¿CÓMO SE RECONOCÍA A LOS HOMBRES BUENOS?
Tras la masacre de Beziers, el Papa da un toque de atención a Simón de Monfort para que no se vuelva a repetir una matanza indiscriminada. Cae Carcasona, Bram, Minerve, Termes, Lavaur, Les Cassés, Montferrand… pero en estas ciudades se cambia la estrategia. Ahora, cuando toman las ciudades, ya no se pasa a cuchillo a sus habitantes, sólo se prenden hogueras con un nuevo material altamente inflamable… los cátaros. El Languedoc arde por sus cuatro costados y los puros huyen de ciudad en ciudad. El rey Pedro II de Aragón cruza los Pirineos para intentar liberar Tolosa del asedio pero en la batalla de Muret (1213) muere. En 1215, Simón de Monfort controla toda la Occitania. Con la muerte de Simón de Monfort (le cayó una piedra en la cabeza durante un asedio) e Inocencio III, las cátaros tienen un respiro y vuelven poco a poco, en la medida de sus posibilidades, a retomar sus vidas. Y como las alegrías duran poco en la casa del pobre, los siguientes Papas (Honorio III y Gregorio IX) deciden retomar la labor emprendida por Inocencio III pero esta vez, ya con Gregorio IX, con una modalidad diferente… la Inquisición. Al no contar con el apoyo de ningún noble y, por tanto, de ninguna ciudad, los cátaros vivían entremezclados con el resto de la gente predicando y practicando en la clandestinidad. Así que había que separar el grano de la paja y para hacer esa criba se mandó la Inquisición a Tolosa en 1229. ¿Y cómo reconocerlos?
Aunque tuvieron que cambiar muchas de sus costumbres de los tiempos dorados para no ser reconocidos fácilmente —como ir en parejas para ayudarse mutuamente y no caer en la tentación—, su físico les delataba. Si cuidabas tu higiene personal (se lavaban todos los días; yo creo que con jabón habrían aceptado el bautismo), eras excesivamente delgado (eran vegetarianos; no podían matar a ningún animal por lo que he comentado antes de la migración de las almas) y de rostro muy pálido (vida austera, dedicada al trabajo y a la oración) tenías muchas papeletas para tener que pasar un interrogatorio de la Inquisición. Los cruzados hicieron la limpieza general y la Inquisición la selectiva.
Los cátaros estaban en contra del matrimonio y de las relaciones sexuales siempre que tuviesen como objetivo la procreación, ya que para ellos significaba traer almas puras a este mundo para estar encarceladas dentro de un cuerpo impuro. Y si las relaciones no eran para procrear, la Iglesia entendió que eran vicio y también se les acusó de montar orgías y de sodomitas. Pero aquí el Papa demostró su falta de inteligencia… si no pueden procrear poco futuro tendrían como comunidad, ¿no? Supongo que mi argumento es tremendamente simple pero…
Y ya que tratamos con la Inquisición, un manual publicado en 1578 dejaba muy claras sus intenciones…
Quoniam punitio no refertur primo y per se en correctionem y bonum eius qui punitur, sed en bonum publicum ut alij terreantur, y un avocentur malis committendis.
(Porque el castigo no se destina ni prioritariamente ni por sí mismo a la corrección de aquel a quien se castiga, sino al bien público, para que todos sientan terror y se aparten de cometer esos males).