A Joan Bruna, persona entrañable
sin la que esta novela no habría nacido.
Gracias por su ánimo y su apoyo.
A Isabel. Gracias por su apoyo constante e
incondicional,
desinteresado y reconfortante.
¡Y por su paciencia!
A mi editora, Carol, por haber confiado
plenamente
en la novela y darme la oportunidad de publicar en este sello.
A mi cuñado Josep Maria.
Muchas gracias, Jimmy, por ser el primer brazo
firme
que evitó mi caída en los momentos más difíciles de mi vida.