GATO CAZADOR

MECANISMOS DE INTERCAMBIO. A veces perdemos cosas valiosas. Amigos y colegas, compañeros de viaje en Vurt, a veces los perdemos; incluso perdemos amantes. Y a cambio, obtenemos cosas malas: alienígenas, objetos, serpientes, a veces incluso la muerte. Cosas que no queremos. Forma parte del trato, parte del juego; en los dos mundos, todas las cosas deben mantenerse en equilibrio. Muchos suelen preguntar: ¿Quién decide los intercambios? Pues bien, algunos dicen que es completamente accidental, que algún pobre ser de Vurt se encuentra cerca de una puerta en un momento crucial, justo cuando algo real se pierde. ¡Ah! ¡La hora del trueque! Otros dicen que hay algún tipo de supervisor que controla los MECANISMOS DE INTERCAMBIO, que decide el destino de los inocentes.

El Gato solo puede reírse de eso, por los importantes secretos que hay implicados, y por los niveles que nos separan a ti, lector, y a mí, el Gato Cazador. Oye, lector, he luchado para llegar a donde estoy ahora. ¿Por qué iba a elegir el camino fácil? ¡Continuad trabajando, gatitos! Llegad más arriba. Trabajad el Vurt.

Pero recordad la regla de Hobart: R = V + o -H, siendo H la constante de Hobart. Es decir: cualquier valor dado de la realidad solo puede intercambiarse por el valor equivalente de la Vurtualidad, más o menos el 0,267125 del valor original. Sí, cachorritos felinos, no depende del peso, del volumen o del área de superficie. Se trata del valor. De cuánto importan los perdidos en el esquema general de las cosas. Solo podéis canjear a aquellos que añaden algo, según la constante de Hobart. Igual por igual, dar o tomar el 0,267125.

Nos hemos postrado a los pies de la diosa Vurt, y debemos aceptar el sacrificio. Naturalmente, queréis recuperar a vuestros solitarios perdidos. Les lloráis en las noches oscuras y vacías. El canje puede hacerse, pero el camino está lleno de cuchillos, puertas selladas, pasillos de cristal. Solo los fuertes pueden conseguirlo. Escuchad. Tened cuidado. Tened mucho, mucho cuidado. Ya estáis avisados.

Y esto viene del corazón.