertas.
Cuando se descubre esta disciplina por primera vez, resulta tan apasionante que es normal obsesionarse con ella por un tiempo. Sin embargo, si esta obsesión es demasiado intensa y dura demasiado tiempo, puedes empezar a parecerte más a un autómata de las Artes Venusianas que a un ser humano normal.
Algo, además, que ni siquiera mejorará tu juego. Por un lado, sentirás que dependes del éxito con las mujeres para obtener Validación, lo cual te hará menos atractivo a sus ojos.
Por otro, empezarás a vivir en un mundo demasiado aparte de la realidad corriente como para poder conectar con otros seres humanos.
Recuerda que esto es una gran afición que puede cambiar tu vida. Pero solo eso.
CONVERTIRSE EN LA CARICATURA DEL MACHO ALFA
También se le conoce por «capullo».
Para un principiante, es fácil formarse un modelo caricaturizado del Hombre Alfa, y caer en él. Se figurará cosas como que es un tipo agresivo, hosco y hostil, prepotente, centrado totalmente en sí mismo, insensible y con escaso sentido del humor.
Solo quiero recordarte que el comportamiento del Hombre Alfa no tiene nada que ver con eso.
Recuerda que somos animales sociales y muy inteligentes. De ahí que el auténtico Hombre Alfa sea por lo general alguien agradable, simpático y fácil de tratar. Alguien, además, excepcionalmente dotado socialmente y capaz de ganarse rápidamente el aprecio de cualquier grupo. Si la gente te detesta, es que aún no has aprendido a serlo. No tires la toalla.
PASARSE DE LA RAYA
Como podrás comprobar más adelante, algunos consejos que te ofreceré incluyen meterte un poquito con el Objetivo, bajarle la autoestima o mostrar desinterés. Como es lógico, todo esto puede sacarse de contexto y llevarse a un extremo.
Mi consejo es que no olvides que este juego es altamente sutil, como tocar un instrumento. De ahí que las reglas no deban aplicarse de forma dogmática y a rajatabla, sino siempre con sensibilidad y midiendo constantemente la reacción que obtenemos. Es decir, calibrando.
Por supuesto, a veces es necesario equivocarse para saber dónde están los límites, así que perdónate cuando te pases de la raya. Eso sí, intenta no hacer de ello un deporte.
ACTUAR COMO UN ANIMALITO SUPLICANTE DESPUÉS DE HABERSE PASADO DE LA RAYA
A veces, nos damos cuenta de que la interacción se ha ido a pique por nuestra culpa y, de repente, sentimos una necesidad imperante de reconciliarnos con el Objetivo. Ahora lo vemos como un ángel y necesitamos correr a sus pies para que nos perdone y nos acepte de nuevo.
La mala noticia es que el juego no funciona así. La solución no pasa por mostrarte como un Fruscoblando que se ha marcado un farol. No consiste en actuar como un animalito necesitado, dependiente y buscador de aprobación con el fin de compensar tu exceso de chulería.
Una vez lo hemos echado a perder, aunque sea culpa nuestra, a menudo lo mejor es aprender del error y pasar a la siguiente interacción. Podemos disculparnos, pero sin arrastrarnos ni perder la dignidad. Y, si vemos que la interacción ya está viciada, abandonémosla.
¿Por qué? Porque las chicas tienen una cosa que se llama Descalificación y Lista Negra. Y, si ya has caído allí, a menudo vale más la pena empezar de cero con otra que no nos haya fulminado.
MAL CALIBRAJE
Calibra, amigo, calibra. El Calibraje es casi siempre lo más importante del juego. La mayoría de los errores provienen de un mal Calibraje o de una falta de congruencia[169].
Recuerda que cada situación es distinta y que no todas las mujeres son iguales. Además, unas parten con la autoestima más alta y otras más baja, algunas te van a aceptar más que otras o van a empezar lanzándote más IDIs que a otras. Así que no puedes darles a todas el mismo tratamiento. Como haría un buen doctor, debes aplicar los principios, pero siempre de forma individualizada.
No apliques nada de forma inflexible o dogmática. La vida es demasiado rica y compleja para ello.
FALTA DE CONGRUENCIA
La falta de congruencia es un obstáculo que atenta contra nuestro éxito a varios niveles. Es, entre otras cosas, una de las mejores formas de fallar un test o verse descalificado. Cuando se da a pequeña escala, simplemente activa sus Defensas.
A fin de cuentas, la incongruencia es uno de los rasgos que los Radares de las mujeres se encuentran más preparados para detectar.
Como ya sabes, la mejor forma de acabar con tu incongruencia es cultivar tu congruencia, actuando como la persona que quieres ser en todo momento y a todos los niveles. Así, pronto lograrás asimilar tu nuevo yo, y lograrás que tu persona y tu comunicación se encuentren alineados a todos los niveles con aquello que pretendes proyectar o crear.
INTENTARLO DEMASIADO
Intentarlo demasiado es una de las formas más típicas de mostrar incongruencia. Es, además, la más disculpable, pues es lógico que quien quiere aprender se esfuerce por poner en práctica todo lo aprendido.
Sin embargo, a veces se nos escapa de las manos que nuestra ansiedad y entusiasmo están siendo percibidas y que son, quizás… ¿un poquito más altos de lo normal?
Recuerda que esto baja tu Valor y, además, hace que te detecte su Radar.
DERIVADOS DE LAS CONSECUENCIAS DEL EFECTO CRISÁLIDA
Como Frusco, eras una especie de gusano en el Juego. Ahora vas camino de convertirte en una mariposa. El problema es ese periodo de transición que se encuentra en medio, llamado «Efecto Crisálida».
Porque qué duda cabe de que ser una mariposa mola más que ser un gusano. En cambio, ¿no es mejor a veces ser gusano que un capullo enrollado?
Eso te va a pasar, por lo que debes estar preparado.
Vas a cambiar demasiadas cosas sobre ti como para que el cambio se lleve a cabo de una forma grácil y fluida. Algunos aspectos de tu personalidad y comportamiento van a empezar a tambalearse, hasta caer.
Pues bien, durante esta etapa es posible que oigas cosas como «forzado», «poco natural», «con guión», «bicho raro» y «freaky» cuando la gente hable de ti. Pero tranquilo, es normal. Todos hemos estado allí. Pasará.
Algún día, terminarás asimilando la técnica y la teoría y, cuando forme ya parte de ti, te habrás convertido en esa mariposa.
AUTOSABOTAJE: MIEDO AL ÉXITO
Este es uno de mis favoritos, porque he cometido este error una y otra vez. Básicamente consiste en sufrir un ataque de terror cuando lo que hacemos empieza a funcionar. Empiezas a percibir muestras de interés por parte de una TB o percibes que incluso ha llegado el momento de llevar las cosas al terreno físico, y te quedas como petrificado.
Hay una parte de ti, tu Frusco Interior, que no percibe lo que está a punto de ocurrir como natural o correcto. Entonces ese Frusquito que llevas dentro empieza a hacer toda clase de cosas para sabotear tu éxito. Puede inducirte a tener una actitud pasiva cuando debes seguir adelante y pasar de Nivel o puede estimular toda clase de reacciones idiotas para que lo eches a perder.
Lo que debes hacer es darle un buen puntapié a tu Frusco Interno, dejarle claro que no te importa cuánto patalee porque, sientas lo que sientas, tú has venido a hacer tu trabajo y a aprender. Hazle ver que no tiene por qué esforzarse puesto que, tarde o temprano, vas a conseguir lo que quieres. Mejor que se vaya haciendo a la idea. Porque está escrito.