Dicen que la angustia es la conciencia de la posibilidad. Y creo que es muy cierto.
Igual que los porqués son la conciencia de la búsqueda del sinsentido.
Preguntarse por qué no sirve para nada. Tan sólo intentas encontrar una respuesta a cosas de la vida que seguramente no la tienen. Los porqués sólo llevan a la tristeza y a la depresión.
¿Por qué alguien te dejó de querer? ¿Por qué murió aquella persona? ¿Por qué perdiste aquello? ¿Por qué te pusiste enfermo?
La respuesta siempre es la misma: el universo te ama y te ha cambiado las preguntas para que encuentres nuevas respuestas.