110 Se puede llamar una hipótesis de este género un golpe atrevido*, de la razón, y hay pocos naturalistas a quienes no haya pasado por la mente. Porque no es precisamente absurda como esta generación equívoca que explica la producción de un ser organizado por el mecanismo de la materia bruta e inorgánica. Ella conserva siempre la generación unívoca en el sentido más general de la palabra, porque no admite un ser orgánico más que como producto de otro ser orgánico, aunque pretenda derivar de un mismo principio seres específicamente diferentes, como si por ejemplo, ciertos animales acuáticos se transformasen poco a poco en animales pantanosos, y después, conforme a ciertas generaciones, en animales terrestres. A juzgar a priori por la sola razón, no hay en esto nada de contradictorio. Solamente la experiencia no suministra ningún ejemplo. Al contrario, en todas las producciones que conocemos, la generación es homogénea, y no simplemente unívoca. No solamente se distingue de esta generación, que sería el producto de una materia no organizada, sino en la organización misma; el producto es del mismo género que el principio productor, y no se encuentra en ninguna parte la generación heterogénea tan lejos a donde pueda llegar nuestro conocimiento empírico de la naturaleza.
*Abentener.<<