14

 

 

 

La casa permanecía en absoluto silencio cuando Flavio hizo girar la llave en la cerradura. La oscuridad era total y el ambiente estaba cargado, se podía apreciar la acumulación de polvo por la falta de limpieza en el inmueble durante mucho tiempo, y había algo en su interior que desprendía un olor desagradable. Paula se dirigió directamente hacia las ventanas y comenzó a abrir las persianas una por una hasta que la estancia fue tomando color gracias a los rayos de luz que se filtraban a través del polvoriento cristal.

—Mucho mejor así —dijo la muchacha.

Flavio recorrió con la mirada todo el piso, que se resumía a una habitación diáfana donde se unificaban el salón y el dormitorio por la ausencia de tabique. A la izquierda se encontraba una pequeña cocina con barra americana y al fondo del piso había dos pequeñas puertas. Una pertenecía al cuarto de baño y la otra daba a un pequeño trastero. Era una vivienda algo claustrofóbica. Flavio pensó que la anciana a la que acababa de interrogar había estado estafando a la víctima con el alquiler de ese piso que no llegaba a los cuarenta metros cuadrados. Sobre la cama reposaban un gran número de periódicos junto con varias revistas pornográficas abiertas de par en par.

—Ésta es una de las razones por las que no quiero traerte a mi trabajo —dijo Flavio mientras cogía las revistas y las cerraba de golpe.

—Ese tío era un cerdo...

—Quiero que busques cualquier cosa extraña que veas o cualquier evidencia de algún culto demoníaco o secta. Busca símbolos satánicos, de cualquier creencia o religión que no sea la cristiana.

—Está bien.

Miraron entre las sábanas, debajo de la cama, en los muebles, entre diversos papeles, libros… Buscaron por todas partes y no encontraron absolutamente nada, así que dieron por hecho de que estaban buscando una pista falsa.

Flavio pensó entonces que quizás la extraña forma en la que Marcos había sido asesinado no se debía a ningún culto al diablo ni magia negra, sino a algo con lo que aún no habían dado.

Lo único que habían encontrado eran las revistas pornográficas, comida en estado de putrefacción en el frigorífico y alguna que otra fotografía de la pareja donde ambos parecían felices. Paula cogió entre sus manos una de ellas y observó con tristeza la imagen de Marcos Alcalde. La mirada del hombre rebosaba de vida y alegría, mientras que en las imágenes que ella había visto en el ordenador de su padre, la mirada estaba vacía, sin vida y perdida  directamente al cielo.Se le erizó el vello de los brazos al recordar las estremecedoras imágenes, y no pudo parar de pensar que ella había visto con anterioridad aquella horrenda situación en algún sitio.Pero no conseguía recordar dónde.

El infierno del Bosco
titlepage.xhtml
part0000_split_000.html
part0000_split_001.html
part0000_split_002.html
part0000_split_003.html
part0000_split_004.html
part0000_split_005.html
part0000_split_006.html
part0000_split_007.html
part0000_split_008.html
part0000_split_009.html
part0000_split_010.html
part0000_split_011.html
part0000_split_012.html
part0000_split_013.html
part0000_split_014.html
part0000_split_015.html
part0000_split_016.html
part0000_split_017.html
part0000_split_018.html
part0000_split_019.html
part0000_split_020.html
part0000_split_021.html
part0000_split_022.html
part0000_split_023.html
part0000_split_024.html
part0000_split_025.html
part0000_split_026.html
part0000_split_027.html
part0000_split_028.html
part0000_split_029.html
part0000_split_030.html
part0000_split_031.html
part0000_split_032.html
part0000_split_033.html
part0000_split_034.html
part0000_split_035.html
part0000_split_036.html
part0000_split_037.html
part0000_split_038.html
part0000_split_039.html
part0000_split_040.html
part0000_split_041.html
part0000_split_042.html
part0000_split_043.html
part0000_split_044.html
part0000_split_045.html
part0000_split_046.html
part0000_split_047.html
part0000_split_048.html
part0000_split_049.html
part0000_split_050.html
part0000_split_051.html
part0000_split_052.html
part0000_split_053.html
part0000_split_054.html
part0000_split_055.html
part0000_split_056.html
part0000_split_057.html
part0000_split_058.html
part0000_split_059.html
part0000_split_060.html
part0000_split_061.html
part0000_split_062.html
part0000_split_063.html
part0000_split_064.html
part0000_split_065.html
part0000_split_066.html
part0000_split_067.html
part0000_split_068.html
part0000_split_069.html
part0000_split_070.html
part0000_split_071.html
part0000_split_072.html
part0000_split_073.html
part0000_split_074.html
part0000_split_075.html
part0000_split_076.html
part0000_split_077.html
part0000_split_078.html
part0000_split_079.html
part0000_split_080.html
part0000_split_081.html
part0000_split_082.html
part0000_split_083.html
part0000_split_084.html
part0000_split_085.html
part0000_split_086.html
part0000_split_087.html
part0000_split_088.html
part0000_split_089.html
part0000_split_090.html
part0000_split_091.html
part0000_split_092.html
part0000_split_093.html
part0000_split_094.html
part0000_split_095.html
part0000_split_096.html
part0000_split_097.html
part0000_split_098.html
part0000_split_099.html
part0000_split_100.html
part0000_split_101.html
part0000_split_102.html
part0000_split_103.html
part0000_split_104.html
part0000_split_105.html
part0000_split_106.html
part0000_split_107.html
part0000_split_108.html
part0000_split_109.html
part0000_split_110.html
part0000_split_111.html