FÁBULA XV
La Rana y el Renacuajo
(¡Qué despreciable es la poesía de mucha hojarasca!)
en la orilla del Tajo
hablaba con la Rana el Renacuajo,
alabando las hojas, la espesura
de un gran cañaveral, y su verdura.
mas luego que del viento5
el ímpetu lento
una caña abatió, que cayó al río,
en tono de lección dijo la Rana:
«Ven a verla, hijo mío;
por defuera muy tersa, muy lozana;10
por dentro toda fofa, toda vana.»
si la Rana entendiera poesía,
también de muchos versos lo diría.