La triangulación
Principio de la triangulación
Procedimiento que permite medir la longitud de un trayecto rectilíneo, por medio de una serie de mediciones angulares y de una sola medición lineal.
Para aplicarla es necesario:

—Formar una cadena de triángulos que cubran el arco, estableciendo una serie de señales elevadas a un lado y otro del arco. Cada cumbre debe ser visible desde las dos precedentes y las dos siguientes. Luego se ha de determinar el valor de los ángulos por medio de observaciones. Las mediciones geodésicas se efectúan con la ayuda del círculo de Borda.
—Medir, sobre el propio terreno, un solo lado de uno de los triángulos, base de la triangulación, que proporciona la escala de la triangulación. La medición se efectúa con ayuda de reglas planas.
—Determinar la dirección de los lados con respecto al meridiano. Para ello es preciso medir el ángulo que los lados forman con el meridiano, los azimuts.
Nos basamos para ello en un hecho trigonométrico: «conociendo los dos ángulos y un lado del triángulo, conocemos todos sus lados».
Luego es preciso determinar la amplitud del arco determinando las latitudes de ambas extremidades. Las mediciones astronómicas se efectúan con ayuda del círculo de Borda.
Luego es preciso reducir a la horizontal. Puesto que los vértices de los triángulos, materializados por medio de las señales, no están a la misma altura, los triángulos están inclinados. Para reducirlos a la horizontal es preciso medir el ángulo de cada lado con la vertical de las extremidades del lado, mediciones cenitales.
La redondez de la Tierra hace que los lados de los triángulos no sean segmentos de recta, sino ángulos. Con ayuda de fórmulas matemáticas se traslada el conjunto del dispositivo de cálculo al nivel del mar.