INTERIOR DE LA MANO
Palma de la mano.
Planta que no anda más que sobre el tacto.
Que se abre hacia lo alto
y en el espejo acoge las celestiales rutas,
errantes ellas mismas.
Que ha aprendido a andar sobre las aguas
al sacarlas del pozo,
que va por las fuentes
metamorfoseando todos los caminos.
Que entra en otras manos,
que hace de sus gemelas un paisaje:
tras errar llega a ellas,
las colma de llegada.
Muzot, octubre de 1924