Las leyes egipcias
En lo referente a los derechos de estos animales, tenemos mucho que aprender de los egipcios, puesto que, por ejemplo, tenían leyes que castigaban duramente el maltrato a los felinos. En este sentido, la legislación era tan estricta que ni el propio faraón podía indultar a un hombre acusado de pegar o maltratar a un animal.
El animal tenía tal consideración que era mucho más grave matar a un gato que a un humano: en el primero de los casos, todas las penas llevaban a la condena a muerte, aunque la muerte fuera por descuido o sin intención de hacer daño al animal.
La concienciación y el respeto eran tan elevados que, por ejemplo, en caso de incendio de la vivienda el felino era el primer miembro de la familia al que poner a salvo.