17. Tentativa de fuga
«Debe usted preparar sus textos como quien prepara un combate de boxeo, Marcus. Los días precedentes a la velada conviene entrenarse a un setenta por ciento del máximo, para dejar hervir y crecer dentro de uno mismo esa rabia que debe explotar la noche del combate.
—¿Qué quiere decir eso?
—Que cuando tenga una idea, en lugar de convertirla inmediatamente en uno de esos ilegibles cuentos que publica en la revista que dirige, debe guardarla en lo más profundo de sí mismo y dejarla madurar. Debe impedir que salga, debe dejarla crecer en su interior hasta que sienta que ha llegado el momento. Esto hace el número… ¿En cuál estamos?
—En el 18.
—No, estamos en el 17.
—¿Por qué me lo pregunta, si lo sabe?
—Para ver si me sigue, Marcus.
—Entonces, el 17, Harry… Convertir las ideas…
—… en iluminaciones».