EL EJÉRCITO DE SOLDADOS INVENCIBLES DE STALIN
Los hoplitas, las legiones romanas, los tercios, los jenízaros… han sido considerados los mejores guerreros/soldados a lo largo de la Historia. Más tarde, la ciencia ficción ha tratado de crear el soldado invencible: sofisticado armamento, soldados robots, modificaciones genéticas… y los humancé (híbrido entre humano y chimpancé). El caso es que el ejército de humancé no fue fruto de la ciencia ficción sino de la mente de un genocida: Stalin. La idea de Stalin, supongo que sacada del libro La isla del doctor Moreau de H.G. Wells, era crear un ejército de híbridos entre humanos y chimpancés con lo mejor de cada uno: la inteligencia humana combinada con la resistencia y capacidad física de los simios.
Unos años antes, el biólogo ruso Ilya Ivanovich Ivanov, especializado en el campo de la inseminación artificial y pionero en la obtención de animales híbridos, había conseguido el zubrón (híbrido entre vaca y bisonte), el zedonk (híbrido entre cebra y burro)… Éste era su hombre. En 1925, Ilya había obtenido el permiso del Instituto Pasteur de París para experimentar con chimpancés en Kindia (Guinea Francesa). Aquel proyecto obtuvo respaldo económico, 10.000 dólares, de Moscú. En esta ocasión, el experimento consistía en inseminar a hembras de chimpancé con esperma humano, pero, tras varios intentos, no hubo ningún resultado. Ilya decidió darle la vuelta a la tortilla… Inseminaría a mujeres con el esperma de chimpancés. Aquello ya era demasiado y las autoridades francesas le revocaron el permiso. Regresó a Rusia, que todavía creía en su proyecto, y continuó sus trabajos en Sujumi (Abjasia), donde las autoridades rusas habían creado un campo experimental con primates. Para seguir con sus experimentos en Sujumi, contaba con un chimpancé y cinco mujeres… «voluntarias». Antes de poder inseminar a las mujeres, el chimpancé murió. Ilya cayó en desgracia y fue condenado al exilio.
En los años setenta, apareció Oliver, un chimpancé casi humano, que se pensó que podría ser un híbrido. No fue así, pero era un tanto especial.