DE LOS FOSOS AQUÍ EN LA FOSA
Oigo el canto del profeta,
ángeles le recrean ahora,
¿temblaría el bueno en ésta?
León y leona de vez en cuando
se acarician a su alrededor;
sí, los dulces piadosos cantos
han seducido a los dos.
Ángeles vuelan en vilo
para encantarnos ahora,
qué canto tan divino
en los fosos, en la fosa.
¿Temblaría aquí el niño?
Estos dulces piadosos cantos
no dejan desdicha dentro:
Ángeles de vez en cuando
y así todo queda hecho.
Pues en la tierra reina el Eterno,
sobre mares reina su mirada,
leones han de ser corderos
y la ola se vuelve volteada.
Queda en el golpe la espada brillante,
fe y esperanza cumplidas;
milagros el amor hace
que en la oración se perfila.
Y así con los niños buenos
un santo ángel delibera,
para evitar mal deseo,
y estimular la acción buena.
Así conjuran encantar al borde
del Hijo Amado en la rodilla
al gran tirano del bosque,
piadoso sentido y melodía.
1826