La niebla

STEPHEN KING

Stephen King es un fenómeno de las letras. Irrumpió en la escena literaria cuando aún no había cumplido los treinta años, con una novela de terror sobre una adolescente solitaria que poseía terribles poderes psíquicos: la novela se llamaba Carrie, y se convirtió en un auténtico best-seller. Al éxito de esa novela siguieron muchas más, que han hecho de él uno de los escritores más populares del mundo. King posee un notable talento para captar las vidas de los norteamericanos corrientes y los lugares donde residen. Son la gente que se puede ver comprando una hamburguesa en McDonald’s, en el partido de béisbol local o en la tienda del barrio. Y lo cierto es que ésa es una de las claves que ayudan a comprender las obras de King. King ha desarrollado plenamente un rasgo en el que Ray Bradbury fue pionero: sus relatos siempre hablan de personas identificables, cuyas vidas se ven alteradas por acontecimientos y fuerzas que trascienden de lo normal. Sus personajes, y el mundo en que viven, son increíblemente reales y detallados, y consigue que te sientas intensamente implicado en sus apuros y problemas. Eso, unido a su soberbio manejo del terror, hace que los lectores respondan a sus obras. Todas esas cualidades de King se encuentran en la aterradora novela corta que van a leer, que asimismo pone de manifiesto su don para crear narraciones rápidas, absorbentes y de una gran riqueza visual. Aquí, como siempre en King, personas corrientes deben enfrentarse a los elementos de que se componen las pesadillas, y la confrontación tiene lugar en un escenario familiar no muy alejado de sus casas.