175 Radek devuelve la pelota “georgiana”, sacando a relucir los casos de Irlanda, la India, etc. Y argumenta con la necesidad de petróleo que tiene la república soviética. Otto Bauer está de acuerdo con Radek en la responsabilidad de los partidos de la II Internacional en una serie de violaciones de los derechos de los pueblos desde 1918, pero, dice: ”En el caso de Georgia son, de ambos lados, partidos proletarios y socialistas los que tienen la responsabilidad; es un ejército a cuya cabeza flota la bandera roja, el que esta vez representa la ocupación militar; y en todas partes donde el proletariado protesta ahora contra los actos de violencia del imperialismo, se le responde indicándole irónicamente Georgia.” Es posible que esta especulación de los líderes de la socialdemocracia, incluso de los que se situaban más favorablemente respecto a la revolución rusa, tuviera su influencia en la revisión que Lenin inicia poco después de la política bolchevique en Georgia, enfrentándose violentamente con Stalin.<<