Witold Pilecki, un residente polaco, se hace internar voluntariamente en Auschwitz (número de matrícula 4859, arriba) para organizar allí una red. Después se fuga y sigue luchando contra los nazis. Detenido en 1947 por la policía política comunista (abajo) es torturado, condenado a muerte y ejecutado. Pilecki fue rehabilitado en 1990