Capítulo 69

 

 

 

Cuando sintió que la mano de Victoria lo apretaba con cierta fuerza, se levantó del asiento como si se hubiera eyectado. Giró hacia el fondo de la sala y lo vio entrar en medio de un tumulto. Jamás había experimentado la sensación de temor, ni mucho menos la falta de valor. Pero este miedo era particular. Ángelo observaba al escritor de una manera que hacia tiempo no usaba, con un escaneo visual completo de su persona. Con el tiempo había diseñado una infalible técnica de análisis de comportamientos naturales para crear un perfil casi instantáneo. Notó la mirada profunda, sensible, la pose recta, la sonrisa real, los movimientos de la mano, cada músculo de su rostro relajado y sin muestras de haber signos de nerviosismo, de culpas o de temor, y nada decían de una persona de la cual preocuparse.

Las distancias entre ambos disminuían y acercaban el encuentro. No sólo estaba a escasos metros del padre de la mujer de su vida; era la persona que lo había contratado para asesinarla. Sin embargo, algo no cuadraba. Victoria se convirtió en su confidente; era evidente que no le entregaría sus preciados secretos tan pronto, pero sí le contaba cada inquietud de su nueva vida. Ella respondía de forma reciproca. Ángelo tenía conocimiento de cada detalle de la salud de Andrés, e incluso de episodios pasados anteriores a la entrada de Victoria en su vida.

El encuentro era inminente. Victoria y Cacel se miraron con complicidad. Andrés Suanish parecía estar más compenetrado en el desarrollo de la gala, que en conocer al hombre que compartía la mayor parte del día con su hija. Victoria trató de destacar su voz frente el murmullo generalizado.

—Papá, él es Ángelo—declaró Victoria.

Andrés lo observó apenas unos segundos, que para Ángelo se hicieron eternos. A pesar de la tensión que imaginó que sentiría, una paz inexplicable se apoderó de su cuerpo. Extendió su mano frente al hombre que lo desvelaba por las noches en el peor sentido.

—Señor Suanish, es un placer conocerlo al fin —repuso Ángelo.

Andrés lo observaba sin prestarle la atención que merecía; con todo lo que acontecía esa noche, era inevitable que Ángelo pasara a un segundo, y hasta un tercer plano. Andrés Suanish no dijo nada, sólo estaba parado con la mano aferrada a del italiano. Luego lo soltó, acaricio suavemente el rostro de Victoria, quizás aprobando la presencia del joven apuesto en la vida de su hija.

—El placer es mío Ángelo. Disfruta la velada – contestó Suanish.

Todos se sentaron cuando la intensidad de las luces bajó y en la pantalla detrás del escenario montado, comenzaron a aparecer imágenes alusivas a los inicios de “La Fundación”. Cacel sonrió y lo tomó suavemente de la mano. En la primera fila estaban dispuestas las ubicaciones de los miembros directos de “La Fundación” con sus familiares, miembros de las artes diversas, algunos políticos, varios actores de cine y de la televisión, personalidades del mundo del espectáculo. Sólo quedaba ocupar una de las butacas, y justamente era la que estaba al lado de la de Suanish. Mark Denisfer no había dado señales de vida. Y eso comenzó a generar una cruda impresión en torno al afamado escritor.

 

 

 

 

 

 

 

El escritor de la tragedia
titlepage.xhtml
CR!2Q4JQ3KG6S5T7CTRTB4C33AF43BE_split_000.html
CR!2Q4JQ3KG6S5T7CTRTB4C33AF43BE_split_001.html
CR!2Q4JQ3KG6S5T7CTRTB4C33AF43BE_split_002.html
CR!2Q4JQ3KG6S5T7CTRTB4C33AF43BE_split_003.html
CR!2Q4JQ3KG6S5T7CTRTB4C33AF43BE_split_004.html
Section0001.html
Section0002.html
Section0003.html
Section0004.html
Section0005.html
Section0006.html
Section0007.html
Section0008.html
Section0009.html
Section0010.html
Section0011.html
Section0012.html
Section0013.html
Section0014.html
Section0015.html
Section0016.html
Section0017.html
Section0018.html
Section0019.html
Section0020.html
Section0021.html
Section0022.html
Section0023.html
Section0024.html
Section0025.html
Section0026.html
Section0027.html
Section0028.html
Section0029.html
Section0030.html
Section0031.html
Section0032.html
Section0033.html
Section0034.html
Section0035.html
Section0036.html
Section0037.html
Section0038.html
Section0039.html
Section0040.html
Section0041.html
Section0042.html
Section0043.html
Section0044.html
Section0045.html
Section0046.html
Section0047.html
Section0048.html
Section0049.html
Section0050.html
Section0051.html
Section0052.html
Section0053.html
Section0054.html
Section0055.html
Section0056.html
Section0057.html
Section0058.html
Section0059.html
Section0060.html
Section0061.html
Section0062.html
Section0063.html
Section0064.html
Section0065.html
Section0066.html
Section0067.html
Section0068.html
Section0069.html
Section0070.html
Section0071.html
Section0072.html
Section0073.html
Section0074.html
Section0075.html
Section0076.html
Section0077.html
Section0078.html
Section0079.html
Section0080.html
Section0081.html