A TODOS NUESTROS SEGUIDORES Y AMIGOS
Esto es lo mejor que puedo decir de mis compañeros de equipo, a los cuales estás a punto de leer y, por lo tanto, de conocer más profundamente.
Cada uno tiene un capítulo para que destaquen lo que recuerdan con más cariño o desde un punto de vista divertido. Aunque ya te avanzo que, por ejemplo, Alejandra Castelló alucina que Imanol Arias —al que admira profundamente— sea nuestro seguidor.
Xavi Sorinas y yo también alucinamos con que Miguel Bosé nos siga incluso en el extranjero y nos mande mensajes en mitad del programa. Porque Miguel está muy por encima de la palabra artista, y que nos elija cada mañana es un auténtico orgullo. Igual que David Otero, el Pescao, un tío que sabe lo que es por su etapa en El Canto del Loco y ahora en solitario lo que es ver un estadio lleno. Que se ofreciera a colaborar con nosotros nos emociona. Una cosa es proponerlo tú, ¡¡pero que sea el propio artista el que lo haga es la hostia!!
Podría seguir hablando de infinidad de artistas a los que admiramos y que nos dejan helados al ver cómo participan en nuestras redes sociales o cómo nos llaman un día sin venir a cuento para decirnos:
—Oye, que os oigo cada mañana y me tenéis para lo que queráis.
Como Alberto Caballero, director de una de nuestras series favoritas —La que se avecina—, o dos de sus actores principales, Nacho Guerreros y Jordi Sánchez —Coque y Recio—, los cuales nos elijen entre más de tres mil programas de radio que competimos en España. Has oído bien, tres mil.
Quiero enviar un abrazo enorme, como es él, a Karlos Arguiñano, al que respetamos y queremos y al que debemos el título del libro, porque está inspirado en su sección en nuestro programa: «Etiqueta Negra».
Mi mejor amigo, Sergi Bruguera, me asegura llorar cuando llamamos a los soñadores para que oigan cómo les dan las gracias por lo que representan en sus vidas.
Dani Muriel, nominado por dos obras diferentes a mejor actor de teatro este año, siempre me comenta lo que se ríe con la Brasas.
Gloria Serra no pierde la ocasión de pasar a visitarnos cuando está por la casa y nos explica lo que más le ha gustado del programa anterior. Te seguimos Gloria y estamos enamorados de ti profesional y personalmente.
Gracias a Andrés Iniesta, por el vino y las invitaciones a comer para agradecerme la compañía que le hacemos cuando va camino del entrenamiento. O a Moyá, portero del Atlético de Madrid, que se ofreció para colaborar con nosotros cuando estaba en el Getafe. Ahora, jugando y triunfando entresemana y fin de semana en el Atleti es complicado. Pero nos encanta saber que está ahí. Porque no son solo oyentes. Son amigos que nos hacer seguir innovando para ellos. Igual que Rosa de España, esa supervoz a la que todos tenemos un cariño especial o Carolina Cerezuela, Elsa Anka, Chenoa y una audiencia millonaria que se dice pronto, que nos acompaña día tras día, pase lo que pase.
Por cierto, antes nombraba a Miguel Bosé —Papito, como Laura Pausini, Shakira, Malú y un largo etcétera de artistas le llaman—. Que alguien como él me escriba desde diferentes partes del mundo para darme las gracias por haber arreglado el problema con los podcasts para que nos pueda seguir como si estuviera en España, es todo un honor.
Detalles como este los recibo como un auténtico regalo. Porque Miguel es un referente en el mundo del arte de este país. Se ha arriesgado como ningún otro artista en España. Ha ido con faldas en una España en la que era fácil que se acabara tu carrera por ser tan osado. Ha actuado y bailado como no se había visto antes. ¿Quién no ha tratado de bailar como él? Lo hacía de una forma que no hemos vuelto a ver nunca. «Es fácil», me ha dicho cuando le he comentado lo mucho que me gustaba ver que lo hacía sin esfuerzo. «Es moverse pero sin moverse del sitio» me asegura. Sí, sí, facilísimo…
El día que le propuse que nos escribiera el prólogo estaba en Estados Unidos de promoción de su último disco. Lugar en el que ha sido número uno —se dice rápido con el nivel de artistas que viven allí—. Tardó cinco minutos en contestarme:
—¡¡¡Por supuesto que sí!!! ¿Para cuándo lo quieres?
Y eso que yo no sabía que estaba en Estados Unidos y allí era de madrugada. Es simplemente genial. No sabes cómo te agradezco tus llamadas en mitad del programa solo porque te ha gustado un «Mushup» o porque quieres que le diga algo a Cantón. Sencillez en estado puro. Te queremos Miguel. Muchísimo, y lo sabes. Nos enamoraste con tu naturalidad el día que le pediste al director de la cadena venir a vernos, como si un artista como tú tuviera que pedir permiso. Cuando el regalo nos lo hacías tú.
Poco imaginas, Miguel —porque nunca te lo he dicho—, lo que supuso para mis chicos que un mito como tú entrara en el estudio y te lanzaras a besarlos llamándoles por su nombre y comentando las cosas que te gustaban de ellos. No imaginas lo que supuso para ellos y para mí, y eso que nos conocíamos de hacía tiempo. Una cosa es darte un premio en una gala como había hecho en alguna ocasión y hablar un rato en el camerino o el backstage y otra cosa muy diferente es ver que eres uno más de nosotros. Te queremos, te admiramos y te respetamos.
Esta es nuestra fuerza y nuestra motivación. Para todos ellos y para ti está pensado este libro. Yo mismo estoy deseando leerlo, porque esta vez propuse que mi equipo tuviera independencia total para realizar cada uno de sus capítulos y para que explicaran cómo viven el programa. No sabes cómo me apetece saber qué pensaban antes de que entraran a trabajar en Levántate y Cárdenas y qué piensan ahora que son seguidos por los artistas a quien antes seguían ellos. Poco imaginan que de esto depende su próxima subida o bajada de sueldo… Que lo disfrutes como yo pienso hacerlo.
¡¡Besos!!
JAVIER CÁRDENAS