193
HOMBRE QUE ROBÓ A LOS BANDIDOS

Seis bandidos muy temidos y poderosos que vivían de la rapiña, siempre robando y asesinando, tenían en un monte una casa donde había un cuarto lleno de dinero. Cada vez que salían, escondían la llave de la casa debajo de una piedra.

Un día un campesino y su hijo iban a buscar leña cuando vieron salir a los bandidos; se ocultaron y vieron dónde escondían la llave. En cuanto los bandidos se alejaron, los dos sacaron la llave de debajo de la piedra, abrieron, se llenaron los bolsillos de monedas; después cerraron, devolvieron la llave a su escondite, y regresaron muy contentos a la aldea.

Al día siguiente padre e hijo volvieron a robar a los bandidos, y lo mismo al otro día: el tercer día apenas el hijo abrió la puerta cayó en un pozo de cieno que los bandidos habían cavado a propósito debajo del umbral. El padre trató de sacarlo, pero no podía. Tenía miedo de que llegaran los bandidos y al encontrar al hijo también lo reconocieran a él. Entonces le cortó la cabeza a su hijo y se la llevó a casa.

Cuando los bandidos regresaron, encontraron un cadáver en el pozo pero no pudieron saber quién era porque le faltaba la cabeza. Y resolvieron colgarlo de un árbol seco en la cima del monte, dejando a uno de guardia para ver quién venía a recogerlo. El padre quería el cadáver de su hijo y fue a pedirle consejo a una adivina, para que le dijera qué convenía hacer.

Va de noche, se acerca al árbol seco y se esconde; y otro hijo suyo se esconde en el otro lado del monte, y con dos tablas de madera empieza a dar golpes imitando las coces de dos carneros. El bandido que cuidaba al muerto no había comido en todo el día, y al oír esos golpes va a ver si atrapa los carneros para comérselos asados. El padre del muerto, no bien se aleja el bandido, descuelga al hijo del árbol y se lo lleva a la carrera.

Los bandidos, al ver que los habían burlado, querían vengarse a toda costa del compañero del muerto, pero no acertaban a descubrirlo. Un día, al cabo de mucho tiempo, descendieron a la aldea para atender ciertos negocios y se enteraron de que en el lugar había un hombre que hacía poco se había enriquecido, y que era el padre del muerto. De inmediato los bandidos encargaron a un tonelero seis toneles grandes con una tapa en el fondo, y entraron cada cual en un tonel, todos armados. Después enviaron al tonelero a casa de ese hombre rico que vivía allí cerca para que, con la excusa de no tener sitio en la tienda, guardara los toneles hasta que el dueño viniera a retirarlos. El rico dice que sí y guarda los toneles en la bodega. Por la noche, una criada antes de ir a dormir va a tomar vino y oye voces dentro de los toneles.

—Bueno, ¿es o no la hora de salir a matar al dueño de la casa? —decían.

Al oír esa voz la criada volvió arriba temblando. Despierta al patrón y se lo cuenta todo. El patrón llama a los guardias y a los carabineros y baja a la bodega para arrestar a los bandidos. Arrestaron a unos y mataron a otros. Así terminaron sus andanzas: y el hombre que había robado a los bandidos conservó sus riquezas y vivió en su casa tranquilamente.

(Campidano)

Cuentos populares italianos
cubierta.xhtml
sinopsis.xhtml
titulo.xhtml
info.xhtml
Motivo-inicio.xhtml
Foto-autor.xhtml
portadilla-1.xhtml
portadilla-2.xhtml
Sec0000-titulo.xhtml
Section0101.xhtml
Section0102.xhtml
Section0103.xhtml
Section0104.xhtml
Section0105.xhtml
Section0106.xhtml
Section0107.xhtml
Section0108.xhtml
Section0109.xhtml
Section0110.xhtml
Section0111.xhtml
Section0112.xhtml
Section0113.xhtml
Section0114.xhtml
Section0115.xhtml
Section0116.xhtml
Section0117.xhtml
Section0118.xhtml
Section0119.xhtml
Section0120.xhtml
Section0121.xhtml
Section0122.xhtml
Section0123.xhtml
Section0124.xhtml
Section0125.xhtml
Section0126.xhtml
Section0127.xhtml
Section0128.xhtml
Section0129.xhtml
Section0130.xhtml
Section0131.xhtml
Section0132.xhtml
Section0133.xhtml
Section0134.xhtml
Section0135.xhtml
Section0136.xhtml
Section0137.xhtml
Section0138.xhtml
Section0139.xhtml
Section0140.xhtml
Section0141.xhtml
Section0142.xhtml
Section0143.xhtml
Section0144.xhtml
Section0145.xhtml
Section0146.xhtml
Section0147.xhtml
Section0148.xhtml
Section0149.xhtml
Section0150.xhtml
Section0151.xhtml
Section0152.xhtml
Section0153.xhtml
Section0154.xhtml
Section0155.xhtml
Section0156.xhtml
Section0157.xhtml
Section0158.xhtml
Section0159.xhtml
Section0160.xhtml
Section0161.xhtml
Section0162.xhtml
Section0163.xhtml
Section0164.xhtml
Section0165.xhtml
Section0166.xhtml
Section0167.xhtml
Section0168.xhtml
Section0169.xhtml
Section0170.xhtml
Section0171.xhtml
Section0172.xhtml
Section0173.xhtml
Section0174.xhtml
Section0175.xhtml
Section0176.xhtml
Section0177.xhtml
Section0178.xhtml
Section0179.xhtml
Section0180.xhtml
Section0181.xhtml
Section0182.xhtml
Section0183.xhtml
Section0184.xhtml
Section0185.xhtml
Section0186.xhtml
Section0187.xhtml
Section0188.xhtml
Section0189.xhtml
Section0190.xhtml
Section0191.xhtml
Section0192.xhtml
Section0193.xhtml
Section0194.xhtml
Section0195.xhtml
Section0196.xhtml
Section0197.xhtml
Section0198.xhtml
Section0199.xhtml
Section0200.xhtml
Section0201-notas.xhtml
Section0202-bibliografia.xhtml
autor.xhtml
notas.xhtml