Capitulo 32.
Nayala llamaba
casi cada día a su hermana, Vatiare siempre le daba evasivas al
responderla. Se suponía que todavía no le había dicho nada a Andrés
porque su estado no era el mas optimo para recibir una noticia así.
Nayala no sabía como pero su hermana siempre acababa
convenciéndola.
Pero esta vez Nayala ya no pasó más y
le comunico a su hermana que en tres días iba para
allá.
Ahora si que Vatiare se veía obligada
a hablar con Andrés.
Aun así pasaron los tres días y sabía
que su hermana estaba apunto de llegar, Andrés la notó nerviosa la
tarde anterior pero Vatiare no supo como darle la noticia, pensó
que quizás si veía a Nayala y a Esmeralda ante él sería un golpe
suficientemente fuerte como para hacerle reaccionar. Esperaba no
equivocarse y que los dos comprendiesen su decisión, ella se guiaba
por lo que el doctor Girau le había dicho, pero en su interior ella
sabía muy bien que no era mas que cobardía.
Esa mañana Vatiare estaba
especialmente nerviosa y no porque supiese que Nayala estaba apunto
de llegar era algo en su interior que la mantenía inquieta, la
última vez que hablo con su hermana habían quedado en que iría a
recogerla al aeropuerto.
La esperaba sobre las tres de la tarde
ese día se había concedido la licencia de no ir a trabajar Alice se
haría cargo de las visitas de ese día.
Vatiare iba de camino al aeropuerto entonces pensó en que no había abierto el móvil todavía. Encontró un montón de llamadas de su herma suponía que quería ponerse en contacto con ella antes de coger el vuelo. Pero Vatiare vio que había llamadas en horas en que se suponía que debía estar volando. Rápidamente llamó a su hermana.
- ¡ Por Dios
Vatiare, ya era hora hermana! _ Le dijo Nayala muy
nerviosa.
- ¿ Que ocurre, acaso no estáis
viniendo?_ Preguntó la joven preocupada_
- No mi amor, no sabes me robaron la
niña yo estaba en….._ Nayala se atrabancaba no podía hablar
claramente los nervios la podían._
_ A ver tranquilízate, ¿Me dices que
se han llevado la niña?
¿ Pero quien?
- Salazar…. Bueno sus hombres seguro
yo…._ Nayala lloraba desconsoladamente_
- ¡ Pero! ¿ Donde estás tu hora, está
Javier contigo?
- Noooo estoy sola Javier tenía una
operación y yo le dije que…._ Nayala volvía a llorar
desconsoladamente_
- Escucha vete a la policía denuncia
enseguida el suceso ¡ Me oyes Nayala! Enseguida antes de que puedan
sacarla del país.
Vatiare tenía un nudo en el estomago,
aunque no tenía que ver con que ella no hubiese dicho nada a Andrés
de que Nayala estaba viva ella se sentía culpable. No podía dejar
de pensar que si lo hubiese dicho las circunstancias habrían sido
otras.
Tomó una determinación fue rápidamente
a casa de Andrés dispuesta a contarle lo
sucedido.
La señora Magdalena estaba como
siempre atenta a quien entraba y salía de su establecimiento,
saludó a la joven y esta le devolvió el saludo sin pararse
siquiera, no tenía ninguna intención de darle
explicaciones.
Llamó a la puerta y Andrés desde
dentro la contestó, en unos segundos abría la puerta con una gran
sonrisa al ver a Vatiare a esas horas
inesperadas.
- ¡ Hombre! ¿ Como tu por aquí? _
Andrés vio que la cara de Vatiare era un poema, estaba claro que
alguna cosa sucedía y nada bueno_
- Andrés escúchame ahora te diré algo
que te causará impresión no pierdas el tiempo riñéndome por no
habértelo dicho antes lo siguiente es realmente serio como para
perder el tiempo con enfados.
Andrés la miraba expectante con los
ojos abiertos como platos.
- Me estas asustando ¿ Que te
ocurre?
- ¡ Allá va! Nayala y la niña están
vivas, están en Cádiz venían hacia aquí cuando unos hombres se
llevaron a Esmeralda.
- Andrés se llevó la mano al corazón,
se retiro el cuello de la camisa al sentir un ahogo y su cara
palideció de forma instantánea._
- Andrés perdóname te lo iba a decir
tenía que ser una agradable sorpresa
pero…..
- No es tu culpa todo sigue siendo
culpa mía, esos hijos de puta no pararan hasta dar con el dinero. ¿
Tu sabes alguna cosa?
- Si vi a Nayala en Barcelona
y…..
- Sabías que estaban vivas y
no….
