Jack of Shadows
El cuento de Zelazny está situado en un mundo que ha cesado de rotar y, por ende, se encuentra dividido en regiones de noche y día permanentes con una franja crepuscular entre ellas. Es una situación de ciencia ficción bastante común, usada, por ejemplo, por Brian Aldiss en Invernáculo (1962), por Michael Moorcock en The Twilight Man (1966) y por J. G. Ballard en su cuento obsesionante «El día eterno» (1966). Pero todos ellos se situaban en nuestra Tierra. Roger Zelazny no indica si la acción de su novela se desarrolla en el futuro lejano, o en el pasado distante o en un mundo de un Universo alternativo. Lo cual tampoco importa, pues no es una obra con una lógica de ciencia ficción sino que sigue la lógica de la fantasía y tiene la cualidad intemporal de la narrativa de ficción.
Gran parte de la acción ocurre en el lado oscuro del mundo, donde impera la magia. El protagonista, Jack, es un pillo picaresco que usa sus poderes sobrenaturales en la persecución de una venganza que se convierte en algo mayor de lo esperado. En el curso de la narración, viaja por los ámbitos de la «noche» y el «día»; en el proceso crecen su conocimiento y su ambición, y luego aprovecha la ciencia del día y la magia de la noche para alcanzar sus fines. Jack of Shadows [Jack de sombras] sigue el modelo tradicional de los cuentos picarescos, en los que un héroe exiliado va en busca de su nombre real, su verdadera familia y el enigma de su existencia. Como en Tres corazones y tres leones de Poul Anderson, donde un hombre de misterioso nacimiento es arrebatado de un mundo para convertirse en el salvador de otro, el Jack de Zelazny llega a conocerse a sí mismo y la naturaleza de su búsqueda. Hasta tiene un «alma» externa que lo sigue en toda la última cuarta parte del libro; y también tiene una figura paterna en la forma del dios de piedra Estrella de la Mañana, quien en la última página es presentado con las manos extendidas esperando recibir a Jack cuando caiga de las almenas del castillo.
Como la mayor parte de la obra de Zelazny, Jack of Shadows está escrito en un estilo lacónico y levemente irónico, lleno de agudezas y expresiones poéticas. Es un escritor de considerables recursos lingüísticos, aunque se tiene la sensación de que no ha usado todo su talento en esta novela entretenida pero ligera. Ocasionalmente, la acción se desarrolla con demasiada rapidez; Zelazny escatima recursos y nos presenta escenas descuidadas. Sin embargo, tiene muchos momentos atractivos e ingeniosos, como el incidente del encarcelamiento de Jack en una joya que cuelga del cuello de su archienemigo, el Señor de los Murciélagos.
Ésta es una novela independiente, y como tal eficaz. La contribución más conocida a la moderna literatura fantástica de Roger Zelazny (nacido en 1937) es la llamada serie «Ámbar»: Nueve príncipes de Ámbar (1970), Las armas de Avalón (1972), El signo del unicornio (1975), La mano de Oberón (1976), Las cortes del caos (1978), etcétera, en una sucesión aparentemente interminable. Estas novelas, sobre las disputas intestinas de un grupo de principitos del mundo oculto y paralelo llamado Ámbar, son muy legibles y entretenidas al principio, pero empiezan a fatigar cuando uno se da cuenta del carácter del juego de cartas mezcladas que juega el autor.