704 Esta habilidad táctica de Mao fue favorecida, sin duda, porque durante la guerra antijaponesa y la segunda guerra mundial las contradicciones entre la política maoísta y la estaliniana no afectaban de manera grave a los intereses soviéticos. Hubieran podido tomar un giro antagonista en el periodo que sigue a la capitulación del Japón si entre Washington y Moscú llega a perdurar el espíritu de Yalta. Pero la rápida deterioración de las relaciones entre las dos superpotencias hizo perder relevancia a las divergencias entre Mao y Stalin.<<