Los días van

Para Dorita y Jorge, una noche de pintura y canzonettas en el Mediterráneo

21/1/50

Los días van como las olas y los cantos,

su rubio viento y sus profundos verdes por las horas cambiantes.

En uno de ellos queda una bahía, en otro

un pánico de estrellas o delfines,

mientras un tiempo nuevo y sigiloso

con noches de distinto meridiano

filtra sus cuerdas pálidas por los compartimentos

y se mezcla en el vino que bebemos.

Un viaje, oh dulce pena en la raíz del cuerpo

que juega con sí mismo a ser igual, constante,

y a despertar distinto cada día, bajo cielos novísimos.