- No ¡ Por Dios! Yo no sabía nada fue
el destino que nos cruzó, estuvimos una noche entera hablando
explicándome Todo lo que le había sucedido y yo le dije que tu
habías sobrevivido y que pensábamos que eran ellas las que habían
muerto yo solo quería….._ Vatiare arrancó a llorar, Andrés la
miraba y la veía tan desconsolada, algo pasó en su interior algo se
disparó en su cerebro veía la carita de Esmeralda y eso le dio
fuerzas.
Se acercó con la silla de ruedas hasta
ponerse al lado de la mesa, puso sus manos sobre ella y estiró su
cuerpo. Logró ponerse de pie pero desfalleció y volvió a quedar
empotrado en la silla de ruedas. La joven le miraba pensó en el
doctor Girau resultó cierto lo que el doctor
decía.
- Doctor Marín Nayala ha llamado en
varias ocasiones no sabemos que le ocurre pero pedía por usted con
insistencia y lloraba desconsoladamente.
- ¿ Pero donde
está?
- No sabemos doctor, será mejor que la
llame sin mas demora.
Javier se acercó a la sala de médicos
donde había dejado el móvil horas antes de ir a
quirófano.
- Nayala mi amor ¿Que ocurre, donde
estáis?
- ¡ Javier, mi niña me quitaron a mi
niña! _ Le decía desconsoladamente Nayala_
- ¿ Como? ¿ Pero que dices? ¿Quién se
ha llevado a la niña?
_ Javier estaba muy confundido no
pensó en ningún momento en Salazar_
- Javier estoy en comisaría ahora va a
venir el inspector Romero ¿ Puedes venir por
favor?
- ¡ Claro que si mi amor! En unos
minutos estoy ahí.
Javier pasó de cambiarse de ropa
recogió las llaves y la documentación de su taquilla y salió
velozmente para estar al lado de Nayala.
Romero llegó a la comisaría de la mano
de Esmeralda eso era lo mas inesperado que se podía imaginar
Nayala.
La niña se tiró a sus brazos y la
colmó de besos.
- Mami, mami tenía miedo mami._ La
niña lloraba pausadamente al sentirse ahora segura en brazos de su
madre_
- ¡Mi niña! Ya esta mi vida mami esta
aquí y no dejará que te ocurra nada malo.
Romero miraba la escena y se sentía
satisfecho. Desde que Nayala saliese del hospital no le había
quitado ojo de encima. Era vigilada día y noche la siguieron a
Barcelona , Romero que era perro viejo sabía que lo del dinero
debía existir y esos rufianes no lo dejarían perder en cuanto se
enterasen de que la mujer seguía viva irían a por ella, como así
fue.
Romero ya les tenia identificados solo
esperaba el momento oportuno para actuar y poder adjudicarles los
máximos cargos posibles.
En cuanto se llevaron a la niña de la
cola de embarque los hombres de Romero persiguieron a los
delincuentes sin perder el rastro. Los detuvo a todos en un piso
del centro de la ciudad.
Romero se sentía satisfecho, había
cogido cariño a aquella dulce niña y aunque tuvo que hacer que
pasase un mal trago sabía que no lo podía evitar era necesario para
su seguridad.
Javier entraba en comisaría
enloquecido pero pronto se calmó al ver a Nayala y la pequeña
Esmeralda a salvo.
Romero llamó a Nayala aparte debía
hablar con ella.
- Mire señora esto no va terminar si
usted no entrega el dinero y sabe también como yo que lo tiene
usted ¿ Cierto? _ Pregunto Romero mas asegurando que
preguntando._
- Si y me quema ¿ Que cree que debo
hacer? Yo hace poco me enteré que mi esposo sigue vivo y quizás
necesitaría de él para poder costearse su recuperación pero no
se…..
- El dinero me lo va a entregar a mi
yo le haré saber a Salazar que está en manos de la policía española
es la única forma que dejen de molestarlos ¡
Créame!
- Si claro lo que usted diga, le debo
la vida inspector.
- Por cierto su marido viene hacia
aquí, con su hermana tengo entendido.
- Pero ¡No es posible! Él estaba en…._
Nayala estaba confundida se suponía que Andrés estaba impedido y
sumido en una gran depresión._
- Bueno eso ya son temas familiares,
pero debe esperar su visita en pocas horas. Estoy seguro yo mismo
hablé con ella.
- ¿ Como? Usted no tenía ni idea
de….
- Señora….Me ofende yo siempre me creí
un buen detective. Vamos vayan para casa en unos minutos yo
personalmente ire para que me haga entrega del dinero. ¿ Le parece
bien?
- Si inspector como usted
diga.
Nayala volvió hasta donde se
encontraban Javier y la niña les cogió de las manos y se las
besó.
- Vámonos a casa. _ Dijo
Nayala_