
Capitulo 17
Viernes, 6 de agosto de 1999; 2:41 AM
Una gruta subterránea
Ciudad de Nueva York
—Buenas noches, señor —dijo Umberto respetuosamente, desde las sombras. Una mano nudosa y retorcida le tendió un fajo de informes mecanografiados. Tinta roja y débiles sellos invadían los folios. El Nosferatu apoyó los folios en una carpeta cuya cubierta estaba provista de una débil luz y echó un vistazo a las notas manuscritas.
»Baltimore sigue con las conferencias... no hay noticias nuevas. Sin embargo, he conseguido los suculentos documentos de identidad de los dos que fueron anoche al club del viejo Vetealacama...
Unos ojos grandes y muy abiertos parpadearon.
—La mujer es Ramona chiquilla de Tanner; Tanner es el chiquillo de Horrock, etc. Es una Gangrel de reputación decente y posición moderada... Él parece ser un hombre de acción, de modo que hemos hecho un llamamiento a SchreckNET para saber dónde puede estar ahora. Probablemente, Ramona es Pilar Ramona Salvador. Su nombre aparece en el expediente del caso de una niña desaparecida en Los Ángeles: hija de una familia hispana pobre que vivía en un barrio de aquellos en los que suceden todo tipo de cosas. Apenas tuvo cobertura en la prensa y la policía no investigó el caso en profundidad. Sus padres han puesto una piedra conmemorativa en su parcela familiar de México y rezan por su hija perdida —las sombras susurraron ligeramente—. Lo sé. La vieja historia de siempre.
»Khalil Ravana, por otra parte, es un Ravnos de Bihar de tres al cuarto. Bueno, tiene un largo historial. —Acercó un informe a la oscuridad. A continuación, añadió triunfante:— La última vez que fue visto se encontraba en una discoteca de Calcuta, sentado en una mesa junto al famoso Hesha Ruhadze.
—Reúnete con él.