Antilibro

1. Yo, Al Sayed Nasir-ud-Din, juro ante los hombres que mis palabras son la fiel transcripción de lo que he oído directamente de la boca del hombre Jesús, conocido como Issa, y que él ha querido contarme a su regreso de la región llamada Palestina. En el año del antiguo calendario 2671 y en el año 52 del nuevo calendario Xia, cuando mi maestro tenía treinta y cuatro años.

2. Él me ha querido relatar los episodios vividos de modo que quede testimonio de su vida, tanto entre los que han creído en él, en sus palabras y en su ejemplo, como entre los que lo traicionarán o se prestarán a la mistificación cuando él ya no esté. Serán muchos, entre romanos y judíos, e incluso entre quienes lo han querido y adulado, los que demostrarán ser falsos discípulos. Muchos, de buena fe, tergiversarán sus acciones, y muchos, con mala fe, aprovecharán para desvirtuar su mensaje de amor.

3. Sea bendito por siglos Issa, por el amor que ha sabido dar a su familia, a todos los hombres que le han conocido y, por último, a mí, que he tenido el privilegio de ser su amigo. A partir de ahora hablará Jesús, llamado Issa.